Muere la cantante Leire Iribarne a los 24 años
La vocalista y teclista del grupo Diabolo Kiwi ha fallecido en un accidente de tráfico después de que un jabalí se colara en la autopista A-64.
La cantante Leire Iribarne, teclista y vocalista del grupo Diabolo Kiwi, ha fallecido a los 24 años de edad en un accidente de tráfico producido en la autopista A64 a la altura de la localidad francesa de Salies y en dirección a Bayona. Tal y como ha publicado este fin de semana ‘Diario Vasco’, el impacto se produjo como consecuencia de que un jabalí invadiera la carretera desatando una colisión múltiple en la que hasta otras siete personas resultado heridas.
Nacida en el municipio vascofrancés de Lasa, era una parte fundamental del grupo Diabolo Kiwi, el mismo que había formado en 2016 junto a Julen y Allande Etxeberri y Amaiur Epher. Juntos habían grabado el invierno pasado un nuevo disco que salió a la luz recientemente bajo el título de Uhin galduak (Olas perdidas). El pasado mes de diciembre, en la Azoka de Durango, presentaron un trabajo que ahora ha adquirido una nueva dimensión por ser el último en el que desgraciadamente participará Iribarne.
Iribarne y su grupo eran de sobra conocidos, especialmente en su tierra, donde eran ya unos habituales en los festivales y eventos de distintas ciudades de Gipuzkoa. En su última publicación en Instagram podemos ver fotos de su concierto en Mutriku, pero las nuevas restricciones les obligaron a cancelar algunas de sus nuevas citas, como la aparición que tenían para este mes de enero en San Sebastián.
Reducción de la mortalidad en las carreteras
España ha conseguido reducir considerablemente las muertes por accidente de tráfico en las últimas décadas, tal y como muestran los datos de Europa Press y el libro ‘Del infinito al cero. Así lo hicimos’ presentado por la Fundación MAPFRE el pasado año. Este último sitúa un descenso del 80% en la tasa de mortalidad por esta causa en los últimos 30 años, un descenso que se confirmó en 2020 cuando España se convirtió en el cuarto país de la Unión Europea con una menor tasa de fallecidos en este tipo de siniestros. Sin embargo, el caso de Leire refleja que todavía queda mucho por hacer para tratar de llevar la cifra lo más cerca posible del cero.