Mayka, de ‘La isla de las tentaciones’, revela todos sus retoques estéticos

Aprovechando los días posteriores a una cirugía de reducción de pecho, la influencer y exconcursante de La isla de las tentaciones 2 y de La última tentación, Mayka Rivera, ha confesado en su canal de mtmad todos los retoques estéticos que se ha hecho en su cuerpo. “Antes de la operación, existen otras cosas”, ha advertido la murciana antes de empezar con su lista de tratamientos.

“Antes de ir a La isla de las tentaciones yo llevaba los labios y ya está, aunque la gente decía que me había hecho de todo”, ha comenzado Mayka en el vídeo. “Antes se llevaban los labios finos y la raya del ojo diferente, pero las caras cambian con el paso del tiempo. Sí que es verdad que he cambiado, pero también por la edad”, ha aclarado la protagonista.

“Me he hecho el pecho y me he hecho el labio. A veces me hago bótox, pero no se me nota mucho porque me siguen saliendo arrugas; me quité el exceso de párpado porque tenía un complejo increíble y un lunar gigante, y lo último que me he hecho han sido los hilos tensores para fortalecer la zona de los ojos porque yo de por sí tengo el párpado caído”, ha explicado.

Sin embargo, ha negado haberse hecho nada en la nariz a pesar de todas las voces que surgieron tras sus apariciones posteriores a la emisión del formato. “No me la he tocado, porque con las narices operadas no tendría esta pedazo de tocha”, ha zanjado al respecto.

Pánico a las cirugías

A pesar de todos los retoques que se ha hecho Mayka, el único que ha precisado pasar por el quirófano ha sido el del pecho, una intervención a la que se ha sometido en dos ocasiones a lo largo de su vida. “Ni de coña me planteo volver al quirófano para otros retoques estéticos. Tengo pánico al quirófano, a las anestesias y a las cirugías”.

Además, ha criticado a las personas que se meten en el quirófano para “cualquier cosa” y ha llamado a sus seguidores a evitarlo. “El pecho, obviamente, te lo tienes que operar porque no puedes hacer nada. Yo me podía haber operado con 20 años pero me esperé a ser una persona más madura y con las ideas más claras. Antes, hasta que cumplí 25 años, me ponía relleno”.