Macaulay Culkin se apunta al proyecto de un director español

“Mi padre era un hombre abusivo. No tanto de forma física, aunque sí que hubo algo de eso, sino mental. Yo le pedía un descanso, quería irme de vacaciones por primera vez en mi vida, y él no dejaba de firmar contratos para más películas. Nadie me escuchaba. Mi padre tenía una cama tamaño gigante y una televisión enorme y a mí me hacía dormir con mi hermano en el sofá. Lo hacía para romper mi espíritu”.

Esa confesión de Macaulay Culkin (41) a la revista Time viene a resumir el calvario vivido por uno de esos niños prodigio de Hollywood que han acabado convertidos en ‘juguete roto’. Sin saber como lidiar con la fama y sin un entorno adecuado, con el paso de los años suelen aflorar problemas de todo tipo, como le sucedió al actor de Solo en casa y My Girl.

“Me retiré para desaparecer de la faz de la tierra. Pero años después comprendí que jamás podría deshacerme de mi fama”, añadía Culkin en la entrevista, que a lo largo de los años ha tenido disputas judiciales con sus padres por su fortuna, dilapidada entre unas cosas y otras, otros episodios poco agradables como cuando tuvo que testificar en el juicio contra su amigo Michael Jackson por abusos sexuales a un menor, o problemas con las drogas.

Pero en los últimos tiempos Culkin parece dispuesto a retomar su carrera como actor. Desde 2019 ha sido habitual verle tanto en algunas series (Dollface, American Horror History) como en la gran pantalla (Changeland) y ahora se ha apuntado al nuevo proyecto de Galder Gaztelu-Urrutia, el director de El hoyo, cinta con la que optó a tres Premios Goya, triunfó en el festival Internacional de Sitges y conquistó Netflix.

De este modo, el actor norteamericano se une al elenco de actores que protagonizarán el thriller pandémico Rich Flu, en el que destacan Rosamund Pike y Daniel Brühl. Está previsto que el nuevo proyecto del director vasco comience su rodaje en otoño de 2022 y la expectación generada por el mismo es máxima.