Griezmann ya tiene su estatua de cera en un museo con 140 años de historia

Antoine Griezmann ya tiene su propia figura de cera en uno de los museos con más historia de París. El futbolista del Atlético de Madrid se desplazó la pasada tarde a la capital francesa para recibir semejante honor en el Musée Grévin, enclave turístico y con una sección dedicada a las leyendas del deporte. “Estoy muy contento. Es un poco raro verme así, tan bien hecho”, expresó el de Mâcon.

La estatua refleja a Griezmann con la equipación de la Selección de Francia, con el dorsal 7 y con el futbolista realizando uno de sus gestos más populares cuando marca un gol. “Es un orgullo estar aquí”, apuntó Antoine, que destacó que es “un museo histórico en Francia” puesto que fue inaugurado en 1882. El delantero se suma así a una larga lista de celebridades con estatua en el Grévin como Brad Pitt, George Clooney o Carlos III, aunque relacionadas con el deporte encontramos a Messi, Cristiano Ronaldo, Zidane, Mbappé o Zlatan Ibrahimovic.

Pero lo realmente curioso es el nombre del primer futbolista que tuvo una figura en este mítico museo, un jugador que, como Griezmann, dejó su huella en el Atlético de Madrid: Larbi Ben Barek. El de Casablanca jugó durante seis temporadas en el conjunto colchonero a finales de los años 40 y principios de los 50 ganando 2 Ligas y una Copa Eva Duarte.

Ahora su figura convivirá con la de un Griezmann que acudió a la cita acompañado de sus padres, de su esposa Erika Choperena y de sus tres hijos, Mía, Alba y Amaro. Estos tres últimos vivirán uno de sus días más especiales dentro de un mes, el 8 de abril, cuando los tres, al mismo tiempo, celebrarán su cumpleaños en una coincidencia muy difícil de emular.