Un hombre de 60 años recurre a ChatGPT en busca de consejos de nutrición y acaba con una rara enfermedad del siglo XIX
El enfermo quería retirar la sal de su dieta y, como sustitutivo, empleó durante tres meses un producto destinado al mantenimiento de piscinas.
La Inteligencia Artificial se erige como un recurso cada vez más importante a la hora de buscar información o ideas para rutinas deportivas, viajes o dietas. Sin embargo, su información ha de ser siempre cogida con alfileres, pues el riesgo de que se invente cosas que puedan resultar perjudiciales para la salud todavía existe.
Y si no se lo creen, que se lo pregunten a un hombre británico de 60 años. El señor, cansado de consumir sal durante las comidas, le pidió a ChatGPT una alternativa. Este, en una respuesta que de ser una persona y no una máquina le habría conllevado sentarse delante de un juez por intento de homicidio, le recomendó el bromuro de sodio.
¿Qué sucede? Que este elemento químico no se usa en las cocinas desde hace más de 35 años. Donde sí se emplea es en el mantenimiento de las piscinas, de lo que se deduce que es una sustancia claramente perjudicial para el organismo, tal y como expone un informe de la revista Annals Of Internal Medicine.
Tras tres meses comiendo bromuro, el hombre empezó a experimentar síntomas como fatiga, insomnio, acné, ataxia y mucha sed. También tenía paranoias hasta el punto de requerir ser internado en un centro para enfermos mentales. Los médicos, al valorarle, descubrieron que padecía una enfermedad típica de finales del siglo XIX: el bromismo.
Entre el año 1800 y el 1900, los especialistas recetaban sales de bromuro para lidiar con algunas enfermedades, como el dolor de cabeza o la ansiedad. En su momento más álgido, un 8% de los ingresos psiquiátricos tenían que ver con un consumo de bromuro, por lo que la Agencia de Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos suspendió su consumo.
Noticias relacionadas
El hombre, pese a haber ingresado muy enfermo, consiguió mejorar su pronóstico en tres semanas gracias a una terapia intensiva de fluidos intravenosos y una corrección electrolítica. Además, se llevó un importante aprendizaje sobre cómo usar la IA, pues al no haberle preguntado por los riesgos de tomar bromuro, esta no le informó al respecto.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí