Ainhoa Arteta habla sobre los abusos sexuales que sufrió cuando era niña

La cantante Ainhoa Arteta acudió este sábado a la casa de Bertín Osborne para protagonizar una nueva entrega de ‘Mi casa es la tuya’. Alí charló largo y tendido con el presentador y artista español a quien le contó varios capítulos de su vida en los que sufrió como nunca hubiera imaginado. Entre otros temas, la soprano española habló sobre los abusos sexuales que sufrió cuando era joven o sobre el cólico nefrítico que estuvo a punto de acabar con su vida.

Cundo la artista tenía solo seis años, un hombre abusó de ella y jamás fue tratada por un psicólogo. Sus padres decidieron quitarle importancia: “A los seis años, cuando yo iba a jugar con mis cromos, un tío me pidió que le ayudase a bajar los paquetes de casa de su madre y yo le hice caso. Según subía las escaleras, esa persona iba haciendo algo que sabía que no estaba bien. Me salvé gracias a mis gritos porque las vecinas salieron. Imaginaros cuál fue mi trauma que cuando llegué a casa me había defecado encima”, contó Arteta en ‘Mi casa es la tuya’.

“En aquellos años no había psicólogos ni te trataban y mis padres lo único que decían era que no se hablase del tema para que se me olvidase”, añadió la soprano. Pero esta no fue la única experiencia traumática de Arteta con un hombre pervertido. Cuando estudiaba en Nueva York, un individuo la violó antes de llegar a su apartamento:

“Cuando estudiaba en Nueva York, una hombre me siguió desde el metro y me violó justo antes de entrar en mi apartamento. Se coló entre las dos puertas que había en mi apartamento. No sé si estuve una o dos horas tirada en el suelo y no podía reaccionar, solo temblar”, contaba Arteta.

“Estas cosas te dejan muy marcada y ahora no aguanto ni un susto. De hecho, me llamaban ‘Lady Corcho’ porque no me hunde nadie. Estoy convencida de que estos dos episodios de mi vida han hecho que sea mucho más reticente a las relaciones”, explicaba la soprano que se ha casado y divorciado hasta en cuatro ocasiones.

En el amor

“Siempre he sido más bien arisca y he dado más de un bufido y de cien. Soy siempre yo la que escojo y se me da fatal escoger. Las relaciones que he tenido siempre han sido longevas y nunca he sido infiel”, declaraba la soprano que tiene dos hijos de sus matrimonios con Dwayne Croft y Jesús Garmendia.

A punto de morir por un cólico nefrítico

Después de sufrir las duras consecuencias de la COVID-19, Ainhoa Arteta estuvo a punto de morir por una grave infección: “Casi me muero, aunque yo no me enteré prácticamente hasta después. Sufrí una sepsis provocada por un cólico nefrítico que se complicó y que me provocó un fallo multiorgánico”, ha explicado en ‘Mi casa es la tuya’.

“Me tuvieron que trasladar en helicóptero y casi no llego al hospital. Ya en el Hospital sevillano Virgen del Rocío, los médicos tuvieron que tomar una decisión complicada. Me indujeron un coma y estuve así seis días. Cuando salí del coma, me enteré de que me daban tres horas de vida porque no reaccionaba ya a ningún medicamento”, señala.

“Solo me quedaba la penicilina, a la que yo era alérgica desde pequeña. Los médicos decidieron probar porque no había más solución y la penicilina me dio una alergia cutánea, pero me salvó. Desde ese día yo celebro la vida, por muchas cosas que me pasen”, añade.

“Tuvieron que operarme y tengo varios injertos y amputaciones. A raíz de una de las intubaciones se me cerró un ganglio de la cuerda derecha y me quedé sin voz, sin poder hablar ni cantar. En noviembre me operaron a cuerda abierta y todo salió bien”, cuenta.

Pero a pesar de lo mal que lo ha pasado en su vida, Arteta confiesa: “Soy una persona afortunada y le puedo dar gracias a la vida porque he podido dedicarme a lo que siempre me ha gustado, he tenido hijos y no me he dejado nada en el tintero”, concluye Ainhoa Arteta.