El mejor spin off de la historia de los videojuegos según la redacción de MeriStation

Las grandes franquicias de videojuegos a menudo son como transatlánticos que navegan de un género a otro con intención de pescar en cada puerto. Y viendo los resultados de sus travesías, no vamos a ser nosotros quienes se quejen. Muchos de nuestros títulos favoritos, como Persona o Mario Kart, provienen de eso mismo, de un experimento, de un salto al vacío. Surgen de las ganas de reinventarse, pero manteniendo una idea, unos personajes o una ambientación. De innovar sin cambiar de alma. Algunas de las criaturas surgidas así han terminado siendo tan exitosas y trascendentes para el medio que cuesta recordarlas como un producto derivado y secundario. Sin embargo, ha sido preguntar a la redacción de MeriStation por los mejores spin offs de videojuegos de la historia y surgir una innumerable retahíla de ejemplos y obras maestras que nunca está de más recordar. ¿Cuál sería para vosotros el más importante?

Final Fantasy Tactics

“Había una vez un estudio pequeño y talentoso llamado Quest Corporation que empezó su andadura creando juegos de rol, estrategia y tenis de mesa para Famicom y Game Boy. Un buen día, ya para Super Famicom, crearon uno de esos juegos que queda para la historia: Ogre Battle: The March of the Black Queen, al que le siguió el todavía más excelente Tactics Ogre, que terminó de demostrar que en ese equipo había un talento incuestionable, dirigido por un director que estaba llamado a grandes cosas: Yasumi Matsuno. El equipo terminaría por coronarse con uno de los mejores juegos de N64, Ogre Battle 64, antes de ser finalmente comprado por una Square que, con buen criterio, les puso a hacer otro juego de estrategia, dándole además el sello de Final Fantasy, ya convertido en un nombre de reconombre internacional. El tono de su magnífica historia muy poco tiene que ver con lo que era Final Fantasy en ese momento, pero sirvió como gancho para introducir a los jugadores en una trama shakesperiana repleta de política, religión, muerte y traición, que ha quedado como un absoluto referente. Otros Tactics llegaron después, pero ninguno con el halo de gran obra que todavía desprende el juego original”.

Portal y Forza Horizon

“Ser el responsable de maquetar este tipo de textos tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, como todo en la vida. La buena es que recibo antes que nadie mi dosis de panenkismo videojueguil y puedo hartarme a discutir (perdón, debatir) con los autores implicados. La mala, que a veces me siento en la obligación de cambiar mi texto a última hora para no repetir y añadir algo más de variedad a la lista. En esta ocasión iba a entregarme en cuerpo y alma a desgranar las bondades de Metal Gear Rising: Revengeance, pero viendo que ya lo hace algún compañero, prefiero mencionar dos nombres que también se me haría injusto olvidar en un debate así. Por un lado está Portal, uno de los mejores juegos de puzles que jamás he probado. Si Valve no le tuviera miedo al número tres, lo más probable es que tampoco hubiéramos conocido a GLaDOS, uno de los grandes villanos de la historia de los videojuegos. La primera parte fue un alarde de genio jugable. Viene recogida en el diccionario como sinónimo de innovación. A su vez, la segunda añadió todo el resto de aspectos que se le pueden demandar a un videojuego. Historia, duración, gráficos, multijugador. Todo con un gusto y un nivel exquisitos. En cuanto a Forza Horizon, qué decir. En su día, el catálogo exclusivo de Xbox lo conformaba un tenedor compuesto cada año por las mismas púas: Halo, Gears of War, Forza Motorsport y Fable. El spin off de Playground Games nació al amparo de la tercera y ha crecido tanto como para opacarla y hasta comerse también a la saga de Lionhead. Creo que a menudo no somos conscientes de lo que eso dice de su calidad”.

Luigi’s Mansion

“El primer Luigi’s Mansion para GameCube siempre ha sido mi spin-off favorito. Esa mezcla de la fórmula Resident Evil y el universo Mario me cautivó desde el primer momento. También me gustó mucho Judgment, surgido de la saga Yakuza y aunque sé que la mayoría va a decir Mario Kart, yo apuesto por uno de sus rivales en la pista: Diddy Kong Racing, cuyo modo historia sentaba de maravilla a las carreras. ¿Qué más tenemos? Bueno, no tengo del todo claro si llamarlo spin-off, pero Silent Hill: Shattered Memories me parece un auténtico tapado, ya que si bien es cierto que no se sienta a comer en le mesa de los dos primeros títulos de la franquicia, también lo es que cuenta con una de las narrativas más potentes que se han visto nunca en un juego de terror. Por último, me gustaría reivindicar lo divertidos que resultan Dragon Quest Builders y su segunda entrega”.

Spin off de Metal Gear y Uncharted

“Tengo muy claro mis dos spin off favoritos de siempre, aunque no tanto cuál de los dos me gustó más. Uno de ellos sería Metal Gear Rising: Revengeance, un hack & slash que cuando peor pintaba, Konami tomó la sabia decisión de recurrir a Platinum Games en su mejor momento, y que los nipones se encargaron de llevar a buen puerto. Y qué resultado dio: acción endiablada, un sistema de combate con mucha personalidad, de los que solo Platinum son capaces de crear, batallas contra jefes exigentísimas y un protagonista, Raiden, que se resarció con creces de la decepción que supuso a muchos fans tener que controlarlo en Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty. El otro título del que tendría que hablar es Uncharted: El legado perdido, del que incluso la definición de spin off se queda corta. Concebido originalmente como expansión standalone de Uncharted 4, el juego protagonizado por Chloe y Nadine podría ser considerado perfectamente como una entrega de la saga en pleno derecho por todo: duración, trama, gameplay, amplitud... El juego que demuestra que la saga puede seguir adelante sin Nathan Drake, ejem, Sony, ejem...”.

Fist of the North Star: Lost Paradise

“Mi spin-off favorito es Fist of the North Star: Lost Paradise, que combina con maestría la jugabilidad de la saga Yakuza con el brutal universo de ‘El Puño de la Estrella del Norte’. Se trata de un juego con licencia oficial del manga de Tetsuo Hara y Buronson que nos mete en la piel de Kenshiro como héroe del post-apocalipsis y que se queda a caballo entre una historia nueva y un retelling de la obra original. Tiene acción a raudales, es tremendamente divertido, cuenta con muchísimo contenido y como es habitual en la saga, también sirve para rescatar y remasterizar títulos clásicos de Sega como Hokuto no Ken (aquí llegó como Black Belt), Space Harrier, Out Run y Super Hang-On. Una auténtica joyita oculta de PlayStation 4”.

Resident Evil: Outbreak

“Si hay un spin off que adoro con locura es Resident Evil: Outbreak File 1/File 2. Capcom supo llevar lo mejor de la saga al terreno online con escenarios totalmente tridimensionales manteniendo la exploración, los sustos, los rompecabezas y añadiendo zombies con mayor inteligencia así como otras espeluznantes criaturas. ¡Ah! ¡Incluso toda una fauna de un zoológico! La comunicación por señales era fundamental para superar los retos —bendito MSN Messenger que nos ayudaba en las partidas— y ambos videojuegos dejaban píldoras de información sobre lo ocurrido en otros títulos. Un montón de personajes a escoger —cada uno con sus fortalezas y carencias—, gran variedad de escenarios y diferentes modos de juego. Se ha intentado replicar a posteriori la propuesta de ambos Outbreak en entregas más adelantadas, pero ninguno ha logrado superar lo que consiguieron los juegos de PlayStation 2. Espero que Capcom recupere este spin off porque a “los locos de Outbreak” nos darían la mejor noticia en décadas”.

Fire Emblem: Warriors

“No soy particularmente fan de los juegos Warriors de Koei Tecmo, pero sí de sus colaboraciones con otras franquicias. La primera con la que me topé fue el famoso Hyrule Warriors, que me hizo revivir mi infancia y adolescencia al dejarme jugar con un sinfín personajes de los títulos de The Legend of Zelda. Pero a Fire Emblem le tengo especial cariño, y por eso prefiero los spin-offs basados en esta saga. Fire Emblem Warriors me encantó en su momento, aunque sentí que se quedó corto al limitarse a incluir personajes de los juegos de Akaneia y Fates (con contadas excepciones). Eso no me impidió disfrutar de manejarlos con más libertad, de la acción trepidante y de los remixes de la banda sonora. Por su parte, Fire Emblem Warriors: Three Hopes me dejó impresionado de principio a fin, al explorar posibilidades de la historia de Fódlan que Three Houses había dejado en el tintero. Se podría decir que es su complemento perfecto. En general, aunque no se puede decir que sean títulos equiparables a aquellos que homenajean, son un tributo a todo aquello que los fans amamos”.

Judgment

“Entre mis sagas favoritas se encuentra la serie Yakuza, de Sega. Desde sus inicios las aventuras de Kiryu Kazuma en las calles de Kamurocho captaron mi atención para ver las mejoras jugables y técnicas en cada juego, sin olvidar el desarrollo argumental y el contenido secundario, que ha ido a más con cada entrega, especialmente añadiendo nuevos personajes controlables y localizaciones que explorar. Con el final de la historia de Kiryu y el cambio a jugabilidad RPG, empecé a sentir una desconexión de la saga que sólo la aparición de Judgment y su secuela han podido aplacar. Han mantenido la esencia jugable de la serie y mejorado su fórmula hasta convertirse en una de mis sagas spin off predilectas del panorama reciente. El encanto de la serie no sólo radica en sus combates sino en el carisma de su protagonista, Takayuki Yagami, así como en su desarrollo. Con un enfoque centrado en la investigación criminal, usamos diferentes gadgets y disfraces para conseguir pruebas, logrando que las historias de ambos juegos mantengan el interés por ver como se desenvuelve la trama. Sin olvidar el contenido secundarios con las sub-historias, desafíos y minijuegos varios que incluye”.

Pokémon Mundo Misterioso

“Para cuando llegó la tercera generación, Pokémon ya gobernaba la cultura pop. Hoenn perpetuó la locura desatada por Kanto y Johto, por Ash en el anime y por los tazos en los patios. Era un momento dulce, de dominio incontestable. Un momento en el que, desde luego, la franquicia podía permitirse el lujo de relajarse. No lo hizo. La ambición de Rubí y Zafiro desbordó a la saga principal e inundó a los spin-off. De entre todos ellos, Pokémon Mundo Misterioso es el que mejor encarna las ganas por romper con la norma, por intentar cosas nuevas. Poniéndonos en la piel de un pokémon, Chunsoft nos mostró el lado más humano de los monstruos de bolsillo. Aquel Equipo de Rescate Rojo/Azul hablaba de las ilusiones y los miedos de las criaturas, dotándolas de personalidad con un guion sorprendentemente elaborado. Jugablemente, esta serie derivada añadió elementos de roguelike y dungeon crawler a la franquicia para romper con los esquemas del JRPG impuestos por la saga principal. Una fórmula refrescante que alcanzó el cénit con Exploradores del Tiempo/la Oscuridad/el Cielo, que para más de uno suponen lo mejor que nos ha deparado la saga. Cualquiera que lo haya jugado tendrá un lugar especial para el Gran Bluff y Grovyle en su memoria. Más tarde llegaron otras entregas, ninguna tan aclamada por sus fans. Aun así, los miembros del Pokégremio seguimos aguardando el regreso por todo lo alto del mejor spin-off de Pokémon”.

Paper Mario

“Diversión nostálgica y entretenimiento puro. Y no, no habla mi niño interior cuando os digo que Paper Mario es uno de los mejores spin offs del fontanero rojo. Conocí esta saga hace relativamente poco. Más concretamente en aquel año fatídico (también conocido como 2020) en el que Paper Mario: Origami King llegó a mí casa gracias a la recomendación de una amiga. Desde ese momento, mi mejor amiga. Esa diversión pura e inocente, un humor absurdo lleno de frases desternillantes y situaciones que no se me olvidarán nunca. Obviamente no me quedé ahí y jugué a Paper Mario 64 gracias a Nintendo Switch Online y a La Puerta Milenaria (y su posterior remake) y quedé igualmente maravillado con esos personajes míticos de Mario haciendo de mafiosos, cocineros o mayordomos. Hacía tiempo que una saga no me hacía sentir esa despreocupación que sentías cuando eras niño. En cuanto tenga tiempo en esta vida de adulto aprovecharé para jugar los que me restan y volver a sentir esa diversión nostálgica que solo Paper Mario ha conseguido”.

Mario Kart

“A estas alturas no hace falta presentar una saga de videojuegos como Super Mario, el buque insignia de Nintendo y uno de los pilares de la industria, pasando a formar parte de la cultura popular en todo el mundo desde ya hace décadas. Aunque el universo del fontanero va mucho más allá de las plataformas clásicas, con numerosos spin-off centrados en toda clase de géneros: deportes, velocidad, RPG, puzles y más. Y es precisamente la franquicia Mario Kart una de las más queridas desde prácticamente mis inicios en esto del videojuego. Ya desde el primer título en Super Nintendo las partidas con los amigos fueron tradición durante años; aunque la llegada de Mario Kart 64 fue toda una revolución, tanto a nivel gráfico como jugable. Los piques eran antológicos, ya sea a través de carreras o el adictivo modo batalla, a través del cual reventar los globos de los rivales en intensas partidas a cuatro. ¿Cómo nos lo hacíamos para jugar en televisores de menos de 30 pulgadas a pantalla partida? ¡Ahora parece imposible! Y el resto es historia, con diferentes entregas hasta nuestros días y de las que he disfrutado sin falta a través de las diferentes consolas de Nintendo: Mario Kart: Super Circuit para Game Boy Advance, Mario Kart: Double Dash!! de GameCube, Mario Kart DS de Nintendo DS, Mario Kart Wii para Wii, Mario Kart 7 de Nintendo 3DS o Mario Kart 8 Deluxe en Switch, todos ellos ocupan un espacio en mi corazón nintendero. ¡Ya estoy deseando saber algo de una más que probable nueva entrega para la sucesora de Switch!”.

Persona

“No es la primera vez que un spin-off acaba siendo mucho más popular que la saga de la que procede, pero el caso de Persona es uno de los más contundentes. Hija de Shin Megami Tensei, ha terminado convirtiéndose en uno de los emblemas del JRPG y una de las grandes marcas de Atlus. Las diferencias entre la saga principal y su spin-off son claras, pero sin olvidar ese toque oscuro y caótico que tanto atrae de Megaten. El componente social y de gestión del tiempo, junto a un mayor enfoque en la historia y los personajes le hizo diferenciarse rápidamente de SMT, y con el paso de las entregas fue cada vez más cautivadora para un público que actualmente es masivo y se cuenta por millones. Desde las dos geniales y oscuras primeras entregas, pasando por un Persona 3 que ha vuelto en forma de remake y fue la ruptura inicial hacia ese camino a lo más alto; un Persona 4 que en todas sus versiones es excelente y, finalmente, Persona 5 fue el boom definitivo para una saga que comenzó como spin-off, pero hace tiempo que se puso por delante de la que fue su origen”.

Halo ODST

“Llegó haciendo poco ruido y con el paso del tiempo se convirtió en uno de los favoritos de los fans. Halo 3: ODST está en un rincón muy especial de mi memoria como jugador. La batalla cambiaba de perspectiva para controlar a un soldado de élite humano. Ya no éramos el Spartan de enorme armadura: ahora sentíamos la fragilidad de cada pegote de plasma, de cada impacto del cañón de un Ghost. Los primeros en llegar y los últimos en salir, el lema de los ODST que se plasma a la perfección en la soledad del Novato por las calles de Nueva Mombasa. Es hablar del juego y recordar los acordes de Deference for Darkness. Si alguna vez alguien pregunta qué era Bungie, este juego sirve como ejemplo. Qué buenos tiempos… que lamentablemente no volverán”.

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