Bungie se une a PlayStation Studios: la relevancia de Destiny y su pasado
Repasamos la trayectoria de Bungie más allá de Destiny y Halo, y señalamos algunas cifras que dan sentido a la unión del estudio con PlayStation.
La compra de Bungie por parte de PlayStation es otro movimiento más en una industria en la que los gigantes comienzan a marcar territorio. Pese a que no es una adquisición tan grande como la de Microsoft con Activision, los 3.600 millones de dólares que ha pagado Sony se traducen en colocar a la compañía en uno de los estandartes del juego servicio actual.
En su trayectoria podemos encontrar éxitos clave para el videojuego, como es el caso de la saga Halo. Sus dos ultimas propiedades intelectuales inéditas han marcado un hito en sus respectivos periodos. Pero Bungie tiene algo de repertorio alejado de los grandes nombres. Sus cifras nos ayudan a comprender el movimiento.
Antes de Halo: camino a Marathon
Desde su fundación en 1991, Bungie siempre ha tenido predilección por el shooter. Más allá de esos primeros juegos tras su gestación, es con Marathon cuando comienza su idilio con el aficionado. De alguna forma muchos lo llaman la semilla que gestó lo que posteriormente se convertiría en Halo.
El contexto de ciencia ficción, unido a su apuesta por una jugabilidad sólida sin olvidar intentar narrar la épica, daría como resultado potros dos juegos más en los años sucesivos. La trilogía Marathon terminaba en 1996, pero le seguirían otras IP como Myth y Oni. Todos prolegómenos de lo que ocurriría a partir del 2001: el Jefe Maestro ya era presente.
Referente en el juego servicio
La franquicia Destiny, especialmente a partir de la segunda entre, atrajo la mirada de fuertes inversores. China fue uno de los grandes aliados para los estadounidenses. En 2008 recibieron una inyección de 100 millones de dólares por parte de NetEase. Se trata de la quinta compañía en el sector del videojuego con mayor valor en el mercado: 66.904 millones de dólares. Grasshopper Manufacture y una pequeña porción de las acciones de Quantic Dream son dos de sus movimientos más sonados.
Los datos que genera la saga son especialmente relevantes. A fecha de septiembre de 2019, Destiny se convertía en la séptima franquicia más vendida de la historia de Estados Unidos. En concreto, es la segunda marca en el género first person shooter en la clasificación del mismo comunicado. ¿Sabéis quién mantiene el primer puesto? Sí, Call of Duty. Sus ingresos anuales se estiman entre los 100 y 500 millones de dólares netos.
Actualmente cuentan con Destiny 2 base como puerta de entrada a los usuarios en formato free to play. Es a partir del lanzamiento de las expansiones y sus pases anuales donde apuestas buena parte de su monetización, entre otros elementos dentro del juego.
El año pasado conocíamos la ampliación de sus oficinas en Bellevue, Washington (Estados Unidos) hasta superar los 19 mil metros cuadrados. En 2022 planean abrir una oficina internacional en 2022 establecida en la ciudad de Ámsterdam, Países Bajos. Trabajan tanto en los contenidos de Destiny 2 como en una nueva propiedad intelectual de la que no se han compartido datos.
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Referencias: Infact | Mat Piscatella | Bungie
- Acción
Destiny 2, desarrollado por Bungie para PC, PlayStation 4, Xbox One y Stadia, es la secuela del título de acción first person shooter Destiny. La última ciudad segura de la humanidad ha caído ante una abrumadora fuerza invasora dirigida por Ghaul, el imponente comandante de la brutal Legión Roja, que ha despojado de su poder a los guardianes y obligado a huir a los supervivientes. Te aventurarás en mundos misteriosos e inexplorados del sistema solar para descubrir un arsenal de armas y nuevas habilidades de combate devastadoras. Para derrotar a la Legión Roja y hacer frente a Ghaul, deberás reunir a los héroes de la humanidad que han sobrevivido y luchar juntos para recuperar nuestro hogar. El juego base de Destiny 2 está disponible de forma gratuita.