Guía Dark Souls 3, Derrota a los Bosses más difíciles - Asentamiento de no muertos

Asentamiento de no muertos

Una vez llegamos a esta zona, avanzamos por las escaleras. Las puertas del fondo se abrirán para dejar paso a una horda de perros que atacarán a los adoradores que hay en la zona. No pases por la puerta una vez acabes con ellos y avanza en dirección contraria. Encontrarás una gran cantidad de peregrinos muertos. Todos salvo uno. Se trata de Yoel de Londor. Tras hablar con él, puedes darle la oportunidad de ponerse a tu servicio. Una vez lo hagas, estará en el Santuario de Enlace. Vuelve por donde viniste y esta vez abre la puerta usando la palanca. Derrota al enemigo que ahí te espera y enciende la hoguera. Avanza y atraviesa la casa, con cuidado de los enemigos que encontrarás dentro. Hay algunos objetos, así que tómate tu tiempo para explorar el edificio. Una vez salgas, te encontrarás con un grupo grande de enemigos. Ten mucho cuidado al enfrentarte con ellos. El más gordo curará a los demás, así que mantén un ojo en él todo el rato. En el árbol en llamas podrás encontrar un fragmento de estus. Avanza por la izquierda, hasta que llegues a una casa con la puerta cerrada. Entra, y en la parte de la derecha, entre la gran cantidad de cadáveres colgados podrás ver un hueco en el suelo. Tírate por él y conseguirás el Juramento del Guerrero de la Luz Solar. Regresa y vuelve a la zona del árbol quemado. Avanza por la zona de la derecha, sobre un puente de madera. Te encontrarás a unos cuantos enemigos. Una vez los despaches, verás un puente de piedra. Salta por el lado derecho aunque te hagas un poco de daño, justo delante encontrarás la segunda hoguera de la zona.

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Un poco más adelante, podremos encontrar a Cornyx del Gran Pantano atrapado en una jaula en lo alto del edificio. Si hablamos con él, accederá a enseñarnos piromancias y le podremos encontrar en el Santuario del Enlace. Baja del edificio y encamínate hacia la zona que te falta por explorar. Verás una iglesia a la que no podremos entrar aún y, en dirección contraria, unas alcantarillas. Es hora de explorarlas. Encontrarás grupos de ratas de todos los tamaños. No las dejes rodearte. Cuando subas la escalera, encontrarás un puente de madera con una hoguera al final. Vuelve por donde viniste, cruza el puente de piedra enfrentándote a los enemigos armados con calderos gigantes y avanza hasta que encuentres al caballero armado con un martillo gigante y armadura de dragón. Nos advertirá de que en la iglesia nos espera solo la muerte. Al entrar, subirá un ascensor con un Siegward de Catarina. Él nos avisará acerca de alguien que nos dispara desde las alturas cuando nos acercamos a cierto árbol. Si activas el ascensor sin tomarlo, un segundo tomará su lugar y podrás ir a la parte superior de la catedral. Allí, encontrarás al gigante del que habla Siegward. Si ofreces una muestra de amistad, no solo no nos disparará cuando estemos abajo, sino que nos ayudará disparando a los enemigos que se le pongan a tiro.

Cuando tomes el ascensor de vuelta, podrás oir a Siegward pensando. Salta al piso intermedio y le encontrarás pensando en un balcón. Si hablas con él, luchará codo con codo contigo para destruír al demonio de fuego que está abajo. Una vez muerto, te recompensará con gestos y un siegbrau. Avanza por el pueblo y podrás conseguir el anillo de Flynn en lo alto de una casa custodiada por dos mujeres clérigo de fuego. Ten extremado cuidado con ellas, si no quieres que te den un abrazo fogoso mortal.

De vuelta en la catedral, esta vez toma el ascensor hacia el piso inferior. Encontraremos un soldado de hielo, extremadamente rápido. Acaba con él y serás recompensado con la Espada Recta de Irithyll. Abre la puerta y lograrás una nueva hoguera. Una vez la tengas, podrás viajer de vuelta a la hoguera que estaba al final de la alcantarilla, el Puente Desvencijado, ya que aún tenemos cosas que hacer aquí.. Avanza por el camino y, cuando llegues a la zona del abedul blanco verás como no solo el gigante de la catedral no te ataca sino que matará sin piedad alguna a todos los enemigos que se te acerquen. En la parte de la izquierda hay un equipo de clérigo completo. Ten cuidado al cogerlo ya que habrá un enemigo esperándote para tenderte una emboscada. Cruza por la casa. Una buena idea ahora que tenemos el apoyo del gigante es atraerlos afuera y dejar que él se encargue de ellos. Llegaremos a la catedral y ya podremos abrir la puerta principal. Justo enfrente, nos espera el boss de esta zona, el Gran Árbol Corrompido.