Los otros Espargaró: Petr Cech, Michael Jordan, Laura Nicholls...

De MotoGP al ciclismo. Este lunes, confirmando un secreto a voces, el Lidl-Trek, uno de los equipos más importantes del World Tour, anunció la incorporación de Aleix Espargaró, con 12 podios y tres victorias en la máxima categoría del motociclismo mundial. Una noticia de gran impacto que se ha repetido más veces. A lo largo de la historia, han sido muchos los deportistas que han estado en contacto con más de una disciplina. En algunas ocasiones, en categorías inferiores o de forma superficial; otras, como en el caso de Espargaró, pisando el mundo profesional con varios deportes. A continuación, se repasan varios de estos últimos casos.

Michael Jordan (baloncesto y béisbol). Seguramente, es el cambio de deporte más recordado de la historia. El 6 de octubre de 1993, con 30 años, Michael Jordan, después de ganar su tercer anillo seguido con los Chicago Bulls, dijo adiós al baloncesto por primera vez. Cuatro meses después, el 7 de febrero de 1994, firmó con los Chicago White Sox, propiedad del magnate Jerry Reinsdorf, también propietario de los Bulls, que le mantuvo el sueldo. Del baloncesto, en el que muchos le consideran el mejor jugador de todos los tiempos, al béisbol, deporte al que llegó por una promesa a su padre, que había fallecido recientemente. Jordan jugó 127 partidos con los Birmingham Barons, equipo de ligas menores de los White Sox, antes de volver al básquet, con su recordado “I’m back”, para conquistar otros tres anillos seguidos.

Jesús Angoy (fútbol y fútbol americano). De para a patear. Jesús Angoy llegó al primer equipo del Barcelona en 1994, de la mano de Johan Cruyff y tras la marcha de Andoni Zubizarreta. Fue la cima de su carrera como potero profesional, con sólo nueve partidos en la liga española. Después, sin embargo, se reinventó para convertirse en una referencia del fútbol americano. En 1996, Angoy pasó de ser portero de fútbol a kicker de los Barcelona Dragons, equipo en el que llamó la atención de la NFL, recibiendo una oferta de los Denver Broncos en 1999, año en el que habían sido campeones.

Chris Hoy (ciclismo en pista y automovilismo). Este año, desgraciadamente, Chris Hoy fue noticia por revelar que sufre un cáncer terminal. En su trayectoria, brillan hazañas al alcance de casi nadie. El escocés, una leyenda de la disciplina, ganó seis medallas de oro olímpicas en ciclismo en pista, siendo el segundo deportista más laureado del olimpismo británico, solo tras el también ciclista Jason Kenny. Su trayectoria deportiva, sin embargo, no se quedó sobre las dos ruedas. Una vez retirado del ciclismo, Hoy también participó en las 24 horas de Le Mans en 2016.

Petr Cech (fútbol y hockey hielo). Sigue en activo. Y sigue parando. Petr Cech, leyenda del Chelsea, equipo en el que consiguió 15 títulos, colgó los guantes en 2019, tras cuatro temporadas en el Arsenal y 20 como profesional. Un año después de ello, cambió el icónico casco que llevó durante gran parte de su carrera como futbolista por las aparatosas protecciones del hockey hielo, deporte de gran tradición en su país, la República Checa, y en el que también destacó desde temprano. Debutó con el Guildford Phoenix, de la División Suroeste NIHL 2, la cuarta categoría británica, y lo hizo con un 97% de paradas. Sus números le permitieron ir escalando hasta los Oxford City Stars, de Segunda. El año pasado, llegó a debutar en Primera División, la Elite League, con los Belfast Giants.

Diego Forlán (fútbol y tenis). Uno de los casos más recientes. Hace poco más de un mes, a sus 45 años, Diego Forlán debutó en el tenis profesional. El uruguayo, leyenda del Atlético de Madrid, equipo en el que marcó 96 goles en 198 partidos, en el Challenger de Montevideoformó pareja de dobles con el argentino Federico Coria . No pudo pasar de primera ronda, pero cumplió un sueño que se puede alargar. “Nunca habría imaginado esto, es bonito medirme a profesionales y hay que tener valentía para hacerlo. No sé si jugaré algún partido más como profesional, pero tengo opciones de jugar torneos ITF en la clase +45 como estaba haciendo”, dijo tras el partido.

Laura Nicholls (baloncesto y balonmano). Otro caso de este mismo año. Pillando por sorpresa a casi todo el mundo, en septiembre, Laura Nicholls, una de las jugadoras más laureadas de la historia del baloncesto español, anunció su cambio al balonmano, deporte en el que compite con el Uneatlántico Pereda de División de Honor Oro, segunda categoría tras la Liga Guerreras Iberdrola. Con la Selección de baloncesto, Nicholls sumó nueve medallas internacionales, incluyendo una plata olímpica y tres oros europeos. Ahora, a sus 35 años, ha cambiado las canastas por los goles.

Lauryn Williams y Lolo Jones (atletismo y bobsleigh). Dos historias que se entrelazan. Y dos historias de éxito en dos mundos muy distintos. Tanto Lauryn Williams, ya retirada, como Lolo Jones, apurando su trayectoria deportiva a los 41 años, han triunfado en atletismo y bobsleigh. La primera participó en tres Juegos Olímpicos de verano y ganó dos medallas (plata en 100 metros en Atenas 2004 y oro en 4x100 en Londres 2012) y, además, compitió en unos de invierno, Sochi 2014, con plata. La segunda, por su parte, ha ganado dos oros en Mundiales de pista cubierta (60 metros vallas) y otros dos oros en Mundiales de bobsleigh.

Tony Romo (fútbol americano y golf). En total, Tony Romo disputó 13 temporadas en la NFL. Todas con los Dallas Cowboys, equipo en el que fue quarterback titular y con el que jugó cinco veces la Pro Bowl, el partido de las estrellas de la liga estadounidense. Una figura importante dentro del fúbtol americano que, una vez terminada su carrera, y habiendo hecho ya sus pinitos durante la misma, inició una incursión algo más profunda en el mundo del golf, en el que no ha tenido un mal desempeño. En su nueva trayectoria, y pese a que asgura no dedicarle “mucho tiempo”, Romo ha disputado cuatro eventos del PGA Tour y ha obtenido buenos resultados como amateur. Además, ha ganado en tres ocasiones el American Century Championship, torneo que se disputa entre celebridades.

Jim Surtees (motociclismo y Fórmula 1). Es el único piloto que ha ganado el campeonato del mundo en la máxima categoría del motociclismo y de la Fórmula 1. Por influencia de su padre, Jack, Surtees empezó a competir en motos. Y destacó desde el principio. En la década de los 50, tocó la cima en esta primera disciplina, con cuatro títulos en el Campeonato Mundial de Motociclismo en la clase 500cc y tres en 350. En 1959, unas pruebas con un coche deportivo de Aston Martin y un coche Vanwall GP en Goodwood le llevaron a las cuatro ruedas, sobre las que se proclamó campeón de Fórmula 1 en 1964 y fue subcampeón dos años después.

Ellyse Perry (fútbol y críquet). Un caso único. Tras debutar tanto en la selección australiana de fútbol como de críquet con 16 años, Ellyse Perry ha competido en el Mundial de sus dos deportes. En 2011, en el de fútbol, disciplina que ya no practica, llegó a marcar un gol en cuartos de final. En críquet, es considerada una de las mejores de todos los tiempos. Sigue en activo y, ahora, piensa en los Juegos de Los Ángeles 2028, en los que el críquet volverá a ser olímpico más de un siglo después. “Si todavía estoy allí y estoy disponible y soy lo suficientemente buena, me gustaría estar allí”, dijo esta misma temporada, en la que es capitana del Birmingham Phoenix.

Wilt Chamberlain (baloncesto y voleibol). Fue breve, pero marcó un antes y un después. Wilt Chamberlain, el hombre de los 100 puntos, considerado uno de los mejores jugadores de baloncesto de todos los tiempos, también fue una figura de gran relevancia en el voleibol, deporte que practicó tras su legendaria carrera en la NBA, en la que sumó dos anillos, fue 13 veces All Star y acumuló infinidad de récords difíciles de batir. Después de todo ello, y tras conocer el deporte en el proceso de recuperación de una lesión, empezó a jugar al voleibol, siendo una de las figuras más importantes para que se creara la primera liga deportiva profesional mixta del país, llamada Asociación Internacional de Voleibol (IVA).

Jim Thorpe (atletismo, fútbol americano, béisbol y baloncesto). El deportista total. Jim Thorpe, que en 1950 fue nombrado como el atleta estadounidense más grande de la primera mitad del siglo XX por Associated Press, llegó a competir a gran nivel en atletismo, fútbol americano (jugó 52 partidos en la NFL), béisbol (jugó en los Newy York Giants, los Cincinatti Reds y los Boston Braves) y baloncesto. Sus mayores logros, seguramente, se encuentra en el primer deporte de los mencionados. En los Juegos Olímpicos de Estocolmo de 1912, Thorpe se colgó el oro tanto en decatlón como en pentatlón, siendo el primer indígena estadounidense en ganar una medalla olímpica. Los dos oros, sin embargo, se le retiraron por haber cobrado en las ligas menores de béisbol antes de competir en los Juegos, algo que incumplía las reglas del amateurismo olímpico de la época. En 1983, treinta años después de su muerte, el COI se los devolvió.

Santiago Cañizares (fútbol y rallyes). Su figura, ahora como comunicador, aún está muy lugada al mundo del fútbol. La carrera de Santiago Cañizares, portero de Celta de Vigo, Real Madrid y Valencia, entre otros, fue mucho más allá de la portería, bajo la que fue cuatro veces Zamora y mejor guardameta de Europa en 2001. En 2010, y tras retirarse del fútbol, Cañizares debutó en una prueba puntuable del Campeonato de España de Rally. Siguió compitiendo hasta 2018, logrando en 2017 su primera victoria al ganar el Rally de la Cerámica, con un Porsche 997.

Bo Jackson (fútbol americano y béisbol). Todo un fenómeno deportivo y social. Vincent Edward “Bo” Jackson no sólo compitió profesionalmente en dos deportes, sino que los compaginó. El estadounidense jugó a la vez en la NFL, con Los Angeles Raiders, y en la MLB, con los Kansas City Royals. En 1991, puso fin a su carrera en el fútbol americano debido a una lesión de carrera; en el béisbol, sin embargo, continuó con los Chicago Withe Sox y Los Angeles Angels. Brilló en todos los campos, siendo el único deportista de la historia en ser nombrado All Star en dos de las grandes ligas de Estados Unidos, y se convirtió en todo un icono. Si nombre resonó con especial fuerza a través de una serie de anuncios de Nike, titulada “Bo Knows” (haciendo referencia a su versatilidad), para promocionar unas zapatillas de entrenamiento cruzado.

Rebeca Romero (remo y ciclismo en pista). Uno de los cambios más curiosos de la historia del deporte. Rebecca Romero, nacida en Londres hace 44 años, creció practicando remo, deporte en el que vivió dos años mágicos. En 2004, la británica se colgó una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Atenas, a bordo del cuádruple scull; un año después, se proclamó campeona del mundo con la misma embarcación. Su vida, sin embargo, dio un giro radical en 2006, cuando decidió abandonar el remo para pasarse al ciclismo en pista, deporte en el que triunfó aún más. En el velódromo, ganó la medalla de oro en persecución en los Juegos de Pekín 2008 y se proclamó campeona del mundo (persecución y persecución por equipos) en dos ocasiones.

Luc Alphand (esquí y automovilismo). De la nieve al desierto. Luc Alphand brilló como esquiador y, sobre todo, como piloto. El deportista francés, que puso fin a toda su actividad en 2010, debutó en la Copa del Mundo de esquí alpino en 1984, logrando la victoria final en 1997. Ese mismo año, comenzó su carrera en el automovilismo, en la que se aventuró tanto en el terreno de la velocidad (compitió en el Campeonato GT de la FIA, la Copa Nissan Micra Stars o las Series Europeas de LeMans) como en el de la resistencia, en el que se proclamó campeón del Rally Dakar en 2006, con un Mitsubishi. El año anterior, ya había sido segundo.

Otros casos (Bolt, Evenepoel, Roglic, Salma Paralluelo...). Los mencionados son sólo algunos de los deportistas que practicaron de forma profesional más de una disciplina. A lo largo de la historia, sin embargo, hay otros que, pese a producirse en categorías inferiores o de forma casi anecdótica, también merecen mención. Por ejemplo, la incursión de Usain Bolt en el fútbol, llegando a entrenar con el Borussia Dortmund. Con el balón, también dejó huella Remco Evenepoel. El ciclista, doble campeón olímpico y del mundo, llegó a ser internacional y capitán con Bélgica en Sub-15 y Sub-16. Su caso recuerda al de Primoz Roglic, que brilló como saltador de esquí antes del ciclismo. Como ellos, también deslumbró desde joven Salma Paralluelo, que tuvo que elegir entre el atletismo y el fútbol. Talentos tan versátiles como únicos.

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