“Es vital que normalicemos hablar de la salud mental”

Cuando un deportista está metido de lleno en su actividad, en su profesión, todos los focos están a su alrededor: aficionados, Prensa, entorno, patrocinadores... pero hay un momento en el que todo eso se acaba. Las carreras y las trayectorias deportivas tienen inicio y final, y en algunos casos los protagonistas no están preparados para ello. Desaparecen, en gran medida, esos aficionados, esos días llenos de autoexigencia, incluso ese entorno. ¿Entonces? Toca prepararse y afrontar esa etapa y para ello Lola Fernández Ochoa (57 años), presidenta de la Fundación en recuerdo de su hermana fallecida Blanca, y Sara Hurtado (31 años), expatinadora olímpica, estuvieron en el Congreso AS Deporte en Positivo para hablar bajo el lema ‘cuando se apagan las luces del éxito’. Juan Gutiérrez, subdirector de AS y gran conocedor de los deportes invernales, moderó la conversación.

“Soy una de las caras feas del deporte. Como mucha gente, intenté ser deportistas, ir a unos Juegos Olímpicos de Invierno, y lo conseguí, pero con tan solo 22 años... me destrocé la rodilla. Seis operaciones después y un certificado de no apta para el deporte de alta competición. Se acabó la carrera deportiva y mi mundo se vino abajo. Lo bueno es que fui joven para reinventarme, pero lo de que los deportistas somos juguetes rotos, helados en nuestro caso al ser invernales, tras la retirada es una realidad”, contó Lola, que con la Fundación Blanca, recuerda a la también exdeportista olímpica Blanca que se suicidó en 2019 en la sierra madrileña e intenta ayudar a otros deportistas para evitar más casos como el de la añorada medallista en Albertville 1992.

“Es vital que hablemos y normalicemos la salud mental. En nuestra Fundación tenemos un teléfono de asistencia con psicólogos 24 horas al día y, de cada diez llamadas que recibimos, nueve son mujeres deportistas. No sé si por ser valientes o porque tenemos más problemas, pero la retirada es el gran miedo de todos los que llaman ya que después no saben qué hacer”, añade Lola mientras Sara Hurtado asiente. Múltiple campeona de España, pionera en el patinaje sobre hielo en nuestro país, se retiró hace dos años. “¡Me retiré huyendo de Moscú por la guerra! Estaba perdiendo la motivación, los objetivos se complicaban... y dije basta. En ese momento, te llega una crisis de identidad. Pregunté a gente como Amaia Valdemoro, Almudena Cid. ¿Este agujero negro se pasa en algún momento? Y me dijeron que no, que siempre estaría ahí, que únicamente se aprende a vivir con ello”, destacó la madrileña.

“Las semanas de búsqueda de Blanca, tras su desaparición en 2019, fueron angustiosas, pero Lola lo tenía claro. “No sé cómo Pedro Almodóvar no me contrata, porque disimulaba bien. Tenía claro que se había suicidado. Ella empezó a caer en la depresión que pasamos todos, pero en su caso fue a más. Blanca sentía vergüenza de tener problemas de salud mental y tras su muerte también sentí vergüenza de cómo alguien de una familia tan unida como la nuestra pudo acabar así. Ahora, me avergüenzo de haber tenido vergüenza en aquel momento. Hay que hablar de la salud mental. Y cuidarla”, añadió Lola, recordando con melancolía a Blanca, y Sara Hurtado también animó a los deportistas a hablar de todos sus problemas, tanto durante su carrera como una vez dejan atrás su actividad. “Somos ejemplo de sociedad para lo bueno y también para lo malo. Los deportistas tienen que dar un paso al frente y muestren los seres humanos que son, porque no todo es ganar medallas”. Una sociedad que cada vez está más involucrada en estos problemas pero que todavía tiene camino por delante, y siempre en el recuerdo de los que ya no están, como Blanca Fernández Ochoa. Que su caso no se repita.

As Deporte en Positivo es un proyecto de compromiso social que fomenta los valores asociados intrínsecamente al deporte tales como el respeto, la equidad, la inclusión, la humildad, la disciplina o la diversidad. Frente a la crispación y al ruido que tan presentes están en la actualidad deportiva en los últimos tiempos, esta iniciativa recuerda que más allá de los goles, las canastas y los récords, el deporte tiene un gran potencial como elemento transformador de la sociedad.