Cádiz impulsa a España SailGP
El F50 Victoria acabó la primera jornada de este sábado en sexta posición (19), a cinco puntos de los líderes, Australia y Francia (24). Según Protección Civil, hubo cerca de 70.000 personas en tierra.
Jornada de sábado para acumular buenas sensaciones. España arrancó el Gran Premio de Cádiz con muchos nervios, por problemas con el foque que hicieron peligrar su salida, pero logró sacudírselos de encima rápido con velocidad, calidad y buenos resultados. El F50 Victoria, que firmó un cuarto, un tercero y un séptimo puesto, cerró la primera jornada de este sábado en sexta posición (19), a cinco puntos de los líderes, Australia y Francia que suman 24. Este domingo, el objetivo está claro: acabar entre los tres primeros para disputar la Gran Final. “Nuestra expectativa es esa. Tenemos presión porque navegamos en casa, pero es nuestro momento de empezar a crecer y rendir. Queremos un Top 3, no nos iríamos contentos a casa con otra cosa”, comentó Florian Trittel.
El ambiente en Cádiz está siendo, por segundo año consecutivo, para enmarcar. SailGP ha caído de pie en Andalucía y y se está confirmado que la apuesta de esta competición de catamaranes voladores por tener un evento en España es acertada. Este sábado hubo vientos de 12 a 14 nudos, con mucha ola y los barcos navegaron, gracias a los foils, a más de 60 kilómetros por hora. El espectáculo estuvo sobre el agua, pero también en un paseo de Santa Bárbara repleto de gente entregada. Los gritos de ánimo de los espectadores se escucharon a la perfección desde el F50 Victoria y es que, según Protección Civil, hubo cerca de 70.000 personas en tierra y cerca de 100 barcos para seguir la primera jornada del Gran Premio de Cádiz.
España tuvo un buen día en la bahía de Cádiz y es que está metido de lleno en la pelea por disputar la Gran Final. Actualmente es sexto y estar entre los tres primeros este domingo no sería una locura. Y más tras la enésima prueba que tuvo superar la tripulación española en el arranca del día. Todo arrancó con 20 minutos de retraso (16:20) por unos problemas en el foque del F50 Victoria. “Nos hicieron cambiar el foque a media hora de la salida por el grande y, dando unas vueltas fuimos dándole tensión, se rompió la driza. La verdad es que algo que nos ha pasado los dos últimos días, logramos retrasar la salida y ahí estuvimos, que era lo importante”, explicó Trittel. España salió última, pero pronto demostró que está para dar guerra en Cádiz. La remontada fue una clase de navegación, haciendo las cosas fáciles y disfrutando del viaje, y se acabó en cuarto lugar. Estuvo luchando de tú a tú con Estados Unidos, liderado por Jimmy Spithill, y en la última marca los americanos se distanciaron y se llevaron el tercer puesto. “Fue de infarto a dos minutos de la salida arreglando el barco. Salimos como perros sin collar, adelantando barcos por todos lados. Fue importante ver cómo se reaccionó frente a esta situación y cómo supimos convertirlo en una muy buena posición”, comentó Jordi Xammar. Ya en la segunda manga, todo fue más fluido. Al equipo español se le vio más liberado, sin tantos nervios y se firmó un tercer puesto. En la última, el séptimo pudo emborronar un tanto el día, pero lo cierto es que fue una “salvada”. Canadá, con el ex piloto del F50 Victoria Phil Robertson, les taponó en la salida y ello les hizo ir a remolque. Aunque, el lado positivo lo arrojó Trittel: “Antiguamente, en esas regatas, habríamos sido últimos. Desde el inicio nos distanciamos y era muy difícil remontar, pero logramos ganar un puesto más que nos ayudó a salvar el día. El séptimo nos mantiene en la pelea, nos hace estar cerca del Top 3 y este domingo hay que materializarlo”.
“¿El ambiente? Es algo muy grande”
Cádiz está vibrando con SailGP y Florian Trittel quiso agradecer al público todo el cariño que se les está mostrando: “Para nosotros es increíble, nos gustaría saludar más de lo que lo hacemos. No tenemos palabras. Ojalá el sabor de boca al final del evento sea dulce. Es una sensación indescriptible, es algo muy grande”. Tras él, Xammar también se mostró feliz y es que “nos llegan los ánimos, es muy especial. Los regatistas no estamos acostumbrados a esto, no somos estrellas del deporte y venir aquí y vivir este fin de semana como si lo fuéramos, con todo el calor de la gente de Cádiz, gente tan volcada con el equipo español es increíble. Nosotros nos vamos a dejar la piel para lograr buenos resultados”. Y por último, Paula Barceló expuso que “la sensación es increíble. No tengo palabras. El año pasado lo viví desde el otro lado, desde tierra, y ya fue especial. Ver desde el agua todo el Paseo Santa Bárbara lleno de gente apoyando al equipo español, el agua llena de barcos… Increíble. Tenemos bastantes opciones de llegar a la final”.