Gedeón Guardiola: “Esta España ahora tiene de todo”
Ante el debut en el Mundial ante Montenegro, el capitán de los Hispanos reflexiona de la evolución que ha vivido en la Selección.
Hoy es el día del debut. La esperanzadora España, con dos títulos mundiales (2005 y 2013) y el tercer puesto de hace dos años, arranca en la ciudad polaca de Cracovia (Tauron Arena, de 15.000 espectadores) frente a Montenegro, sobre el papel el rival más fuerte del grupo, y se ha imprescindible la victoria de cara a la segunda fase, donde los rivales serán de entidad: Francia, Polonia y Eslovenia presumiblemente.
“Nosotros tenemos que ir paso a paso, sin mirar más allá del partido que nos toca. Es la forma que nos ha dado buenos resultados durante muchos años, sin hacernos castillos en el aire”. asegura Gedeón Guardiola (38 años) que lleva desde 2012 en esta selección que ahora capitanea.
En estos doce años que los ha pasado entre España y sus equipos de club en Alemania, se ha colgado el oro en un Mundial y dos Europeos, además de otros metales, incluido el bronce olímpico. No sabe si este grupo es el mejor que ha presentado España en un gran campeonato, pero reflexiona: “Cuando empecé en el equipo nacional sólo teníamos una defensa, el 6-0; ahora tenemos más variantes con el 5-1. La portería, con Gonzalo Pérez y Corrales no hay duda que es una de las mejores que se pueden ver en la alta competición. Decían que España no tenía lanzamiento exterior, y ahora tenemos jugadores poderosos. Esta España tiene de todo. Ahora hay que ver cómo salen en el Mundial todas esas mejorías de años de trabajo”.
El propio Gedeón es la prueba de esa enorme evolución de España. Era un pivote defensor, y ahora, y pese a la edad, asume tareas ofensivas con eficacia. “Soy feliz en la selección y siempre quiero estar en las convocatorias. En el Lemgo mi juego ha variado y también aporto minutos en ataque. Es cierto que mucha gente se sorprende de que mantenga una notable velocidad en el contragolpe, pero eso es gracias al trabajo físico, y poco a la suerte, que no he tenido lesiones muy graves” señala el jugador alicantino, que actúa con su hermano gemelo, Isaías, en el mismo club alemán en el que acaba el contrato en junio y aún no sabe dónde seguirá en el futuro: “Por mi condición física creo que aún estoy para jugar al más alto nivel una o dos temporadas, pero de momento en el Lemgo no hemos hablado. Volver a España siempre es una opción pero en la actualidad las ofertas que pueden hacer los clubes son muy inferiores a las que plantean en otras Ligas”.
Su pronóstico para este Mundial es que “España peleará en todos los partidos, porque el ambiente es especial, se ha trabajado bien, y siempre se da la cara. Luego pueden salir las cosas mejor o peor, pero por interés e ilusión no va a quedar”.
Para el encuentro de esta tarde no parece probable que Jordi Ribera pueda contar con Joan Cañellas, que sigue en proceso de recuperación de la lesión de microrrotura de fibras en el abdomen. Y aún así, deberá descartar a un jugador en la convocatoria, que tal y como esta confeccionada la selección podría ser en el puesto de pivote porque hay cuatro opciones en esa posición: Guardiola, Figueras, Peciña y Serdio.
Prácticamente todos los jugadores plantean discursos del mismo corte, con humildad y sin desmerecer al rival de esta tarde, que en algo se parece a España: ambas escuadras sólo cuentan en sus filas con un jugador de sus ligas domésticas, y el esto está en la inmigración.
Ayer decía Dani Dujshebaev que “cuando empieza un campeonato, el que sea, siempre se parte de cero, y lo que se haya hecho antes por bueno que sea ya no cuenta para el actual”. Es lo que con otras palabras repiten todos: el tercer puesto de hace dos años en Egipto es historia.