El Barça aplasta a un Ademar que se olvidó de competir

El Barça no encontró rival en el Abanca Ademar, al que aplastó por 25-39, en un partido en el que encontró a un rival muy blando —terminó sin exclusiones—, que no compitió y que tendrá que rearmarse si quiere pelear la única plaza que hay en juego de cara a la Copa España que se disputará a mediados del mes de diciembre en Irún.

Tan solo en los primeros cinco minutos hubo mínima igualdad en el marcador, porque a partir de entonces el Barcelona se mostró sólido en defensa, siempre bien resguardado con Nielsen en la portería, junto a la efectividad de Richardson y Aleix Gómez —en penas máximas y contragolpes— para ir abriendo brechas y doblando en el marcador a su rival.

Saeid Barkhoradari aguantaba mínimamente a los leoneses, a los que el experimento de atacar con siete jugadores y portería vacía les daba un pésimo resultado encajando hasta cuatro goles para abrir aún más brecha en el marcador y que el Barça jugara a su antojo por encima de la decena de goles al descanso (11-23), con una cifra de goles en contra excesiva para un Ademar que parecía haber detenido esta sangría en defensa.

En la reanudación, ya con el partido decidido, solo las acciones individuales del versátil Carlos Álvarez, al desdoblarse al lateral derecho y los buenos minutos en ataque del portugués Miguel Oliveira, dieron algo de interés en la afición local que contempló como el equipo azulgrana, pese a dar muchos minutos a sus jóvenes talentos, nunca vio reducida sustancialmente la diferencia para acabar ganando por la máxima renta.