Petr Yan, Sterling y un salto al estrellato en el UFC 259
Petr Yan expone el cinturón del gallo ante Aljamain Sterling en el UFC 259. Será el primer cinturón en liza de una cartelera con tres duelos titulares.
La UFC es experta en vender su producto. Va 'cocinando' poco a poco a los campeones para hacerlos grandes estrellas. Cuando un cinturón no tiene tanto foco, lo coloca de algún modo que encuentre más repercusión. Eso ha ocurrido con el del peso gallo. Henry Cejudo lo dejó vacante y la compañía nombró a la leyenda Jose Aldo y a la estrella emergente Petr Yan. Para darles foco lo metió en la última triple cartelera titular que realizó (UFC 251) y como el ruso no acaba de despegar mediáticamente lo sitúa en otra velada de altura. Yan tendrá su primera defensa este sábado, en el UFC 259, y lo hará 'escoltado' por Amanda Nunes (se enfrenta a Megan Anderson jugándose el cinturón del pluma) e Israel Adesanya (que sube al semipesado para ser campeón simultáneo). Buenos padrinos.
El resto del trabajo lo tendrá que hacer él y su oponente, Aljamain Sterling, quien tendrá la pelea más importante de su carrera. Yan viene de noquear a José Aldo con una actuación recordada, pero eclipsada por el resto de cinturones de ese noche. Por ello, está obligado a brillar. Además de ese KO se presenta con una racha de diez triunfos consecutivos y sin conocer la derrota en UFC (hará su octava pelea). Por su parte, Sterling se ha ganado su posición con otra gran dinámica: cinco triunfos contra rivales directos.
Por tanto, ambos llegan en su mejor momento con el objetivo de ofrecer un gran desempeño y quedar en la retina del público mas casual. En las apuestas es favorito el campeón. Lógico, la igualdad es lo que predomina sobre el papel y el cinturón pesa en esa faceta. Ambos son luchadores completos, pero que intentarán llevar la pelea a su terreno. El ruso destaca por su pegada (47% de victorias) y el estadounidense por su trabajo en el suelo (44% de triunfos por sumisión). Sin duda el pleito se presenta vibrante, ya que la diferencia de envergadura pertenece al aspirante, lo que complicará que el campeón pueda meter sus golpes. En Las Vegas hay mucho en juego para ellos. Un cinturón, pero también un foco que puede hacerles pasar al siguiente nivel dentro de la compañía. Robar la noche está en sus manos.