Siete bajas, la amenaza del tobillo de Rubén Alves y la vuelta de Saúl

Mientras Arturo estaba siendo operado en un quirófano de la Mutua Montañesa, en las Instalaciones de La Albericia entrenaban sus compañeros, los sanos, que tampoco estaban los lesionados Matheus, Mantilla, Satrústegui y Bobadilla, con la satisfacción de ver ya practicando al 100% a Saúl García, cuando el tobillo derecho de Rubén Alves, que sufrió un esguince hace 10 días, frente al Tenerife, volvió a sacar del terreno de juego al hispanobrasileño. Sacando cuentas, y añadiendo a los sancionados por acumulación de amonestaciones de Pombo y Juergen, José Alberto tiene siete ausencias confirmadas para el partido del lunes contra el Leganés y ahora, de nuevo, la duda del central zurdo, probablemente el jugador más destacado en el cómputo global de la temporada.

La acción que puso a Rubén en manos de los fisioterapeutas no pareció demasiado dañina: un pase atrás sorpresivo de Jordi Mboula le obligó a estirar la pierna izquierda para intentar que el balón saliera por línea lateral. No lo logró y, además, el tobillo derecho, mal posicionado, se le quedó trabado en el césped y de inmediato bajó la cabeza, hizo un gesto de dolor, se llevó la mano al tobillo y buscó con la mirada a Diego, uno de los fisios del equipo. El resto del entrenamiento lo vio desde el banquillo, mientras los servicios médicos hacían las primeras comprobaciones. Con cinco días por delante y viendo cómo fue capaz de jugar, a muy buen nivel, en Ponferrada tras la lesión de la semana anterior, en el Racing confían en poder contar con él también el próximo lunes.

En la matinal del campo nº2 de La Albericia participó Álvaro Martín, central zurdo/lateral izquierdo del Rayo Cantabria, además de Yeray y Mario García, protagonistas del gol del empate en Ponferrada. En el caso del de Isla se le puede dar ya como fijo a las órdenes de José Alberto y al de Peñacastillo al menos hasta que se recupere Eneko Satrústegui. Y después, ya se verá, porque la tarjeta de presentación que dejó Mario en El Toralín fue magnífica. Juergen Elitim y Jorge Pombo también se ejercitaron con sus compañeros con total normalidad, pero deberán ver el partido desde la grada para cumplir el partido de sanción que tienen por acumulación de amarillas. Será el tercer partido que se pierda el aragonés por sanción y el segundo del colombiano.

Según el parte médico emitido por el Racing, Arturo Molina fue operado por el el doctor Blanco, especialista en cirugía de la mano, acompañado por Fernández-Divar, médico del club, de una fractura en el cuarto metacarpiano de la mano izquierda que se se produjo en los últimos instantes del entrenamiento del lunes. En principio, en cuanto pasen las molestias propias de cualquier paso por un quirófano, Arturo podrá entrenar y jugar, convenientemente vendado, sin mayores problemas. Incluso, si fuera necesario, en el partido del lunes contra el Leganés, pero con total seguridad para el siguiente partido, frente al Villarreal B (domingo 19 de febrero, 21:00).