Blanco: “Si Ancelotti me pide que me quede, yo encantado”

Antonio Blanco (Montalbán, 2000) es uno de los seis jugadores de de la Rojita que ha ganado el Europeo Sub-17 y Sub-19 bajo la tutela de Santi Denia y busca la triple corona en Rumanía y Georgia con la Sub-21, un hito que nadie ha logrado jamás. El centrocampista cedido por el Real Madrid en el Alavés charla con AS sobre su futuro, el Europeo, su paso por Cádiz y el ascenso a Primera.

¿Cómo cambia la vida de un chico de 13 años de Montalbán a estar jugando a los 20 con Kroos y Modric?

Para alguien como yo que viene de un pueblo muy pequeño, ir con 13 años a la capital de España se hizo un poco duro al principio. Es un proceso largo en el que te van ayudando poco a poco la gente que trabaja en el club, la convivencia en la residencia… Vas subiendo peldaños hasta que cumples el sueño de debutar y jugar con todos esos cracks.

¿Cómo recuerda ese momento en el que Zidane le hizo debutar?

El debut me pilló por sorpresa. Yo estaba en la dinámica del primer equipo, pero el día antes de debutar ante el Getafe había jugado todo el partido con el Castilla. Lo hice bien esos 20 minutos y luego fui titular en los dos siguientes. Que un entrenador te de esa confianza no es fácil. Estoy muy orgulloso y agradecido a Zizou.

Después de jugar el día anterior ¿Le preocupó no dar la talla al 100% físicamente?

No pensé en eso. Lo recuerdo todo como un día muy feliz en el que no paré de disfrutar. Cuando salí al campo, ni me acordaba de que había jugado el día anterior.

¿De quién aprendió más?

En el que más me fijaba era en Kroos, un referente. También me ayudó mucho Casemiro. Me daba muchos consejos, tuve mucha afinidad con él.

En esta Sub-21, usted es más Casemiro que Kroos.

Siempre he sido más pivote que interior, aunque Santi Denia también me ha utilizado de 8. Creo que me desenvuelvo bien en las dos posiciones.

Primero llegó Camavinga, luego Tchouamení y este año Bellingham. Parece que el Madrid no se lo está poniendo fácil...

Es lógico. El Madrid está en constante crecimiento y siempre va a fichar a los mejores.

Se tuvo que marchar a Cádiz y las cosas no terminaron de salirle bien. ¿Por qué?

Fueron meses muy duros. Fui allí con mucha ilusión, con ganas de seguir creciendo y Sergio no tuvo mucha confianza en mí. Son meses en los que aunque no jugara aprendí otras cosas que me servirán de cara al futuro.

¿Habló con Sergio sobre qué podía hacer para ganarse su confianza?

Nunca se sentó conmigo para decirme en qué podía mejorar o cómo podía ayudar al equipo. Nunca tuvimos una charla que me ayudara a mejorar o a tener más minutos.

Al menos en Cádiz estaba cerca de su familia, que venden en los mercados de Sevilla y Córdoba.

Sí, me ayudaron mucho en aquellos meses, que han sido los más duros de mi carrera hasta el momento. Ellos y mi pareja me alentaban para seguir entrenando a tope y no bajar nunca los brazos.

En enero se marchó a Vitoria y allí sí le ha ido de maravilla.

La gente me decía que bajar a Segunda División era dar un paso atrás y yo sabía que no. Se ha demostrado que era dar uno hacia adelante. Yo he crecido, he tenido minutos y el equipo ha subido a Primera. Más no se puede pedir.

¿Le queda la espinita de no haber podido jugar la final del playoff?

Partidos así siempre son bonitos de jugar, pero también lo es estar en un Europeo.

¿Entendió el enfado del Alavés?

Cada uno defiende lo suyo. Las fechas ya estaban estipuladas desde hace tiempo y son decisiones que la Federación tiene que tomar y no pasa nada. Al final, todos estamos felices.

Cuando empezó la concentración, ¿esperaba ser tan importante desde el inicio?

Es lógico que hace unos meses me cayera de las listas porque no estaba jugando, pero yo sabía que para Santi Denia iba a ser un jugador muy importante. Estoy aquí para ayudar, ya sea como lateral o suplente.

¿Se esperaba un debut tan cómodo ante Rumanía?

La verdad es que esperábamos que ellos apretaran un poco más al principio, pero pronto controlamos el partido y ya en la primera parte pudimos haber marcado varios goles. Fue un partido bastante redondo y dejar la portería a cero también da confianza de cara a lo que viene.

¿Ve factible la triple corona?

Sería bonito porque algunos llevamos muchos años jugando y conviviendo juntos, pero es difícil. Hay selecciones muy buenas. Ahora toca centrarse en Croacia. Tenemos que ir día a día. Lo bueno es que tenemos un gran grupo y en estos torneos, los equipos que suelen ganar son aquellos que se muestran más unidos.

Si lo gana, volvería al Madrid con un ascenso y un Europeo bajo el brazo. ¿Cuál sería el siguiente paso?

Hay que mirarlo con alegría. No sé cuál será mi siguiente paso, pero no me preocupa, ahora estoy concentrado en intentar ganar el Europeo. Luego ya valoraré las opciones que tenga.

¿Si Ancelotti le pide que se quede, lo haría a pesar del overbooking?

Bueno, si él me lo dice, yo encantado. Me queda un año de contrato con el Real Madrid, pero habrá que esperar después del Europeo para ver lo que pasa.