Eraso una vez una leyenda
El ex capitán (séptimo pepinero con más partidos en la historia del Leganés) retorna por primera vez a Butarque. El Amore, asfixiado por las urgencias. Vuelven Miramón y Arambarri.
La nostalgia palpita recuerdos no tan lejanos. O quizá sí. Diez años han pasado. Diez. Son muchos. Una década hace desde que Javier Eraso se convirtió en el primer fichaje de la era Asier Garitano en Leganés. Palabras mayores. Como las gestas de ambos. Aquello fue profético. Se iniciaba un matrimonio entre este navarro y los pepineros con discontinuidades, sí, pero matrimonio de pasiones intensas.
Casi todo sonrisas: ascenso a Segunda, una salida al Athletic, un retorno ya en Primera, un golazo en el asalto copero al Bernabéu, un descenso, otro casi ascenso… y el adiós. Fue hace dos años ante el Almería en la última jornada. Atrás quedaban 214 partidos. El séptimo blanquiazul con más partidos en la historia del Lega. Javi hizo las maletas y se marchó a Chipre. Ahora ha regresado para el reencuentro. Con la Liga. Con el Lega. Por primera vez como rivales. Y será especial. Un Leganés – Amorebieta (siga el partido en directo en As.com) de pellizcos en el alma.
Pisará Butarque luciendo el ‘14′ (un dorsal de jugones) después de haber sido el dueño al sur de la capital del ‘8′ y el ‘17′. Este último, por ser el día del cumpleaños de su madre. Así es Javi. Tipo familiar. Normal hasta doler. Un navarro empecinado con espíritu obrero y calidad a raudales (“Es que Javi es muy bueno”, repetía Garitano) que encajó en el sentimiento pepinero desde que llegó en aquel cada vez más borroso 2013.
El resto es Historia. Con H mayúscula y algunos Hitos (también mayúsculos) que recordar. Dos especialmente: su golazo al Real Madrid en Concha Espina la noche del Pepinazo y ser uno de los dos jugadores que ha hecho gol con el Lega e todas las categorías profesionales del fútbol español: Primera, Segunda y Segunda B. El otro es Mantovani. Por eso y por mucho más lo de hoy será tributo mayúsculo. El tipo lo merece.
Jarana futbolera
No será el único rencuentro. Erik Morán, Lasure y Avilés (éste cedido por el Lega) vuelven a Butarque. En el Lega su jefa de prensa, Uxue Caballero, también se reencuentra con su ex equipo. Está por ver si el partido se pone a la altura de la nostalgia. Divertido será. Al menos eso vaticina Borja Jiménez, que ve en el estilo fresco y descarado del Amorebieta abono para la jarana futbolera. Ojalá. Para el Lega, la motivación tiene purpurina. Seguir arriba, nada menos.
No es el objetivo, pero mola. Estímulo con el que seguir la senda de los 50 puntos. Salvación y nada más… hasta que se logre. Tras caer en Burgos y empatar ante el Oviedo, es la primera vez en el curso que el Lega encadena dos partidos sin vencer. Los pepineros recuperan a Miramón y Arambarri, pero la lógica dice que no saldrán de inicio en un once con duda de pizarra como principal atractivo, esto es, si saldrá con Miguel y Diego en punta y si mantendrá el 4-3-3. Cissé no jugará por estar convocado con Guinea para dos amistosos.
Las urgencias son azules
También el virus FIFA deja al Amorebita sin Pablo Campos, su portero titular. Está con la sub-21. Mala noticia para un equipo necesitado de puntos para coger aire. Con el agua al cuello, la mala racha de los azules (cuatro partidos sin ganar, un empate, tres derrotas) les ha situado en la zona roja de la tabla. A la aciaga dinámica del equipo fuera de casa (sólo un punto de 15 posibles) se le sumó la última derrota in extremis (y polémica) frente al Eibar que supuso el primer tropiezo del curso en Lezama. Ahora, buscan que Butarque sea el punto de inflexión que aporte la confianza necesaria para levantar cabeza y poner algo de luz en el túnel de resultados negativos en el que está inmerso el equipo dirigido por Haritz Mujika.
Jonmi o Marino se disputarán la portería en Butarque. Mermada también está la zaga, con las bajas por lesión de Etxeita y Jorge Mier. Poco margen de maniobra para el míster, más allá de las múltiples posibilidades en el lateral izquierdo, incluso con la opción de incluir defensa de cinco con Garreta en el perfil zurdo de la zaga. En el doble pivote, Sibo y Carbonell apuntan a titulares con Eraso en la mediapunta. Los extremos más en forma, Dorrio y Morcillo, buscarán nutrir de balones a Jauregi o Da Graca.
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