El Leganés, un naufragio que no cesa en el área contraria
Los pepineros tienen buenos números de remates a puerta, pero con escaso acierto. Son el 2º equipo menos goleador del curso (tres dianas). Idiakez está probando de todo.
El Leganés se ha convertido en un naufragio que no cesa. Cada vez que los pepineros se acercan a la orilla contraria, encallan en arenas movedizas de llenas de impotencia que les hunden cuanto más se agitan. Porque los números ofensivos del Lega (goles aparte, que es lo más importante) son buenos. Muy buenos en verdad. A sólo nueve disparos del líder de esta estadística, del Tenerife, el conjunto de Idiakez es el 7º que más remata del campeonato con 61 remates. Sucede, que también orbita en ‘zona Champions’ del desatino.
El Lega es el segundo equipo que más remata fuera o al poste del campeonato (41 remates) y el cuarto con peor porcentaje de tiro entre palos del curso (un 32,79% sólo superado por Granada, Burgos e Ibiza). El resultado es que el Lega sólo lleva tres goles esta campaña (todos marcados con la zurda, curiosamente) y se coloca como el segundo equipo menos goleador del campeonato por detrás del blindado Burgos. Los de Calero han hecho sólo dos goles, pero de altísimo rendimiento. Al no haber encajado aún un tanto, los castellanos suman once puntos frente a los cuatro del Leganés.
El dato resulta llamativo porque el Leganés ha tenido partidos de asedio al rival. Sucedió en Huesca, por ejemplo, donde remató 18 veces. Deberían haber sido 19 según la estadística oficial, pero López Toca anuló por dudosa falta un gol al debutante Parzyszek. Ante el Lugo, en la tercera jornada del campeonato, la cifra de remates del Leganés se elevó hasta los 21 tiros, pero como sucedió en el Alcoraz, el Leganés se quedó sin marcar. Con un total de 20 remates entre palos en lo que llevamos de curso, el Lega promedia menos de tres tiros a puerta por encuentro.
Idiakez agita la pizarra
Imanol Idiakez, lejos del inmovilismo, lleva toda la temporada agitando la pizarra y su plantilla para encontrar soluciones ofensivas en una delantera que ha tenido hasta seis integrantes distintos. A saber, el curso lo comenzó con Juan Muñoz en punta. Desde entonces, por el puesto de delantero en todas sus variantes también han pasado Arnáiz, Fede Vico, Qasmi, Parzyszek y, puntualmente, Manu Garrido, el único de los delanteros del Leganés que aún no ha sido titular, casi siempre lastrado por problemas físicos. De todos ellos, sólo Arnáiz ha visto puerta. Los otros tres tantos pepineros los han completado Nyom (defensa) y Naim (extremo).
Búsqueda del gol que el entrenador ha insistido hay que repartir entre otras zonas del campo. “Todas las líneas tienen la responsabilidad del gol”, analizó en la previa de viaje a Huesca, nostálgico quizá de que la tendencia de otras temporadas (el gol casi siempre ha sido tarea coral en Butarque) se haya estancado. De ahí también que la estrategia esté ganando peso en los entrenamientos.
El maná de la estrategia
“Los goles a balón parado suelen ser el 30% de los que se marcan”, comentó el guipuzcoano. Este curso, por ser exactos el 33% de los goles que ha hecho el Leganés. El 1-0 de Nyom ante el Eibar llegó tras un saque de falta. El camerunés también pudo hacer el 0-1 en Huesca tras un saque de esquina, pero su balón se estrelló en el palo. Su corpulencia, unido al buen hacer de Pardo en las ejecuciones de falta han regalado ya varias ocasiones claras en lo que llevamos de curso, pero al igual que sucede en las acciones en jugada, el Leganés sigue estancado en un naufragio que no cesa.