El Leganés cambia la prioridad en el medio: busca pivote defensivo
Inicialmente el deseo del club era encontrar un recambio para Gaku y su adiós al Mundial. El inicio de la temporada ha cambiado criterios de refuerzo en el centro del campo.
El Leganés ha modificado el tiro en una de las posiciones que consideraba prioritarias reforzar de aquí al cierre de mercado. Los pepineros estaban sondeando la opción de un medio centro de corte similar al de Gaku Shibasaki, toda vez que la presumible presencia del japonés en el Mundial lo dejaría fuera de la disciplina del Leganés aproximadamente un mes. Sin embargo, tras el inicio de temporada, el club ha detectado que, para la medular, urge más la llegada de un futbolista de corte defensivo similar a Luis Perea, el único hombre de este estilo en la plantilla. El Lega ahora lo que busca es un pivote tradicional.
“Por el camino hay un Mundial en el que seguramente Gaku participe y nos podemos quedar mes y pico cojos… por ahí van los tiros”, comentó Txema Indias, director deportivo, a finales de agosto, cuando reveló que la situación del nipón era uno de los condicionantes del mercado. El mes que ha pasado desde entonces ha evidenciado que, aunque la ausencia de Gaku es importante (se pudo ver en Oviedo, se cayó de la lista por molestias), más todavía puede ser la ausencia de un perfil más defensivo en la medular.
Problemas en el estreno
El arranque de curso ha evidenciado que los hombres que juegan en la sala de máquinas blanquiazul están más preparados para construir que para destruir. Cuando el Leganés no tiene la pelota, sufre mucho y le cuesta recuperarla. Ése fue uno de los grandes problemas en las primeras partes ante Alavés y Oviedo.
Sólo los ajustes de la segunda parte (presión más alta, líneas más prietas) permitió blindar la medular y conseguir más solidez defensiva en la media. Y aún así, se evidenciaron problemas como se pudo ver en la jugada del penalti que dio lugar al 1-0 del Oviedo, una acción en la que Lucas, lateral derecho carballón, se recorrió 80 metros sin apenas oposición. Finalmente fue el pivote defensivo, Perea, el que cometió la pena máxima.
Un problema veterano
En las dos primeras jornadas el Leganés ha protagonizado 111 recuperaciones de posesión, lo que le coloca como el 9º equipo en cuanto a estas jugadas del arranque de Liga. Los datos lo alejan de la cabeza y explican parte del problema que tiene el Leganés en la franja ancha del campo.
Un defecto que ya detectó la pasada temporada Mehdi Nafti y que solucionó con un cambio de dibujo (abrazó el 4-1-4-1) y la presencia de José Recio entre defensa y medular. El malagueño mejoró la posesión pepinera y también aumentó los ratios de recuperaciones. Este curso, por ahora, no hay un futbolista que ejerza este rol en la plantilla de Imanol Idiakez.