Rooney no arranca

Hace poco más de un mes, el pasado 11 de octubre, el Birmingham City hacía oficial el fichaje de Wayne Rooney como nuevo entrenador. Llegaba sustituyendo a John Eustace, que había sido despedido dos días antes. Rooney llegaba al club después de no haberse podido clasificar a los Playoff de la MLS al DC United, pero con una buena experiencia en Inglaterra. Estuvo cerca de salvar del descenso a League One, tercera categoría del fútbol inglés, al Derby County, pese a que arrancaron la temporada con una reducción de 21 puntos por deudas.

En el momento del fichaje de Rooney, el Birmingham se encontraba sexto en la Championship, segunda división inglesa, en puestos de Playoff de ascenso a Permier League, y aterrizaba en un club que venía de ganar 2 partidos consecutivos. Después de cinco encuentros bajo los mandos del exdelantero del Manchester United, el Birmingham no conoce la victoria, y ha caído 12 puestos en la clasificación. En concreto, han perdido 4 de esos 5 partidos, y solo ha podido conseguir 1 empate.

Actualmente se encuentran en décimo octava posición, y tienen a 7 puntos las posiciones de promoción a Premier League. El descenso, eso sí, por el momento se encuentra bastante lejano, ya que les separan 8 puntos del Rotherham, club que marca la zona caliente.

El propio Rooney es consciente de que necesitan empezar a sumar de tres, como explicó en la última rueda de prensa, donde dijo que “no podemos seguir diciendo que vemos progresos, tenemos que empezar a traer resultados”, aunque confía en que lo conseguirán: “lo que veo de los jugadores es positivo, creo que lo conseguiremos”, terminó diciendo un Rooney que mantiene la confianza de la directiva.

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