Morbo con Ramos
El central vuelve a medirse al Barcelona, al que en el su último duelo forzó un penalti que acabó marcando para dar el triunfo al Real Madrid.
Sergio Ramos vuelve a cruzar su camino con su rival más recurrente. El central sevillista se mide al Barcelona en lo que será su duelo número 48 contra los culés. O lo que es lo mismo, el equipo contra el que más veces ha jugado desde que es futbolista profesional. De esos 48 encuentros, 15 acabaron con sonrisas para un Ramos que la última vez que jugó contra el Barça fue el protagonista absoluto.
Hace poco más de tres años, el Real Madrid visitaba al Barcelona en el Camp Nou en el encuentro correspondiente a la séptima jornada. El marcador reflejaba un empate a uno hasta que pasada la hora de partido, Sergio Ramos cayó dentro del área rival y reclamó penalti. Martínez Munuera acudió a la pantalla del VAR, observó un agarrón de Lenglet de los que nunca se sabe el criterio arbitral para señalar penalti o no y acabó señalando la pena máxima. Ramos, como de costumbre, cogió el balón y con un lanzamiento raso con la derecha a su lado natural adelantó en el partido a un Real Madrid que terminó por sumar los tres puntos.
Fue su último partido contra el Barcelona, hasta esta noche, en la que apunta de nuevo a titular tras dos partidos sin jugar. Descartado ante Osasuna por una sobrecarga muscular, Mendilibar tampoco contó con él ante el Almería. Simple rotación, según el técnico vasco, a lo que hay que añadir la preocupación de Ramos por el robo que sufrió en su domicilio con su familia dentro mientras jugaba en el Sánchez Pizjuán. Hoy no parece que vaya a haber excusas.
“No estaría mal que mi primer gol tras mi regreso se lo hiciera al Barcelona, pero no me preocupa marcar. Prefiero que el equipo tenga una buena línea defensiva, quedarnos con la portería cero y ser sólidos atrás, para que el resto de líneas estén cómodas con la defensa, que es lo que te hace crecer más como equipo”, afirmaba ayer Sergio Ramos a los medios de comunicación del Sevilla, donde no escatimó en elogios hacia el Barcelona: “Este tipo de rivales supone un plus por mucho que no queramos. Son favoritos a todo, en LaLiga y en la Champions, y eso hace que una victoria contra ellos tenga ese plus emocional. Vamos a intentar ir allí a por todas. Barcelona, aunque sea otro estadio, pero son los mismos jugadores. Tienen verticalidad, son rápidos por banda y va a ser un partido bonito”.
Hace 18 años, junto a otro canterano sevillista como Pablo Ruiz, Sergio Ramos jugaba su primer partido ante el Barcelona. Ahí comenzaba a escribir su historia como futbolista y hoy tiene otro capítulo.