Hoy se cumplen 25 años del último partido del Europucela
El Real Valladolid perdió ante el Spartak de Moscú (1-2), quedó eliminado de la UEFA y no ha vuelto a jugar competición europea.
El Real Valladolid ha jugado tres temporadas en sus 94 años de historia en competiciones europeas: una Recopa (1989-90) y dos Copas de la UEFA (1984-85 y 1997-98). La última de ellas fue la famosa campaña del despido radiofónico de Vicente Cantatore, y hoy, 4 de noviembre de 2022, hace 25 años que los blanquivioletas jugaron su último partido, oficial, en competición europea. Después claro que los pucelanos han jugado en Francia, Portugal, Inglaterra, Italia, Países Bajos, etc... pero eran partidos amistosos. Aquel 4 de noviembre de 1997, el Real Valladolid, tras haber eliminado en treintaidosavos al Skonto de Riga, se enfrentaba en el partido de vuelta de dieciseisavos de final al Spartak de Moscú en el estadio José Zorrilla. Los vallisoletanos habían perdido en el partido de ida, en la capital rusa, 2-0, encuentro del que Benjamín Zarandona recuerda que fue “muy bonito, con todo nevado, ellos tenían algunos jugadores muy buenos y nosotros no pudimos sacar un resultado mejor, pero vinieron muchos aficionados nuestros en un viaje organizado”.
En el partido de vuelta, Sergio Kresic sacó un once de históricos formado por César; Juan Carlos, Santamaría, Peña, Marcos; Chema, Harold Lozano, Edu Manga, Benjamín, Peternac y Víctor. Los pucelanos buscaron el primer gol con ahínco con la intención de meterse en la eliminatoria, pero el tanto no llegaba y en la segunda parte, cuando entraron Raúl Ibáñez, Juan Carlos Gómez y Eusebio, Aleksandr Shirko marcó dos tantos. El primero en el minuto 63 y el segundo en el 90, que hicieron inútil el tanto de Juan Carlos Gómez en el 87 (resumen del partido). Benjamín rememora: “Parecía que sí, que podíamos darle la vuelta, tuvimos ocasiones, pero no acertamos y, al final, marcaron ellos, que eran un equipo buenísimo. De hecho, varios de sus jugadores luego salieron a otros equipos europeos”. De esta manera, se despedía el Pucela de Europa, de la Copa de la UEFA, ese año y desde entonces no ha vuelto a jugar. Aquel encuentro, por cierto, lo pitó el conocidísimo árbitro inglés Graham Poll, que pitó una década en la Champions League.
Lo cierto es que un club como el Real Valladolid merece asomarse más a menudo en Europa. Ronaldo Nazário, actual presidente del club blanquivioleta, en una entrevista con AS afirmaba que “en cinco años el Valladolid puede aspirar a estar en la Champions”. Parece difícil, primero debe asentarse, de nuevo, en Primera. Benjamín explica que bajo su punto de vista: “Jugar la UEFA con el Valladolid fue muy ilusionante para mí. Si el club no ha vuelto a Europa es porque no ha habido una continuidad de jugadores, aquel año vino una camada importante de futbolistas del Real Madrid (Víctor, Torres Gómez, Marcos, Santamaría) y hubo una mezcla de juventud y veteranía” y afirma que “creo que el Pucela volverá a Europa en algún momento, pero hay que hacer las cosas como las está haciendo ahora en Primera, dar una continuidad a los futbolistas y elegir bien los fichajes”.
También Víctor Fernández estuvo en aquel equipo y en ese partido y hacía memoria para decir que “recuerdo que teníamos un equipazo y un ambiente extraordinario, la afición estaba volcada, nos hacía mucha ilusión jugar en Europa con el Pucela” cuestión que le sirve al exfutbolista para explicar que “el hecho de que el Real Valladolid lleve 25 años sin jugar en Europa demuestra lo difícil que es y da más valor a haberlo hecho en su momento. Ojalá el club se asiente y pronto el club consiga volver a disputar competiciones internacionales”.
Otro de los jugadores que estaba en aquella plantilla, aunque en aquel encuentro no jugó es el uruguayo Álvaro Gutiérrez que recuerda aquellos encuentros ante el conjunto ruso con sabor “agridulce. Felices por estar jugando en competición europea, pero todavía teníamos la herida de la salida de Cantatore, por la manera que se había dado. Psicológicamente no estábamos preparados, había llegado un técnico nuevo (Kresic) al que teníamos que adaptarnos”, resalta la química de aquella plantilla “con jugadores promesas que luego se reivindicaron y triunfaron con futbolistas internacionales. Nosotros siempre íbamos a todas las canchas a ganar”, mientras que señala que “al Valladolid le cuesta llegar a puestos europeos, como a muchos otros, porque ahora el poder económico es clave para armar buenas plantillas. Antes no eran tan así. Podías tener excelentes futbolistas con un poco de visión. Cuando yo fui a Valladolid era campeón de América, hoy en día es muy difícil que un campeón de América pueda recalar allí porque hay muchos más clubes que entran en la competencia con más dinero”.
Luismi Quintana era el utillero de aquel equipo y confirma las sensaciones extrañas que tuvieron en esos días: “Tengo un recuerdo con sabor agridulce por lo que había pasado con Cantatore, el equipo no estaba bien de cabeza, le había afectado mucho” y reconoce que “sinceramente pensaba que era difícil volver a jugar en Europa. Después el tiempo me ha dado la razón. Hemos pasado muchos años en Segunda, con problemas económicos, lo veía difícil”, aunque no pierde la esperanza: “Ahora con Ronaldo tengo la ilusión de que volvamos a estar y poder viajar con mi hijo que nunca ha visto al Europucela”.