Al Barça le sobra pólvora

Robert Lewandowski se instaló cómodamente a la derecha de Gerard Piqué después de haber realizado su primer (y suave) entrenamiento en el césped del DRV PNK Stadium de Miami. Y lo que vio debió complacerle, pero también motivarle. Él, ya lo ha dicho Laporta, es una “ametralladora” de hacer goles. Pero el Barça tiene más especialistas. Casi se diría que Xavi tiene overbooking de killers. Sabedores de que la competencia va a ser feroz, los cinco delanteros disponibles alineados por Óscar Hernández (que dirigió al Barça en ausencia de su hermano Xavi, en Madrid tratando de resolver el enigmático caso de su visado) se fueron de Miami con gol. Primero fue Aubameyang (19′), seguramente el más afectado por posición por la llegada de Lewandowski, con una picadita precisa sobre el heterodoxo Marsman. Seis minutos después, Raphinha, que marcó su primer gol como jugador del Barça con un bonito golpeo con la izquierda, sin dejar botar un centro de Balde. Y, finalmente, el gran Ansu, que llevaba 40 minutos loco por reencontrarse con el gol, casi con un punto de ansiedad. No es necesario que se agobie. Estampó en la red el primer balón que tuvo nítido dentro del área. Es un jugador con un ángel especial que, como recordó Luis Enrique, no está lesionado. Si él es el primero que se lo cree, hay muy pocos jugadores más especiales que él.

El golazo de Ansu Fati

El Barça encontró muy poca resistencia en el Inter Miami, un equipo debilísimo. Sin plan ni jugadores de nivel más allá de Higuaín que, obviamente, ya no está para la élite, no presentó ninguna amenaza y pareció casi un equipo familiar, con el hijo de Beckham, Romeo, jugando un ratito casi al final. No pareció, desde luego, un proyecto para Busquets o Messi.

La segunda parte empezó con dos focos de atención. El primer impacto fue ver a Frenkie de Jong de central izquierdo. Por más que el Barça anduviese corto de centrales, no deja de ser una manera de seguir haciendo ruido alrededor de su espinoso caso. El otro fue Gavi, que todavía no ha renovado, pero que empezó la temporada como la terminó: como un bisonte. Marcó un golazo a la salida de un córner y dejó solo a Memphis en una acción que el neerlandés mandó a las nubes. Depay se repuso pronto del error con un giro que hubiese firmado el mejor pivote de fútbol-sala del mundo, Ferrao (también culé). Dembélé advirtió que no debía despistarse e hizo el sexto y completó la tunda al Inter Miami y el pleno goleador de los delanteros. Lewandowski tiene competencia. Al nuevo Barça 2022-23 le sobra pólvora.

El gol de estraegia de Gavi