Aceves, más fuera que dentro

Paulo Pezzolano lo advirtió el pasado martes en rueda de prensa: Álvaro Aceves había dejado de entrenarse con el resto del equipo “por un tema aparte, con la institución”. Uno que se ha enquistado y que puede verse abocado a terminar en los juzgados, debido a las serias desavenencias que existen en la interpretación de su contrato, que han hecho que haya tomado la decisión unilateral de abandonar la disciplina del Real Valladolid y le hacen estar más fuera que dentro del club.

Como desgraciadamente ha sucedido en anteriores ocasiones, la última, con Iván Cédric y la cláusula de renovación de la que disponía la entidad, un problema en la interpretación del contrato hace que él se considere libre y que el club crea que no lo es. Según ha informado SER Deportivos Valladolid, la problemática, ni es nueva, ni se ha abordado ahora de modo exclusivo, sino que lleva tratándose desde diciembre. Sin embargo, divergencias respecto a su estatus han hecho estallar el caso.

Con base en una serie de objetivos que su agencia de representación considera cumplidos, Aceves debería pasar a formar parte del primer equipo, incluyendo unas cantidades ya pactadas y su dorsal correspondiente a esta nueva condición. Los servicios jurídicos del Real Valladolid, por su parte, no creen que se hayan dado las condiciones marcadas, lo cual no es baladí, puesto que la divergencia establece unas diferencias a nivel salarial y de registro, que, en caso de llevar razón el cancerbero, implicaría una primera inscripción que en Primera tiene un coste de 57.000 euros.

Como quiera que no ha habido lugar a esta actualización, después de numerosos contactos y conversaciones, en las que se buscó una alternativa diferente a una salida de manera abrupta, como lo es por el hecho de que haya dejado de entrenarse con el plantel, el cancerbero se encuentra en un limbo que puede acabar con las partes viéndose las caras en un juzgado, déjà vu para el club, que ya vio cómo su relación con otro canterano como Miguel de la Fuente acababa así (y sin razón).

En este sentido, El Norte de Castilla recoge este jueves declaraciones de Domingo Catoira, director deportivo, que asevera que “el club está estudiando las medidas oportunas y legales que tenga que accionar”, algo que ya ha trasladado al jugador, después de que haya comunicado por escrito que su intención es no volver a entrenar, una determinación que puede ser constitutiva de una falta grave en un eventual expediente. Como quiera que el entorno del guardameta no reconoce la filiación a la entidad, empero, no parece que vaya a retornar a los entrenamientos.

De esta manera, y si no lo remedian un giro radical o los juzgados, Álvaro Aceves estará diciendo adiós a más de una década de formación como blanquivioleta, después de estrenar colores en la Íscar Cup en 2013, y el Real Valladolid perdería a una de las que presuntamente eran sus apuestas de cara al futuro, uno, ahora, comprometido en su posición, ya que este portazo deja a André Ferreira como único portero de la primera plantilla, a quien están acompañando en los entrenamientos los canteranos Arnau Rafús, Fer Pérez y Gonzalo (este, todavía en edad juvenil).

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