Pelé descansa para siempre

Hace ya algunos días desde aquel 29 de diciembre en el que Pelé se fue para siempre. Tras una larga lucha contra una enfermedad que sigue siendo una de las grandes causas de mortalidad en todo el mundo, el astro brasileño admirado por generaciones dejaba este mundo entre aplausos a su leyenda y gritos de dolor por su persona.

La ciudad de Santos y todo el estado brasileño han rendido los merecidos honores a una de las figuras más representativas de un país donde el fútbol es capital en cada uno de los estratos sociales y espacios en los que la civilización se hace paso. Durante más de 5 días en los que un nuevo año se ha abierto paso, los homenajes y eventos se han ido sucediendo en todo el planeta para recordar la figura de ‘O Rei’.

Tras ser velado por más de un día en una estructura acomodada sobre el césped del estadio Vela Belmiro, el féretro con los restos de Pelé salía hoy sobre un camión de bomberos y escoltado por cuerpos de seguridad brasileños para que la figura y la afición de una ciudad que le vio convertirse en uno de los mejores futbolistas del planeta tierra se pudieran decir el último adiós.

Arropado por la bandera verde-amarela de Brasil, el ataúd del astro brasileño recorrió las calles de la ciudad de Santos en las que se agolpaban miles de brasileños que se querían rendir su particular homenaje al exfutbolista. La marcha ha tenido una duración aproximada de 4 horas, en las que ha recorrido un total de 7 kilómetros de la ciudad brasileña.

En su viaje desde el estadio hasta el Memorial Necrópole Ecumênica donde finalmente recibe sepultura, el convoy fúnebre ha recorrido algunos lugares históricos de la vida de ‘O Rei’, en especial una ubicación donde la marcha se detuvo: la casa de su madre, en el barrio que le vio crecer hasta convertirse en leyenda.

Despedida bajo la lluvia

En los últimos compases del trayecto, como si el destino o alguien superior tuviera conocimiento de que el ‘último adiós’ estaba cerca, comenzaron a caer unas gotas del cielo a modo de lluvia, mientras una multitud esperaba en medio de un ambiente de solemnidad la llegada del féretro.

A las 14:01 de este martes 3 de diciembre llegaba el camión de bomberos que transportaba el féretro de Pelé. Entre 10 bomberos brasileños bajaron el féretro del vehículo para entregárselo a los 6 oficiales que se encargaron de llevar, entre los aplausos de la multitud, los restos de ‘O Rei’ hasta el interior del Memorial, donde descansará eternamente.

Pelé había transmitido a su entorno más cercano su voluntado de recibir sepultura en esta ubicación, en primer lugar porque el sitio “no parece un cementerio”, y en segundo lugar, porque desde la sepultura tiene vistas a Vila Belmiro, la que fue su casa por tantos y tantos años, y desde donde hizo felices a millones de aficionados al fútbol.

Un ‘adiós’ casi sin campeones del mundo

Debido al clima crítico y polémico que se vive en el entorno del fúbol, muchos de los protagonistas evitan gran parte de las preguntas y opiniones que pueden recibir del entorno mediático, por lo que la mayoría de los ex campeones con la Selección brasileña no han acudido aún a mostrar sus respetos a ‘O Rei’. El jugador será velado por 24 horas más en el Memorial, por lo que algunos de ellos podrían hacer su aparición.

Por el momento, tan solo Mauro Silva, que actualmente ocupa el cargo de vicepresidente de la FPF acudió a la capilla ardiente. En las próximas horas, se espera la aparición de algunas figuras del mundo del fútbol para darle esa merecida despedida a la leyenda brasileña.