Un enorme Dani Martín deja seco al Deportivo

La afición del Deportivo, una vez olvidado el último fracaso, esperaba con ilusión a su equipo. Ilusionada con Lucas y los fichajes, pero el que se llevó la medalla de oro fue un chaval de 17 años que defendía la portería del Rayo Majadahonda: Dani Martín. Espectacular rendimiento defensivo de los majariegos, que sin tirar a puerta se llevaron un punto que sabe a tres bajo la batuta del debutante Carlos Cura. Decepción local por el resultado, aunque con algunos aspectos positivos. El mayor Yeremay, que se cansó de servir balones de gol sin repuesta. Bien la estructura defensiva, el dominio, la presencia de José Ángel y Lucas Pérez y el trabajo de Barbero, pero sin premio. Sí hubo un gol, de Lucas Pérez, pero que fue anulado por un polémico fuera de juego que no parecía. Funcionaron muchas cosas, pero acabó fallando el gol. Y lo que era evidente que no iba fallar era el ambientazo en Riazor. Entradón a golpe de agosto, tifo al inicio, juego de luces al descanso y anuncio de que el club acaba de alcanzar los 25.000 socios. Espectacular se queda muy corto.

La siguiente noticia estaba en el once elegido por Idiakez para el debut, que fue el esperado y casi calcado al del Teresa Herrera. También esperado fue la salida en tromba de los coruñeses ante un Rayo que buscaba el balón, pero obligado a recular. El peligro partía de las botas de Davo y, sobre todo, Yeremay, pero sin poner la puntilla en el último remate. Un cuarto de hora de fulgor hasta que los madrileños comenzaron a asentarse para comenzar a circular y estirarse desde la posesión. La calma duró hasta el 29′, en una contra conducida de forma exquisita por Yeremay, rematada por Davo y despejada a córner con una gran estirada por Dani Martín. El talentoso canario estaba empeñado en abrir en el marcador y poco después dejó otro remate franco para Lucas Pérez, pero el imberbe portero majariego estaba igual de empeñado en dejar su portería impoluta. Doble aviso y de nuevo diluvio blanquiazul con continuas llegadas fabricadas entre Lucas y Yeremay, pero a las que faltaba la guinda. Sólido Depor y muy peligroso desde las botas del ‘10′, pero al descanso más contento el Rayo Majadahonda con el 0-0 en el marcador.

El segundo acto siguió por los mismos derroteros y protagonistas. Intento de Yeremay, flojo en este caso, y respuesta de un Dani Martín empeñado en encumbrarse en Riazor a sus 17 años. En el 56′ llegó la polémica con una asistencia de Barbero para que Lucas Pérez marcase. Muy ajustado, pero parecía legal. La siguiente fue un cabezazo de Ximo que logró taponar con la cara Ro Abajas. El peso del crono incrementó la presión del Depor, pero también la ansiedad ante un Rayo que a 20 minutos del final no había rematado a puerta, pero que aguantaba el arreón y esperaba la suya. Numantina defensa madrileña que sufrió tras un pequeño error del gran Dani Martín que aprovechó Ochoa, pero ahí estaba Hermoso para evitar el tanto en el 88′. Y ese fue el regalo, porque a pesar del bombeo de balones, los majariegos ya no volvieron a sufrir.