“Darwin apareció con seis guardaespaldas y me bloqueó en WhatsApp”

Edgardo Chino Lasalvia, director de la agencia de representación TMA, desveló en el programa Fuera de Juego, de Carve Deportiva, los detalles de su ruptura profesional con Darwin Núñez y cómo el delantero decidió que su traspaso del Benfica al Liverpool lo negociara otro agente. La decisión del futbolista no sentó nada bien a Lasalvia, quien arremetió con dureza contra el atacante.

“No tuve la oportunidad de hablar con Darwin. Me enteré cuando vino con seis guardaespaldas y no quiso dar entrevistas en el aeropuerto. Mandé a un chico de la empresa a buscarlo, lo intenté llamar y por un mensaje de WhatsApp me puso que me quería mucho, que iba a ser mi amigo para siempre, bla, bla, bla, pero que iba a empezar un nuevo camino con otra empresa y me bloqueó. No tuve derecho a réplica”, aseguró Lasalvia, en declaraciones de que recogió el diario El Observador.

“Lo vi en el Mundial, a él y a su familia, los saludé de lejos, pero no era el momento de hablar. Esto se va a dar, si va todo bien. A llorar, al cuartito”, continuó Lasalvia, quien añadió: “No tengo contrato con los jugadores, pocas veces firmo nada, porque me parece que la palabra vale más. A ellos les digo, ‘el que quiera irse, que se vaya ya’. Cuando llegan a la cima después de que les he dado todo, les he pagado las operaciones, peleado con los médicos, todos saben lo que he hecho y miro desde afuera. Y estos los empresarios de arriba te compran el último Lamborghini y son superestrellas porque visten de traje y hablan cinco idiomas”.

Lasalvia no se detuvo ahí y continuó criticando el comportamiento de Darwin: “Cada uno elige cómo quiere vivir su vida. Ahora tienen un hijo, pero hay karma y todo vuelve. Hay que ser buena persona y hay que tener buena memoria. Es imposible que no la tengas. Si no, tus padres te enseñaron mal. Cuando estaba en el Benfica hicieron un trabajito de hormiga, le empezaron a comer la cabeza. Es la primera vez que hablo de esto. No podría ir diez veces al año a Portugal. Y a veces, no ir te hace distanciarte o no ver cosas que están pasando y después de explota la bomba en la cara”.

“Es una pelea. A mis jugadores les ofrecen el último iPhone, un coche y 20 lucas (20.000 pesos). A todos mis jugadores de la selección y de Peñarol, cuando estaban en la Séptima no los fue a buscar nadie, cuando estaban lesionados no los fue a buscar nadie. El mundo del fútbol es una prostitución. Nunca me enfadé, solo cuando perdí a Darwin. Me partió por la mitad porque lo adoro, pero entendí que es un negocio. El corazón es para mis hijos y mis amigos de verdad”, añadió el agente uruguayo.