Rashford lidera y Casemiro la lía
Un tanto del inglés y otro de penalti de Bruno Fernandes sirven para que el United se imponga al Crystal Palace, ante quien tropezó el 18 de enero, y se acerque al liderato de la Premier League. Casemiro fue expulsado.
Hace dos semanas y media, el Manchester United viajaba a Londres después de ganar el derbi frente al City y presentar su candidatura en la carrera por el título de liga. Quiso creer, pero su empate ante el Crystal Palace y la derrota frente al Arsenal ofreció una dosis de realidad al equipo de Erik ten Hag. Pero aquí no ha pasado nada. Después de caer ante los gunners, los diablos rojos han sellado su billete para la final de la Copa de la Liga y siguen avanzando en la FA Cup. En su regreso a la Premier League, precisamente ante el Palace, los mancunianos recuperaron su mejor nivel. Ganaron y aprovecharon la derrota del Arsenal ante el Everton a mediodía para quedarse a ocho puntos del liderato.
Erik ten Hag lamentó que los suyos no cerrasen su primer encuentro con el Palace cuando tuvieron oportunidad. Terminaron pagándolo cuando Casemiro fue expulsado y Michael Olise empató sobre la bocina con un libre directo fantástico. El sábado el neerlandés esperaba una reacción de los suyos, que tomaran la revancha. Bruno Fernandes abrió el marcador desde el punto de penalti a los siete minutos después de unas manos de Will Hughes en el área. Fácil y rápido.
El United manejó los tiempos a su antojo, dominando y controlando el juego. Corría el peligro de tropezar nuevamente en la misma piedra, pero Marcus Rashford puso tierra de por medio. El de Wythenshaw llevaba siete partidos seguidos marcando hasta la visita a Selhurst Park. Terminaba una racha que le había llevado a lograr ocho goles tras la reanudación del curso doméstico una vez terminado el Mundial. Se rehízo el sábado en Old Trafford anotando el segundo de la tarde después de un centro de Luke Shaw. Ha anotado once goles en sus trece últimos partidos desde el Mundial.
Cantaba victoria la parroquia mancuniana. Antes de tiempo. Porque Casemiro vio la roja. A veinte minutos para el final Jeffrey Schlupp y Antony se enzarzaron y Casemiro apareció para llevarse a Hughes, tomándolo por el cuello. Después de revisarlo con el VAR, el colegiado echó al brasileño, que podría cumplir un cupo de hasta tres partidos de sanción por conducta violenta.
Cambio de guion. Al Manchester United le entró el miedo, le temblaron las piernas. Tuvo una suerte de déjà vu y no encontraron la forma de reaccionar. Seis minutos de quedar en superioridad numérica, el Crystal Palace redujo la distancia en el marcador. La zaga local no acertó a despejar un corner y Schlupp terminó desviando a la red un disparo a Cheick Doucouré. Apretaron los londinenses, se le congeló la sangre a los diablos rojos. Pero suspiraron aliviados tras el pitido final. Ganaron los puntos, sumaron su 13ª victoria consecutiva en Old Trafford. Siguen acechando el liderato, aunque siguen por detrás del Arsenal y el City.