João Félix no hace milagros

João Félix quiere ser la referencia del Chelsea, pero necesita que el equipo le acompañe. El jugador cedido por el Atlético de Madrid, gol que estrenó el marcador incluido en su segundo partido como Blue, fue la principal amenaza del Chelsea en su visita al Olímpico de Londres. Por momentos, la actuación de sus compañeros sí estuvo a la altura de la del luso. Dos tantos le anularon por fuera de juego a los de Graham Potter en los primeros 45 minutos, el primero de ellos al futbolista portugués. Pero nada más lejos de la realidad. Una jugada aislada permitió al West Ham igualar el partido antes de que ambos equipos se marcharan a vestuarios. Todo sigue igula al oeste de Londres. Los Blues no escalan posiciones y siguen lejos de Europa: 9º y a 10 puntos de la Champions League.

A la segunda va la vencida, João

Ni 15 minutos de partido y los aficionados locales ya tenían dos motivos por las que preocuparse. Primero, la lesión de Lucas Paquetá. Tras ser intervenido en el terreno de juego durante varios minutos por unas molestias en el hombro, el centrocampista brasileño tuvo que ser sustituido a los 10 minutos. Antes, João Félix hizo acto de presencia en el partido. El portugués, que volvía a la titularidad tras su expulsión contra el Fulham, hizo el primero del choque, pero partiendo de posición antirreglamentaria. Estaba en fuera de juego antes de que Reece James lo dejara solo ante el portero Hammer y, tras mandar la vaselina al palo, introdujo el balón al fondo de la red en el segundo intento de disparo. Pero como quien avisa no es traidor, el exatlético volvería a por más.

Minuto 16, asistencia de Enzo Fernández y gol de Joao Félix. Todd Boehly sonreía en el palco. Primer pase de gol en dos partidos para el argentino; una roja y un tanto, hasta el momento, para el portugués en sus dos primeras apariciones en el once. El ex del Benfica puso un balón medido desde la frontal del área para que el ‘11′ de los Blues rematara a placer con el interior de la bota. El Chelsea estaba haciendo estragos filtrando pases a la espalda de la zaga local. Así nació el segundo tanto anulado para los de Stamford Bridge. Kai Havertz dribló al guardameta local en el interior del área y cuando se dirigía a celebrar el 0-2 junto a sus compañeros, el asistente levantó la bandera. Otra vez fuera de juego. Todo estaba saliendo a pedir de boca para los Blues, hasta que la primera ocasión del West Ham levantó tanto a los aficionados del Olímpico de Londres como al equipo de David Moyes.

Kepa Arrizabalaga evitó el tanto el primer tanto del empate local, pero nada pudo hacer a los 28 minutos para impedir el gol de Emerson Palmieri. Del que habría sido un golazo de tacón, obra de Michail Antonio, al infortunio de la defensa visitante que terminaron pagando antes de la media hora de encuentro. El exjugador del Chelsea cazó un centro rebotado en el segundo palo y se benefició de un mal remate para superar al portero español. Empate a un gol y fiesta Hammer. Los fantasmas volvían a sobrevolar a los pupilos de Graham Potter. Tras el 1-1, las llegadas se sucedieron por parte de ambos equipos, con un João Félix que, al igual que ocurrió durante su debut en Craven Cottage, fue el más activo de los suyos. El portugués demostró sobre el terreno de juego sus ganas de ser protagonista.

Más cerca de perder que de ganar

El balón fue para los de Graham Potter durante los segundos 45 minutos. No obstante, el mismo desacierto y precipitación que tenían los Hammers a la hora de contragolpear lo padecían sus vecinos londinenses tanto en el balón parado como intentando percutir por ambas bandas. El varapalo de la primera mitad parecía haber sentado muy mal a los visitantes. Si bien en la primera parte encontraban los caminos hacia el gol de manera sencilla, o al menos hasta João Félix, en esta segunda los Blues no daban con la tecla. Tal fue la desconexión que sufrieron los pupilos de Graham Potter que, al igual que le ocurrió al propio West Ham en la primera mitad, el Chelsea se llevó un susto. El gol de la remontada Hammer, obra de Tomas Soucek en una jugada a balón parado, terminó siendo anulado por VAR, también por posición antirreglamentaria. Susto para los locales primero, susto para los visitantes después, y decepción aún mayor para los Blues. El Chelsea sigue sin ganar y el tiempo de Graham Potter se agota.

Un error de Robert Sánchez impide el triunfo del Brighton; Willian despierta al Fulham

El Brighton tomó ventaja a la hora de juego cuando Solomon March llegó a un buen centro del ecuatoriano Pervis Estupiñan y batió al también español Vicente Guaita. Tenía el control del encuentro el Brighton pero en una acción a balón parado logró igualar el conjunto londinense. Fue en una falta ejecutada por Michael Olise al área. El balón, blando, fácil, se le escapó a Robert Sánchez y cayó cerca de James Tomkins que, de cabeza y a puerta vacía, logró la igualada.

El equipo de Marco Silva despegó de nuevo impulsado por el talento de Willian que sorteó a cada defensa que le salió al paso al cuarto de hora del partido para ejecutar un magistral disparo por la escuadra imposible para el costarricense Keylor Navas. El equipo de Steve Cooper buscó la igualada en Craven Cottage para alargar la buena línea del último mes. Tuvo ocasiones pero no acierto para superar al alemán Bernd Leno. Y al final, un tanto de Manor Solomon despejó la incertidumbre y acentuó la victoria local.