Echeverri desafía al genio Estevão

Un Clásico sudamericano siempre es un Clásico sudamericano sin importar la categoría. Tras ganar ante Venezuela por un contundente 5-0, y sabiendo que Brasil les esperaba en los cuartos de final, varios de los jugadores argentinos expresaron que jugar ante la Canarinha siempre es algo distinto. Y en este Mundial Sub-17 de Indonesia, con la semifinal en juego y el sueño de un título que Brasil ha obtenido en cuatro ocasiones por ninguna de la Albiceleste, la repercusión alcanza una cota mayor.

El atractivo de un enfrentamiento entre las dos potencias futbolísticas del continente sudamericano siempre lleva consigo algo especial, y en esta ocasión en el plano futbolístico se sobreponen dos nombres por encima del resto: Estevão ‘Messinho’ Willian y Claudio ‘Diablito’ Echeverri. Seguramente, las dos estrellas que tendrán sobre el campo ambas selecciones. En Palmeiras y River Plate ya son conscientes de lo que tienen entre manos, y aunque es importante no quemar etapas con estos chicos de 17 años, su atención ya ha traspasado fronteras.

Con la ‘10′ por parte del argentino, y el ‘20′ en la espalda del brasileño, una de las cosas más curiosas de ambos jugadores son sus motes, alejados de leyendas de sus respectivos países. ‘Diablito’ Echeverri fue denominado de esta forma por su parecido futbolístico al boliviano Marco Etcheverry (al que apodaban Diablo). Técnico, con ritmo y participativo, tendrá delante a un jugador que no cesa también en sus intentos por destacar con la pelota, teniendo ese punto de regateador brasileño. ‘Messinho’, que recibe este nombre porque le gusta mucho Leo Messi y además coincide que es zurdo, siempre ha querido que le llamen Estevao.

Con el interés de Real Madrid y Barcelona tras ellos, el foco del partido recae sobre sus figuras, aún habiendo otros chicos como Agustín Ruberto y Kauã Elias (los dos máximos goleadores del torneo) que están consiguiendo un gran impacto en Indonesia.

En el apartado estadístico, el peso de las cifras cae del lado del de Palmeiras. Con tres goles y tres asistencias en lo que va de campeonato, Estevão se está destacando como el extremo más letal. Gestualmente recuerda a Neymar en ciertas cosas, sobre todo en la manera de afrontar el regate para superar a los rivales. Su condición de juego, de hecho, no se basa en buscar intervenir solo en las bandas. Le gusta despegarse de ella para también tratar de desmarcarse por otras zonas del campo contrario. Echeverri, con dos goles y una asistencia hasta el momento, ha sabido ser una pieza que da continuidad al juego de su selección. Dejando algún toque y acción de genio emergente, el de River técnicamente demuestra estar por encima de la media, y sus compañeros saben aprovecharlo. Y no solo destaca por sus acciones individuales, también por lo bien que sabe tratar a la pelota cuando la mantiene entre sus botas.

Sea de la forma que sea, en Jakarta tendrá lugar un Clásico sudamericano Sub-17 26 años después. Uno especial que puede arrojar los nombres del futuro de Brasil y Argentina. Con dos chicos de 17 años que están llamados a ser estrellas de sus respectivos países.

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