David Dóniga: “Quiero hacer de El Salvador un equipo ganador”

Poco a poco, pero con paso firme y rotundo, David Dóniga (Madrid, 1981) se va consolidando como uno de los entrenadores más jóvenes y sólidos a nivel internacional. A comienzos de este año ha sido nombrado seleccionador de El Salvador, cargo que estrena con un amistoso ante el Inter Miami de Messi, Luis Suárez, Busquets y Jordi Alba, entre otros. Tras más de diez años en la élite, el técnico madrileño asume el reto que le propone la Selecta, teniendo entre ceja y ceja clasificar en el próximo Mundial de 2026.

-Enhorabuena lo primero. ¿Contento?

¡Muy contento. Imagínese! El representar a una selección histórica, que ha estado en dos Mundiales y el sentimiento de todo un país. Es una responsabilidad muy grande y a la vez un orgullo que esa responsabilidad me la hayan concedido a mí. Me siento agradecido, con responsabilidad.

-¿Cómo le llegó esta oportunidad?

La selección de El Salvador se ha enfrentado a Panamá. Yo me he enfrentado a ellos desde mi rol de asistente y conociendo el fútbol centroamericano estaba preparado para asumir un equipo que compitiera en competiciones que yo conocía. Entonces, entiendo que se han dado todas las circunstancias para que mi perfil fuera importante. Llevo hecho un camino muy largo a nivel profesional, a nivel de clubes importantes, trabajo con selecciones… y cuando han necesitado un técnico que se ajustara a lo que ellos estaban buscando, yo era un candidato ideal, entiendo, para lo que estaban buscando en este momento.

-¿Qué puede esperar la selección de El Salvador de usted?

El trabajo que he venido realizando los dos últimos años como primer entrenador que ha sido poner en el terreno de juego todas las ideas que he ido adquiriendo con entrenadores de alto nivel con los que he trabajado y con los que, yo entiendo, pueden hacer mejorar las ideas de otro. Siempre nos apoyamos en grandes profesionales que nos dan ideas, y de esas ideas surgen planteamientos, estrategias y todo aquello que yo entiendo que puede servir para El Salvador. Desde ese punto de vista y como han demostrado mis equipos en los últimos años (equipos competitivos, adaptativos), que van a adaptarse a las circunstancias que se van a tener que enfrentar y van a responder de una manera efectiva, sobre todo con mucho cariño por el balón y por tener esa iniciativa en condicionar al rival para evitar que te condicionen.

-Deduzco que es un contrato con vistas al Mundial de 2026. ¿Cómo afronta ese reto David Dóniga?

¡Imagínese lo que puede ser ir a un Mundial! Me quedé con la miel en los labios en abril de 2022 ante la posibilidad de poder ir a Qatar y ahora mismo la ilusión es desbordante por este reto que nos puede llevar a una cosa con la que todo el mundo sueña como es estar en un Mundial de fútbol, que de niños hemos visto tantos en televisión con tantos grandes futbolistas llegar y otros no poder disputar que el estar ahora mismo protagonizando esto y además poder impulsar que El Salvador vuelva a los Mundiales después de algo más de 40 años es un reto apasionante y me enorgullece.

-¿Se ve en la cita de Estados Unidos, Canadá y México?

Por supuesto. Ese es el primer paso para que alguien pueda afrontar cualquier reto. El día que yo afronte un partido sin la seguridad de que mi equipo no pueda ganarlo, yo no podría dedicarme a esto, porque afrontar los partidos, ese estímulo de saber que puedo competir con cualquier rival y que puedes utilizar tus armas para batir al contrincante es imprescindible. Si no, no puedes trabajar en el mundo del fútbol.

-Debutará este viernes ante un equipo en auge como el Inter Miami, encima sin tener casi tiempo para poder encuadrar sus ideas en el equipo. ¿Cómo se están preparando?

Como preparo cada partido. Lo importante para mí es representar a El Salvador como merece. Tenemos ante nosotros un reto importante en el medio plazo (el Mundial 2026) y, a la vez, uno en el término inmediato, que es volver a recuperar el camino de la victoria.

Conocemos la organización del rival y eso nos da una referencia. Es cierto que con solo seis entrenamientos el tiempo es poco para generar hábitos; pero es lo que tenemos y, con mi forma de plantear la estrategia de partido, podemos dedicar lo suficiente para que los chicos practiquen un plan claro en torno a las situaciones de juego que nos vamos a encontrar en este corto periodo de tiempo.

-¿Cómo se puede parar a Messi?

Será la quinta vez que me enfrente a Messi. Las otras cuatro pudimos sacar tres empates contra su Barcelona tanto con Dépor como con Betis. Y en esos empates, pese al resultado positivo, Lionel fue determinante. Debemos plantear una organización colectiva que reduzca las opciones, en general, de ventaja para ellos. Y que él, en concreto, no disponga de espacio para aprovecharlo. Ayudas al compañero cercano al 10 cuando tenga balón y vigilancias férreas sobre él cuando esté alejado de la zona de balón.

-Este es un Inter Miami ‘galáctico’ y más ‘culé’ como nunca se ha visto desde 2019. Más allá de Messi... ¿qué jugador cree que podrá marcar la diferencia en el partido?

Entiendo que el juego combinativo del equipo pasa por el posicionamiento de Busquets. Ese eje por delante de la línea defensiva con balón y sin balón, y a veces entre los centrales para generar profundidad desde el primer tercio de campo, es una clave; otra puede ser evitar la profundidad por el lado izquierdo… Nada nuevo, ¿verdad? Quizás el juego directo con Campana (si no jugara Suárez) para salir de la presión puede ser peligroso si ganan los segundos balones. Son tres ideas en base a tres jugadores por el patrón del juego del equipo.

-¿Puede ser este un debut a la altura de uno de sus sueños?

Sin duda, y por muchos motivos: por poder dirigir a El Salvador, por lo que su historia representa y por los millones de personas que tiene detrás; por el escenario, un Cuscatlán mítico en el que vamos a contar con nuestra gente; por las ganas de brindar una victoria tras una racha nada afortunada de resultados que todos deseamos romper este viernes.

-Encima es un debut por partida doble, con Luis Suárez sumando sus primeros minutos con las ‘Garzas’...

Al igual que a Leo, sé lo que es sufrir a Suárez. Como te mencionaba anteriormente, si dispone de sus primeros minutos con el equipo será otra dificultad añadida a la del propio partido en sí. Su capacidad para encontrar opciones de remate en el área y esa alternativa en el juego más directo son aspectos a tener en cuenta en nuestro desempeño sin balón. Sin duda que nos exigirá el máximo durante el tiempo que esté en el terreno de juego y para eso nos hemos preparado.

-Prácticamente no quedan entradas para este primer partido en el Estadio Cuscatlán. ¿Qué espera de la afición salvadoreña para el partido?

Como le dije a nuestra gente en el día de mi presentación, espero que pueda ilusionarse con el trabajo arduo que llevamos haciendo desde el día de mi llegada y la pasión con que afrontamos la preparación de los partidos con el objetivo claro de romper esa racha sin victorias. Quiero hacer de este equipo un equipo ganador y eso solo se construye desde cada entreno, desde cada partido. No le vamos a pedir nada, vamos a darle todo lo que tenemos. Estoy convencido de que van a saber valorar el alma que vamos a poner en el partido y que se van a sentir orgullosos de su “Selecta” y de los profesionales que les representamos cuando el árbitro pite el final.

-Ahora va a pasar de trabajar casi diariamente con sus jugadores a hacerlo más separado en el tiempo, algo que usted ya ha hecho. ¿Es tan grande ese salto?

La diferencia principal son los tiempos, es una obviedad. Lo que pasa es que hay que saber qué diferencia genera. Esa diferencia de que algunos entrenen y compitan casi a diario, entre semana o cada fin de semana con respecto a un equipo que sólo se junta un microciclo de cinco, siete, diez o quince días cada dos-tres meses para jugar dos-tres partidos seguidos. Hay muchos factores que si no estás en selecciones no puedes entender o te puede sorprender. Por ejemplo la dificultad de encarar dos-tres partidos en ocho días que implica que tienes que utilizar a muchos futbolistas.

El hecho de poder entrenar cuando no hay ventanas FIFA porque lo permite la reglamentación con jugadores nacionales que te permite generar más dinámicas y que luego, los que están fuera del país se incorporen… Hay una diferencia, en la que yo siempre intento generar ventaja y el trabajo no va a ser menos intenso porque pese a que no haya un trabajo tan exhaustivo cada día de lo que te viene, sí hay mucho trabajo de oficina, mucho scout, mucha observación de futbolistas y eso es mucho tiempo y requiere mucha planificación.

-¿Se va a establecer en El Salvador, o va a estar yendo y viniendo a Europa para controlar jugadores?

Mi deseo es vivir en el país, por muchas razones. La principal es vivir el día a día y sentir lo que siente el aficionado de a pie y el jugador. Esa es una información fundamental para que pueda ejercer mi trabajo, y desde la distancia no me sentiría cómodo.

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