Asensio sigue el ‘método’ Mbappé

El fútbol está cambiando. Tradicionalmente los futuros de los futbolistas se han gestionado de una llana manera: antes de empezar un último año de contrato, había que decidir si se abordaba una renovación o una venta. Ese curso restante ejercía como presión para las negociaciones. Para el club suponía la responsabilidad de ampliarle el contrato o venderlo, pero no hacer ninguna podía suponer que el futbolista se marchase a coste cero. Esta praxis, poco ortodoxa hace diez años, está empezando a ser rutinaria. Y el más reciente en subirse a la ola de la última moda ha sido Asensio, cuyo contrato con el Real Madrid acaba en 2023 y su futuro... sigue en el aire.

El balear, concentrado con España, ofreció una rueda de prensa el pasado martes en la que soltó la bomba. “La situación es clara con usted: sabe que el Madrid o le renueva o le vende, pero no le dejará salir gratis”, aseveró un periodista. A lo que Asensio, con rostro serio, contestó: “Hay una tercera posibilidad. Quedarme y cumplir el año que me queda de contrato”. Esa respuesta, en una información de El Larguero, no sentó bien en el Madrid. “Me da la sensación de que estas nuevas declaraciones están consensuadas con su agente. El club no contempla que se quede un año sin renovar y la relación Mendes-Real Madrid no atraviesa su mejor momento”, señaló el periodista Antonio Romero.

Aparece Jorge Mendes

Y en este sentido hay una cuestión clave: Marco Asensio cambió de agente hace escasos meses, dejando las negociaciones de su futuro en manos de Jorge Mendes. En concreto, el 23 de abril. Ese día hizo público un texto en el que se despidió, de manera cariñosa, de Horacio Gaggioli, el que hasta ahora ha sido no sólo una pieza fundamental de su vida, sino también de su pasado -y presente- deportivo. Con Gaggioli llegó al Madrid, sin ir más lejos. “Has sido una parte fundamental para que pueda conseguir mi sueño y nunca me olvidaré de todo lo que has hecho por mí. Eres parte de mi familia y eso no va a cambiar”, escribió. La ‘ruptura’ fue de mutuo acuerdo, para nada traumática. Pero la conclusión fue que el nuevo representante de Asensio, ahora, es Jorge Mendes.

Una nueva moda

En estos momentos la única certeza es que Asensio ha decidido unirse a una moda que ha tenido muchos rostros en la historia reciente. Dentro del Madrid, sin ir más lejos, dos nombres propios: Sergio Ramos e Isco. El camero llevó las negociaciones de su futuro hasta el filo, entrando en el último año de contrato sin haber renovado ni dicho adiós. Su marcha al PSG ya es sabida por todos. Como que Isco no seguirá la temporada que viene. Pero en Chamartín, sabedores de esta nueva corriente, han optado por pescar en ella. Prueba de ello es que muchos de los últimos fichajes están siendo futbolistas en esa situación; que han llegado gratis tras acabar sus contratos. Por ejemplo, Alaba o mirando más al presente, Rüdiger. El fichaje de Mbappé, finalmente frustrado, transitaba por estos mismos raíles.

Este mercado de fichajes tiene a múltiples jugadores que han finalizado sus contratos sin tomar, aún, una decisión. El de mayor valor, según índices de Transfermarkt, es Pogba (55 millones), que en tres semanas será agente libre y cuyo futuro, tal y como contó AS hace varias semanas, parece ligado a un retorno a la Juventus. Precisamente de Turín puede salir Dybala, cuyo próximo paso podría seguir en Italia, en concreto, en el Inter de Milán. Su contrato con la Juve, a donde llegó el verano de 2015 procedente del Palermo, finaliza este 30 de junio. Otro ejemplo actual sería Di María, recientemente despedido de París tras terminar su vínculo con el PSG: juega con la opción del Barça, pero parece que ha optado por la Juventus como opción principal.

Messi, el gran ejemplo

Pero el mayor modelo, en lo que a dimensiones mediáticas se refiere, sin duda fue Leo Messi en 2021. El argentino enfiló su último año de contrato con su futuro en el aire. No había renovado; no había anunciado su adiós. Jugó esa temporada sabiendo que el 30 de junio quedaba libre. Y acabó saliendo rumbo a París. El Barcelona vio como el mejor futbolista de su historia se marchaba sin dejar un euro en las arcas. Por ese camino parece estar yendo ahora Dembélé, cuya decisión aún es una incógnita, según dijo su propio representante, que aprovechó para pedir “respeto” a los clubes a la hora de opinar sobre su representado. El Chelsea, parece en la pole por ficharlo. Son ejemplos y ejemplos de futbolistas que vivieron la “tercera posibilidad” de la que habla Asensio: quedarse y jugar el último año de contrato, sin tomar una decisión antes. Una corriente que ya es moda.