Albert Celades, ante el dilema de usar su sistema favorito

"No venimos a romper con lo que hizo el anterior cuerpo técnico". Esas fueron las primeras declaraciones de Albert Celades cuando aterrizó en Valencia aquel convulso 11 de septiembre de 2019. Las palabras del técnico no estuvieron vacías, pues en estos ocho meses que lleva al frente el equipo ha mantenido ciertos automatismos que aprendió con Marcelino. Sin embargo, cuando apenas llegó su segundo encuentro en LaLiga, frente al Leganés en Mestalla, su alineación ya dibujó un 4-3-3, un sistema nunca antes empleado por Marcelino y que ya dejaban ver que el catalán tampoco iba a dejar de dotar de su identidad a la plantilla.

Los cambios de sistema no han sido una constante en el Valencia de Celades esta temporada, donde ha empleado el 4-4-2 de forma más recurrente en 18 ocasiones, el 4-3-3 o 4-1-4-1 en cinco y el 4-2-3-1 una vez. Sin embargo, el entrenador sí que ha flexibilizado el dibujo sobre el terreno de juego.

Y es que, mirando con perspectiva, Celades en dos de sus tres primeros encuentros en LaLiga se inclinó por el 4-3-3 con Coquelin y Kondogbia en el once, pero en vistas de que no dio el resultado que esperaba (el equipo cosechó dos empates en Mestalla), se refugió en el clásico 4-4-2 los siguientes encuentros obteniendo dos victorias. En el Wanda, el técnico volvió a probar a Coquelin y Kondogbia junto a Parejo, pero el experimento apenas duró 60 minutos hasta que, de nuevo, el dibujo de dos delanteros dio mejor cara al equipo.

El equipo evolucionó con Celades a los mandos pero ya en los últimos meses antes del parón por el Covid-19 dio señales de confusión, no terminaba de ser el equipo de Marcelino pero tampoco alcanzaba a ser el equipo que Celades quería. Ahora con la 'mini pretemporada' que hay por delante el técnico tiene ante sí una disyuntiva: Aprovechar las últimas semanas sin fútbol para dotar de una identidad suya al equipo o seguir en la línea que, pese a la irregularidad, le permitió clasificar a octavos de Champions y estar en la lucha por Europa.

Hipótesis al margen, Albert Celades tiene 'ADN Barça' de origen y resquicios del fútbol de toque que practica la Selección Española. El 4-3-3 con el que se presentó en Mestalla dejó claras sus intenciones, pero el retorno al dibujo que funcionaba llevó a la conclusión de que con dos encuentros por semana carecía de tiempo para cambiar lo que había funcionado hasta entonces.

"No se trata tanto del dibujo que construimos sino del estilo de juego que queremos desempeñar" ha repetido Celades en infinidad de ocasiones. En este parón podrá aprovechar o bien para perfeccionar un estilo rocoso que le funcionó a la plantilla los últimos tres años o para terminar de matizar un modo de juego más combinativo que, de forma irregular, ha funcionado esta temporada.