ESPANYOL

Darder, centenario y fiel

El mediocentro alcanza 100 partidos en Primera y este verano rechazó ofertas mejores para continuar de perico y vivir una temporada ilusionante.

EI pasado sábado llevó la batuta del nuevo Espanyol de Rubi el día que cumplía 100 partidos en Primera. Sergi Darder ya ha pasado a ser centenario en LaLiga, con sus 36 partidos en el Espanyol y los 64 del Málaga. Es curioso que el ahora jugador bandera del club saliera por la puerta de atrás antes de dar el salto al primer equipo y tuvo que ser en Málaga, rescatado por José Manuel Casanova, donde recibiera su bautizo como jugador de elite; pero, cinco años después de aquel episodio, inicia una temporada prometedora con el Espanyol.

Al margen de centenario, Darder se ha destapado este verano como perico fiel. Debido a su cartel en otras ligas europeas, el centrocampista ha recibido el interés de varios clubes este verano, lo que hizo que su futuro entrase en un estanco incierto. Sin embargo, el mallorquín le trasladó a sus representantes que esta temporada quería disfrutar con el Espanyol, estaba muy ilusionado con la propuesta de Rubi y quería vivir una buena campaña en la que considera su casa. La ilusión de Darder se desveló con su famosa declaración en la gira estadounidense, donde se difundió el concepto de Darderismo.

El propio Rubi habló así del jugador después del encuentro ante el Celta, dejando claro que le exigiría más que a nadie. “Cuando el balón pasa por Darder pasan cosas. Se nos abre la luz en ataque. Es fundamental que se exija. Ha estado correcto, pero puede hacerlo mejor. Es un futbolista especial. No le dejaré que se relaje, quiero que dé el máximo. El Espanyol genera con él, tiene hambre y quiere hacer una buena temporada”, comentó.

A Darder le quedan aún cinco años más de contrato y el Espanyol tiene aún que hacer dos pagos al Olympique de Lyon por unos cinco millones.

El tercer jugador más avanzado del equipo

Sergi Darder es un verso libre cuando el Espanyol tiene el balón. Así lo demostró en la pretemporada, donde ha logrado marcar hasta tres goles y dar varias asistencias; y en Balaidos, partido en el que se convirtió en el tercer jugador que durante el encuentro actuó en una posición más avanzada. Su rol con Rubi es otro al que desempeñaba el curso pasado. Darder ejerce ahora más de Joan Verdú que de Javi Márquez, por citar a dos perfiles que actuaron juntos en el Espanyol y que todo perico recuerda.

El futbolista, al margen de sus obligaciones defensivas, acude menos a zonas de creación, donde delega esa tarea a Marc Roca y a los centrales, mientras que intenta recibir siempre entre líneas, a la espalda de los mediocentros rivales con tal de poder ayudar a la finalización de las jugadas. Eso le puede convertir en un futbolista determinante en el Espanyol, por su facilidad para dar el último pase. Es un rol nuevo para el mallorquín, que no desempeñaba en Málaga ni en el Lyon, tampoco en el filial perico, donde era Pau Senent quien disfrutaba de más libertad. Pero con el sistema de Rubi, Darder da un paso adelante.

Lo más visto

Más noticias