"Quedan muchísimos puntos y podemos optar a todo"

—¿Qué tipo de partido espera frente al Osasuna?

—Un partido interesante por todo lo que rodea a este encuentro. Se trata de un reto más, un reto bonito y a ver la respuesta que damos. Todos los partidos son disputados y quizás éste tiene estos ingredientes especiales de la historia, de la intensidad, todos sabemos que El Sadar es un campo complicado, el Osasuna siempre tiene un ADN muy concreto… Un partido interesante.

—Viendo las dinámicas de ambos equipos, ¿considera que el Zaragoza es favorito?

—Por supuesto que es bueno lo que estamos haciendo, pero no es decisivo de cara al partido, mucho más cuando el Osasuna juega de local y es un equipo que defensivamente es muy fiable. Si jugamos como en los últimos partidos estaremos más cerca de ganar, pero a partir de ahí hay un rival que intentará que nosotros no hagamos lo que estamos haciendo. A ver si somos capaces de tener esa personalidad en un campo que exige personalidad. Si no, es muy difícil puntuar.

—El Zaragoza ya se metería en puestos de playoff ganando al Osasuna. ¿Qué importancia le da Natxo González a este encuentro?

—La justa y necesaria. Es evidente que si ganamos nos metemos en las posiciones de privilegio, pero también es verdad que quedan doce jornadas, once tras el partido, y nosotros estamos dentro del objetivo del que hablábamos, que era llegar a las últimas ocho jornadas con opciones de disputar esas posiciones. Todavía hay muchos puntos y siento que es un partido importante, que nos llega en un buen momento, pero tampoco es decisivo.

—¿Percibe ahora algo más de presión en el vestuario por el hecho de estar tan cerca del playoff?

—Este equipo se ha caracterizado por ser siempre un grupo alegre, así que es complicado medirlo. Incluso cuando las cosas no iban todo lo bien que queríamos, siempre se ha caracterizado por esa alegría. ¿Cuándo no hay presión aquí? Por una cosa o por otra… Y como decía uno de los componentes de esta plantilla, bendita presión de poder estar jugando ahora por lo que estamos jugando cuando hace dos meses era lo contrario. Hay que ser conscientes de cuál ha sido el camino para tener esta posibilidad ahora y que el entorno no nos haga entrar en una zona de confort que no nos interesa.

—¿Considera que el Zaragoza sería candidato al ascenso directo si gana al Osasuna?

—No me lo planteo. Repito que quedan muchísimos puntos y podemos optar a todo. Por puntos y por tiempo podemos optar a ascender directamente, a jugar el playoff e incluso a volver a meternos abajo.

—Cuando dijo que el proyecto iba a acabar fantásticamente en esos momentos tan complicados, ¿tiró de ironía o de lo que realmente sentía?

—Siempre he transmitido lo que yo sentía y seguiré transmitiendo lo que siento. Incluso os dije un día que me dejarais creer en esto porque verdaderamente es así. No voy a lanzar un mensaje por lanzarlo porque además sabía que en esos momentos no me lo ibais a comprar.

—El Zaragoza ya ha disputado últimamente varios partidos contra equipos de arriba y el equipo compitió bien y terminó ganando. ¿Es ése el camino a seguir?

—Quizás si nos vamos a las últimas jornadas fuera de casa, yo creo que es otro tipo de partido. Debemos subir un escalón más porque la exigencia va a ser incluso mayor. Es un paso más en cuanto a intensidad e ingredientes que rodean este partido, así que no tiene mucho que ver por el tipo de rival, por el tipo de campo, por su afición… Hay unos añadidos que van a hacer que sea un partido todavía más complicado que los últimos como visitantes.

—¿Espera un Osasuna algo diferente a lo que ha sido históricamente, quizás con algo más de toque?

—Un entrenador puede ser de un determinado perfil, pero no hay que olvidar el ADN de los clubes. Así que creo que los entrenadores nos tenemos que adaptar un poquito a lo que ha sido el club siempre. Yo me tengo que adaptar al perfil de juego que siempre ha tenido el Real Zaragoza y en este caso el entrenador del Osasuna tendrá su idea de juego, pero tiene que adaptarse lo más posible a los puntos fuertes de un equipo como Osasuna y más teniendo a jugadores de Pamplona, que desde pequeños han mamado un tipo de fútbol.

—Frente al Lorca jugaron Perone y Mikel como centrales, pero para este partido recupera a Grippo. ¿Tiene claro a quién poner de los tres?

—Ahora mismo tenemos a los cuatro centrales al 100%. Me duele mucho dejar fuera a Verdasca, que está entrenando fantásticamente, y también me dolerá dejar a uno de los tres en el banquillo, pero esto va con el cargo. Tenemos cuatro centrales muy competitivos y por un lado está la tranquilidad que te da saber que cualquiera que entre es fiable y por otro lado el hecho de que se queden fuera es un marrón.

—¿Arriba lo tiene claro con el regreso de Pombo y la ausencia de Papu?

—Pombo viene de esa dinámica buena y es una opción clara junto con Borja. Es una posición en la que la gente también está trabajando bien y por ejemplo tengo que dejar fuera a Alfaro, pero ahora tenemos a prácticamente todos disponibles y al nivel que está el equipo en el día a día es complicado.

—Repite en la convocatoria Toquero. ¿Cómo está físicamente?

—Obviamente no está para jugar noventa minutos, pero si el partido no llega bien al último cuarto de hora, es un jugador que en el juego aéreo y en acciones a balón parado te puede dar mucho rendimiento. Entre Borja, Pombo, Vinícius y Toquero tenemos diferentes perfiles para lo que necesitemos dentro del campo en esos momentos puntuales.

—Papu no ha entrado en la convocatoria. ¿Qué le pasa?

—No ha estado en las últimas sesiones, tiene ahí un golpe fuerte y consideramos que no estaba al 100% para jugar. Además, tiene que irse a Georgia con su selección y he considerado que era mejor que entrara otro.

—Javi Ros ya se ha reincorporado al grupo esta semana, pero finalmente no está en la convocatoria. ¿Cómo está de su lesión?

—Esta semana ha ido entrando con el grupo, pero no ha hecho todo el trabajo. Ha ido entrando poco a poco en los ejercicios que considerábamos que podía entrar para ya la semana que viene meterse al 100% con el grupo.