Longo Borghini se hace eterna con su primer Giro Women

El símbolo del infinito al cielo de L’Aquila. Es lo que refleja el trofeo de campeona del Giro Women que Elisa Longo Borghini alzó en la capital de los Abruzzos para hacerse eterna, para entrar, por derecho propio, en el olimpo del ciclismo femenino. La italiana, a sus 32 años, conquistó la primera grande de su palmarés, carrera a la que llegó con la etiqueta de máxima favorita. No sin sufrimiento, a pesar de liderar la carrera de principio a fin, Longo Borghini superó a Lotte Kopecky en 21 segundos, uno de los márgenes más estrechos de la historia de la carrera, después de iniciar la última etapa con un único segundo de renta. El podio lo cerró el gran descubrimiento de esta ronda italiana, la australiana Neve Bradbury, que se sube a su primer cajón en una grande con tan solo 22 años, gracias a su sorprendente triunfo en la etapa reina.

“Fue un epílogo increíble para una semana perfecta. Me gustan este tipo de situaciones, estar bajo presión, pelear codo con codo. Empecé con un segundo de ventaja, pero estaba motivada para darlo todo y todos en el equipo me apoyaron. Lucir la última maglia rosa es algo especial, estoy orgullosa de lo que he hecho, aunque necesitaré tiempo para procesarlo”, analizó Longo Borghini, visiblemente emocionada, tras concluir la octava y última etapa, en la que llegó a meta con una ligera ventaja sobre el resto de favoritas. El triunfo fue para la mauriciana Kimberley (Le Court) Pienaar, mientras que Mavi García finalizó 9ª de la general como la mejor española.

El éxito de Longo Borghini es significativo para el ciclismo italiano, que no conquistaba un Giro femenino desde la legendaria Fabiana Luperini. La ‘Pantanina’ sumó su cuarta y última corona de la ronda italiana en 2008, por lo que su compatriota puso fin a una sequía de 16 años. Además, especialmente emotivo para el equipo Lidl-Trek, que vivió un duro episodio el pasado mes de mayo con el terrible accidente de Elisa Balsamo en la Vuelta a Burgos (fractura nasal y conmoción cerebral). Las ‘tocayas’, esta vez juntas, pasaron página de ese desagradable recuerdo del mejor modo posible.

Ahora, queda por ver si Longo Borghini es capaz de aspirar a la corona en un Tour de Francia femenino (12 al 18 de agosto) en la que la suerte, hasta el momento, le ha sido esquiva: 6ª en 2022 y abandono en 2023. Por si fuera poco, allí tendrá como principal adversaria y máxima favorita a la vigente campeona, Demi Vollering. La neerlandesa, en la que será su última gran carrera con el SD Worx (en 2025 recalaría en el FDJ-SUEZ), ya superó este año a la italiana (3ª) en La Vuelta, de la que ella salió vencedora. La ronda francesa dictará sentencia, deshará el empate.

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