Alberto Dainese se apunta un ajustado esprint y Thomas conserva el rosa

No news, good news. Eso fue lo que sucedió, tal como se esperaba, en una anodina 17ª etapa del Giro de Italia en la que, al menos, no hubo daños que lamentar para los ciclistas. Prácticamente, hablábamos de una jornada de descanso activo, en la que los corredores completarían casi 200 km en continuo descenso. El desenlace no podía ser otro que el de un esprint masivo, el penúltimo que veremos en esta ronda italiana y el sexto sobre el recuento total. Después de las victorias de Jonathan Milan, Michael Matthews, Kaden Groves, Mads Pedersen y Pascal Ackermann, le tocó el turno a Alberto Dainese, que consiguió su segundo éxito parcial en el Giro tras el cosechado el año pasado.

El italiano le dio a su país el tercer triunfo en esta Corsa Rosa, tras Milan y Bais, para satisfacción de un DSM que se marchará tranquilo de un Giro en el que ha cumplido sus objetivos sobradamente. Después de que Andreas Leknessund fuera líder durante cinco días, ahora el velocista de Abano Terme estrena el casillero de victorias de la escuadra neerlandesa en esta ronda italiana (duodécimo equipo que suma al menos un triunfo). Dainese, de paso, se desquita de su descalificación en la etapa pasada por agua en la que Mark Cavendish, hoy desaparecido, acabó en el suelo por una maniobra ilegal del italiano en pleno esprint. Nada que destacar respecto a los hombres de la general, por lo que Geraint Thomas partirá este jueves, en la primera de las tres etapas que decidirán el Giro, como maglia rosa.

Los corredores se libraron de una lluvia que se dejó ver pocos minutos después de su partida en Pergine Valsugana, localidad de salida. Según las previsiones meteorológicas, el viento también podía animar la etapa hacia el ecuador de la misma, pero en cualquier caso se esperaba que éste fuera favorable. Así era difícil romper el clásico guion de fuga, neutralización y volata. Cuatro ciclistas, más por corazón que fe, se escaparon desde los primeros compases de carrera, pero los equipos de los velocistas no dejaron que la ventaja de Senne Leysen (Alpecin), Thomas Champion (Cofidis), Charlie Quarterman (Corratec) y el español Diego Pablo Sevilla (EOLO-KOMETA) sobrepasase los tres minutos.

Cada uno de ellos fue engullido por el gran grupo uno a uno, siendo Leysen el último que sacó bandera blanca a falta de 5 km para meta. Fernando Gaviria, más sólo que la una, se tuvo que buscar la vida, por lo que derrochó demasiadas fuerzas para recuperar posiciones y no llegó ni a levantarse del sillín en el esprint. Matthews tomó la delantera, pero a su derecha apareció Dainese y a su izquierda Milan. Los tres, en paralelo, cruzaron línea de meta, pero la foto finish reveló que el italiano se llevaba el gato al agua por cuestión de centímetros. La general se empezará a definir de forma definitiva a partir de este jueves con el final en Val di Zoldo. Llega la hora de la verdad.