Nuevo mazazo a la Federación Vasca de Baloncesto
Un juez de Bilbao obliga a readmitir al exsecretario general o a indemnizarle por despido improcedente. Le habían acusado de ser responsable de la pérdida de la importante subvención del Gobierno vasco.
Nuevo mazazo a la Federación Vasca de Baloncesto. El Juzgado de lo Social número 8 de Bilbao ha fallado contra el estamento que preside Luis Mari Sautu desde hace dos años y a favor de Koldo Echevarría, exsecretario general, que fue despedido el 3 de junio de 2022 en base a dos acusaciones que ahora han sido reprobadas.
La llegada del nuevo dirigente supuso la salida de uno de los tres trabajadores de la FVB. Echevarría era uno de los dos que se quedaron, y que vio incrementada su carga de trabajo. El año pasado muchos clubes vascos pusieron el grito en el cielo por haber perdido la subvención de 143.252 euros del Gobierno vasco por no presentar la documentación a tiempo. La explicación era clara: los trámites tenían que completarse por vía telemática, y para que lo lanzase la federación, tenía que renovar los permisos el nuevo presidente. Al final se pasó el plazo y derivó en un cataclismo, ya que se volatilizaban 143.252 euros, más del diez por ciento de los ingresos para sacar adelante los gastos de la Vasca.
Después de esa polémica, fue despedido el secretario general, Koldo Etxebarria, con 30 años de antigüedad en el organismo tras acceder al mismo el 1 de abril de 1993. Le achacaban que era culpa suya la presentación de la solicitud fuera de plazo y uno de los requisitos para que se llevara a cabo la misma, esto es la Memoria Proyecto Liquidación del presupuesto del año anterior (2021), así como la aportación de facturas y justificantes de pago.
Echevarría demandó a la Federación Vasca y el pasado 23 de enero se celebró el juicio, al no llegarse a un acuerdo en el acto de conciliación entre ambas partes. A la hora de despedirle, el organismo le acusaba de “fraude, deslealtad y abuso de confianza en las gestiones encomendadas”.
“Los perjuicios son devastadores y van a obligar a modificar sus actividades de promoción deportiva, selecciones y competiciones para otorgar viabilidad económica a la federación, porque no puede acceder a la subvención del año en curso de ninguna manera”, se constata en la sentencia, que puede ser recurrida. Esta considera “despido nulo o subsidiariamente improcedente” y echa por tierra la acusación de “transgresión de la buena fe contractual”.
El juez obliga a readmitir en cinco días al trabajador “en las mismas condiciones” que tenía hasta ahora o dar por extinguido con el contrato la indemnización de 98.856,29 euros. Además, hay que compensar esta ausencia a su puesto de trabajo con 116,13 euros de importe diario a contar desde el día del despido.
Se da la circunstancia de que el actual vicepresidente de la FVB, Arturo Aguado, ejerció de presidente durante 11 años siendo Koldo Echevarría secretario de dicha entidad, lo que no parece que en su momento resultara atenuante para las graves acusaciones vertidas sobre Echevarría por parte de la FVB.