Aivazoglou: “¿Real Madrid y Barcelona? Queremos a los mejores en nuestro proyecto”

George Aivazoglu (Salónica, Grecia, 1981) es el director general de la NBA para Europa y Oriente Próximo desde hace un año y antes fue responsable de fan engagement y estrategia directa al consumidor. Previamente, director de marketing de Eurosport. El griego tenía seis años cuando su selección y su ídolo, Nikos Galis, ganaron el Eurobasket 87 en Atenas. Salió con sus padres a celebrarlo. Ahora afronta un momento crucial porque la Liga norteamericana planea una nueva competición en el Viejo Continente.

El domingo asistió al partido de la NFL en el Bernabéu, ¿cómo fue la experiencia?

Fue fantástica, por encima de las expectativas. Siempre he pensado que el Bernabéu era un templo para el fútbol y ahora me queda claro que es un templo para el deporte. No puedo esperar al día en el que juguemos allí un partido de la NBA. El nuevo estadio renovado es increíble y la gente se involucró mucho; las entradas estaban agotadas, 78.000 espectadores, con aficionados de todo el mundo. Resultó fantástico.

¿Ve factible entonces que se juegue un partido de la NBA en el Bernabéu?

Todo es posible, hay mucho interés. Hace un par de años, cuando trajimos a Dallas Mavericks a Madrid, el vicecomisionado, Mark Tatum, y yo visitamos el Bernabéu, que todavía estaba en obras. Los responsables nos dijeron, y me lo han reiterado desde entonces, que la intención es albergar todo tipo de eventos deportivos. Tendremos que ver los detalles, cómo hacerlo, pero sería increíble traer a uno o dos equipos de la NBA y jugar un partido.

Nos gustaría que se presentase a los aficionados españoles. ¿Quién es George Aivazoglou?

Gracias por la oportunidad. Me encantan la afición y el ecosistema del baloncesto español, aunque debo decir que como griego ustedes me han hecho sufrir muchas veces, tanto con los clubes como, sobre todo, con la Selección. Soy griego, crecí en una ciudad llamada Salónica, me aficioné al baloncesto muy joven, tanto a la NBA como al europeo, y la vida me ha llevado a cumplir uno de mis sueños: trabajar en la NBA. Cuando era joven, esperaba ser jugador, pero obviamente me di cuenta pronto de la cruda realidad.

¿Soñaba con ser una estrella? Eso nos sucedía a muchos...

Podemos abrir un club, el de los que pretendíamos ser jugadores profesionales y nunca lo fuimos. Me alegra servir al deporte de otra manera.

¿Cuál fue su jugador favorito? Como griego, ¿Nikos Galis?

Sí, Galis. Nací en 1981, así que recuerdo que con seis años mis padres me sacaron a la calle cuando Grecia ganó el Eurobasket en 1987. Y Galis jugaba además en el equipo de mi ciudad, el Aris de Salónica. Aquello fue el inicio del boom del baloncesto griego y aquel hombre sigue siendo adorado, venerado como un dios en Grecia. He tenido la oportunidad de conocerlo, así que... sí, Nikos Galis.

Hablemos del proyecto NBA Europa, que parece en una fase avanzada. ¿En qué punto está realmente?

Hay un impulso tremendo desde que hicimos el anuncio conjunto. Nuestro comisionado, Adam Silver, y el secretario general de la FIBA, Andreas Zagklis, han trabajado sin parar desde marzo. Estamos en una fase avanzada de esta etapa exploratoria. Contratamos dos bancos asesores en verano, JP Morgan y Raine, y mantenemos conversaciones útiles con muchas partes interesadas: inversores, equipos y demás actores. Estamos en una fase muy avanzada del proyecto.

¿Algún equipo ha firmado ya un acuerdo con la NBA Europa?

No puedo hablar sobre las conversaciones que hay activas; pero, como sabrán, estamos trabajando y pensando en lanzar la competición en octubre de 2027, a menos de dos años vista. Queremos empezar con 16 equipos, de los cuales doce serán franquicias permanentes y otros cuatro tendrán que clasificarse. Hay muchos clubes interesados en participar en el proyecto: grandes de baloncesto y clubes de fútbol que no tienen sección pero que quieren tenerla porque la NBA llega a Europa. Estamos en conversaciones con todos.

Como sabe, hay gente crítica en Europa que considera que la NBA se preocupa más por las grandes ciudades que por los equipos. ¿Puede ser eso una forma de pensar más americana que europea?

No lo creo. Y puedo decirles que hay muchos europeos trabajando en este proyecto que conocen muy bien el baloncesto y el deporte europeo en general. También rechazo la idea de que solo se enfoque en ciudades y no en equipos. Creo que hay un equilibrio saludable, y les explico por qué.

Díganos...

Respecto a las ciudades, el baloncesto europeo no está materializando el valor que debería. Es el segundo deporte más popular, como saben, con 270 millones de aficionados en el continente. Crece más rápido que el fútbol. Pero luego ves el valor que generan las ligas de manera conjunta, las paneuropeas y las nacionales, y su aportación no supera el 0,5% de lo que es la industria deportiva en Europa. Los motivos son diversos y los equipos pierden dinero, y también hay razones para eso. Una de ellas es la falta de presencia en algunas grandes ciudades europeas con millones de habitantes e importante afición al baloncesto. Y eso lo vemos cuando llevamos partidos de la NBA a esos lugares: las entradas se venden rápido y hay mucho interés; pero ahora mismo no cuentan con un equipo en la máxima competición. Hemos identificado algunas de esas ciudades como áreas clave para el nuevo proyecto. Ahora bien, la forma en que dar vida a esos equipos es diferente, y eso importa. La NBA es una marca global, queremos asociarnos con tantas marcas globales deportivas como sea posible. Muchas de las conversaciones son con equipos existentes y, como dije, algunos son de baloncesto y otros son clubes de fútbol que quieren crear una sección de baloncesto. Pienso que eso equilibra bien ambos elementos.

En España se da por hecho que quieren contar con el Real Madrid y el Barcelona. Aunque siguen hablando de ciudades, ¿sería realista una NBA en Europa con equipos de Madrid y Barcelona que no sean esos, el Madrid y el Barça?

Son dos de los equipos más grandes del mundo, si no los dos más grandes, los mejores. Y la NBA es una gran marca global, así que lo que queremos es aliarnos también con algunas de las más grandes, las mejores, marcas del mundo. A partir de ahí, no puedo decir que haya nada totalmente descartado, todos los planes son posibles. Pero tenemos clarísima nuestra intención de poner en marcha este proyecto con algunas de las mejores marcas, de Europa y del mundo.

Da la sensación de que el formato está prácticamente rematado con esos 16 equipos, doce de ellos con plaza fija y los otros elegidos a través de la Champions FIBA y las Ligas nacionales. ¿Es así o es posible todavía que haya cambios?

Lo que tenemos ahora en mente creemos que es el mejor plan para empezar, pero obviamente es un proceso y estamos abiertos a opciones y a escuchar a nuestros futuros socios. Hay margen para que lleguen otras opiniones que influyan, aunque tenemos una buena base para arrancar. Lo más interesante es que se puede ampliar esa idea de comenzar con 16 equipos, la cosa puede ser distinta dentro de tres o cuatro años.

También se ha hablado de la sinergia deportiva con la NBA, de la opción de tener equipos europeos en la NBA Cup, plantear otro tipo de torneo… ¿hasta dónde se puede llegar?

Esas posibilidades de colaboración suponen una de las cosas más sugerentes de todas las que se plantean para el futuro. Hay muchas cosas que se pueden hacer que están muy bien para los aficionados. Puedo imaginar un escenario, solo unos pocos años después de que arranque la nueva competición, en el que se haya creado un torneo en el que participen equipos de la actual NBA y de la nueva Liga. Incluso Adam Silver y Mark Tatum han hablado de ello. Se manejan muchas formas de plantear esa integración.

El viejo sueño de David Stern de tener una Conferencia Europea de la NBA quedó aparcado. ¿Se podría reabrir esa puerta?

Como decía, todo puede estar sobre la mesa, pero hay que analizarlo desde un punto de vista práctico: la densidad del calendario, las distancias, los viajes... Ahora es muy difícil plantear algo así. ¿En el futuro? En, pongamos, 15 años, ¿quién sabe? En algún momento podría haber opciones supersónicas de viaje que ahora no existen. Pero la visión, como también expresó el comisionado Stern, es dar pasos hacia una colaboración más amplia, con más mezcla entre competiciones.

La pregunta que tiene en vilo al baloncesto europeo: ¿sigue abierta la puerta a un acuerdo con la Euroliga?

Seguimos abiertos a discutir. Nos hemos reunido varias veces en los seis últimos meses. La última, en Ginebra hace alrededor de un mes. Y aceptaríamos encantados una invitación de FIBA para continuar con las conversaciones. Lo que es obvio es que nosotros creemos que las ideas que he ido exponiendo son las mejores para el futuro del baloncesto europeo, y que también vemos cuáles han sido los problemas que se han convertido en un obstáculo para su desarrollo. Por eso creemos que tenemos que ir alineados en cuanto a las posibilidades que se plantean, pero también en cuanto a esos problemas que ha habido. Eso tendría que ser una parte muy importante en posibles conversaciones futuras.

En un escenario ideal, ¿en qué debería consistir ese acuerdo? ¿Cuáles tendrían que ser los puntos fundamentales?

Tendría que haber una creencia compartida en que ese concepto del que hablamos es el mejor para el desarrollo del baloncesto en Europa, porque además está hecho de la mano de las federaciones y las Ligas nacionales. Eso hace que sea mucho más valioso para la base de la pirámide, que son esas Ligas en las que se está desarrollando el talento joven y se cultiva el interés de las aficiones. Así se puede elevar todo el ecosistema, con eso y con la entrada de algunas ciudades estratégicas a las que no se está incluyendo en el mapa.

El gran caballo de batalla es la generación de ingresos. ¿De verdad ve posible multiplicarlos de forma exponencial?

Sí, al 100%. Pero ¿cómo? Lo primero es reavivar la pasión en la base de esa pirámide de la que hablo. Si miras el deporte más importante, el que más éxito tiene en Europa, que es el fútbol, parte de una estructura fuerte de las Ligas nacionales. Nadie dice “no me importa la Liga” en España o la Premier en Inglaterra, y “solo nos importa la Champions League”. Ambas realidades conviven de forma armónica, con paradas cuando son necesarias, como pasa con los partidos de selecciones. Se hace un esfuerzo para asentar el sistema que no se hace en el baloncesto. Hay que repensar eso, resetear. Y luego está la audiencia, el público.

Y ahí sí puede tener un gran peso la marca de la NBA

No solo es la mejor competición de baloncesto del mundo: es la que atrae a más amantes de este deporte, pero también a otro perfil de aficionados. Los que están interesados en las grandes historias de los mejores jugadores, en cómo su marca mezcla con el mundo de la moda, por ejemplo, con las zapatillas, la música… Eso genera una audiencia mucho más amplia, más diversa, algo que es muy importante desde un punto de vista comercial, para los anunciantes, los expertos en márketing, las plataformas mediáticas... Hay que aprender de eso y hay que diversificar, llegar a grandes países que no están representados.

¿Y cómo se logra eso?

Ahora, solo algo más del 10% de los equipos de Europa puede jugar la Euroliga, con lo que más del 80% de los aficionados no tiene opción de ver a su equipo en la que es la competición principal. Hay que encontrar formas de atraer a esos aficionados. Eso es algo que la NBA sí consigue hacer y se nota en sus ingresos, en esos acuerdos televisivos que valen casi 80.000 millones. Es una marca global, y queremos que la Liga que vamos a poner en marcha también tenga una audiencia global. Hay grandes ciudades que tienen aficionados locales, pero también a nivel mundial, porque sus marcas son internacionales y porque tienen ciudadanos por todo el mundo. Así es como pensamos en nuestra estrategia mediática y en cuanto a creación de contenidos. Ser una Liga para Europa, pero también para el mundo, lo que ayudará a que los equipos sean rentables. Ahora pierden dinero, llevan décadas así. Hay mucho que podemos hacer.

¡Tus opiniones importan!

Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí.