EUROBASKET 2022

Los héroes de Berlín

La Selección jugó un partido fabuloso en semifinales y se ganó el derecho a jugar otra final de Eurobasket. La actuación de varios puntales del equipo pasará a la historia.

Se dice aquello de que era tan difícil, que se podía conseguir. Que los grandes retos existen para eso, precisamente: para superarlos. Es esencia del deporte, pura narrativa. Pero, tópicos al margen, la Selección española es un ejercicio permanente y maravilloso de competitividad. En pleno cambio de ciclo, lastrada por un puñado de bajas a priori cruciales, con un roster nuevo, joven y con muchos cambios… ero con un Sergio Scariolo al frente que está dando otra lección magistral, con su repertorio de variantes defensivas y su reparto de roles en ataque. España, y muy pocos apostaban por ello hace un par de semanas, está en la final del Eurobasket 2022.

Pocas veces ha sido tan difícil, tan imprevisible y, por lo tanto, tan satisfactorio un recorrido de esta España que con Scariolo siempre es reconocible, colectiva, inteligente, competitiva. Un camino con momentos heroicos y muy emotivos (los cruces contra Lituania y Alemania, la remontada contra Finlandia…). Pero el gran hito del trayecto hasta la final fue el increíble triunfo contra la anfitriona Alemania en Berlín, ante casi 15.000 aficionados locales. Un partido para la historia de la Selección que dejó algunos nombres para el recuerdo, ya inolvidables en una noche que también recordaremos siempre.

LORENZO BROWN

Rafael Martín (1935), Emiliano (1963), Brabender (1973), Corbalán (1983), Pau Gasol (2009 y 2015), Navarro (2011) y… ¿Lorenzo Brown? La relación previa de grandísimos jugadores españoles con un año al lado, o dos en el caso de Pau, corresponde a los elegidos como los mejores en un Eurobasket. Y aquí y ahora, en este 2022, Lorenzo se ha metido en la pelea por esa corona de Rey, como lo ha hecho Willy Hernangómez.

San Lorenzo de Berlín, como en octavos ante Lituania, volvió a ser decisivo en ataque. Llevó el ritmo ofensivo en todas sus acciones y demarró en la segunda parte con una explosión encestadora que descabalgó a Alemania. Si ante los bálticos el base descerrajó 28 puntos (12 en la prórroga), esta vez fueron 29. Alcanzó el descanso con 11 y clavó luego 7 en el tercer cuarto y 11 en el último, con un 65% en el tiro (8 de 10 de dos y 3 de 7 de tres más 4 libres sin fallos), a lo que añadió 6 asistencias. Una actuación imponente.

“Bases hay muchos, pero necesitábamos uno titular que pudiese encajar, no en el rol de superestrella para chupárselas todas, sino en nuestros valores y que hiciese mejores a los demás y generase tiros fáciles. Es uno de los jugadores que más asistencias ha dado y que le está dando de comer muy bien a Willy. Ahora es fácil hablar, pero las decisiones hay que tomarlas antes”, explicaba Sergio Scariolo un día antes de la semifinal.

Lorenzo nunca vivió en España, ni jugó para un club de la ACB, pero en esta Selección ha encontrado “hermandad”, así que comienza a hacer planes de futuro: aprende el idioma y piensa en el Mundial de dentro de un año, y en los Juegos de París 2024. Gasol, Navarro y asoma Lorenzo. A ver.

WILLY HERNANGÓMEZ

Willy Hernangómez era uno de los veteranos de este equipo (estuvo en el último oro de España, el de Villeneuve-d’Ascq 2015, y también en el del Mundial de China en 2019) y estaba llamado a convertirse en el gran referente en ataque de la Selección. Y lo está siendo. El Eurobasket de Berlín le ha servido para reivindicarse como uno de los mejores interiores del campeonato y quién sabe, si España gana este domingo a Francia podría acabar como el MVP.

El premio se lo podría estar disputando con Lorenzo Brown. “Quiero que se convierta en una estrella porque tiene talento para ello y a veces se pone límites”, decía sobre él Sergio Scariolo en una entrevista con AS previa a las semifinales. Willy, mucho más maduro que en campeonatos anteriores, ha sabido aprovechar su superioridad en la pintura y su juego de espaldas para sacar ventaja de sus rivales. A falta de la final, el mayor de los Hernangómez promedia 17,6 puntos y 6,8 rebotes para 17,6 de valoración.

USMAN GARUBA

Usman Garuba se incorporó a la concentración casi una semana después. Llegaba entre algodones tras sufrir un esguince en el tobillo izquierdo en la Summer League de la NBA, pero Sergio Scariolo quiso esperarlo y el pívot de los Rockets se ha convertido en una de las piezas fundamentales del equipo en defensa. Por ejemplo, el día de Lituania, en octavos de final, el seleccionador dejó claro que su plan pasaba porque Lorenzo Brown fuera el líder en ataque y Garuba, en defensa.

Ese era su feeling. Antes, el de Azuqueca formó parte de un trío defensivo (y muy efectivo) junto a Joel Parra y Jaime Pradilla en el partido ante Turquía que le brindó el liderato del grupo y despejó un poco su camino hacia las medallas. Ha tenido su momento y ha cumplido con creces en este Eurobasket. Si Willy y Brown son fundamentales en ataque, Garuba y Alberto Díaz lo son en defensa. Pero el pívot muestra también templanza desde el tiro libre. Ante Bélgica falló tres de sus cuatro lanzamientos, pero desde entonces no ha vuelto a errar: 10/10 incluidos los cuatro en semifinales ante Alemania. Además, está conectando bien con sus compañeros (2,4 asistencias) y ayudando mucho en el rebote (5,4, dos de ellos ofensivos).

RUDY FERNÁNDEZ

¿Qué más se puede decir de Rudy Fernández? ¿De un jugador que con 37 años tras una temporada larga con el Madrid y un parte de problemas físicos interminable juega con la vitalidad de un niño? Con su ilusión, con su entrega, con su dedicación… y con una indiferencia por la fragilidad de su cuerpo que haría temblar a cualquier entrenador. Rudy, el capitán, el gran capitán de esta Selección, se embarcó en un barco hacia ningún lugar este verano y lo puso a favor del viento. Con su veteranía y su inteligencia. Con su grandeza, dando mensajitos en voz baja a los árbitros cuando tenía oportunidad y a voz en grito a sus compañeros cuando se apartaban del camino establecido como ante Finlandia. Y puñetazos en la mesa desde el triple y desde la defensa cuando se requerían. Cuando el rival se crecía.

Su fidelidad con España es indiscutible. Es el jugador español con más partidos en un Europeo con 60 y el segundo en la historia en internacionales con 246 partidos, a siete de Juan Carlos Navarro. Todo eso gracias a sus 16 veranos con la Selección, 13 de ellos seguidos (de 2004 a 2016) y una única ausencia (Eurobasket 2017) para un botín imposible de 10 medallas: dos oros Mundiales y tres europeos, dos platas olímpicas y una continental y dos bronces, uno de Juegos y otro de Eurobasket. El domingo será una más, la 11ª, las mismas que Pau Gasol y a solo una de Laia Palau. Historia de nuestro baloncesto. Una leyenda.

ALBERTO DÍAZ

Uno de los grandes generadores del cambio, como ante Lituania en los octavos de final. Se abrió en canal Scariolo poniendo a Brown y Díaz a la vez al empezar el último cuarto contra los alemanes y con Lorenzo tomando un pequeño descanso el malagueño fue sostén. Con el americano al lado, más de lo mismo. Arriba y abajo. Bien plantado en la esquina para dar apertura al juego ofensivo y cerrando la puerta a Dennis Schröder cuando llevaba 30 puntos.

Su presencia es indiscutible, pero en la concentración fue de los primeros descartados y sólo la lesión de Sergio Llull hizo que el seleccionador le recuperara. Y se ha ganado elogios que son verdades. ¿España estaría aquí sin él? Sus 10 puntos en 16 minutos esconden mínimamente el dato más relevante, un +/- que a veces engaña pero es agua cristalina en el caso que nos ocupa: con Alberto Díaz en cancha España generó un +25, siendo el segundo el +11 de Rudy. Al final el muro de Berlín iba a ser un chico que casi no juega el campeonato y que se ha destapado como un pegamento de contacto para esta familia.

JUANCHO HERNANGÓMEZ

Un ejemplo intachable de cómo estar en el momento adecuado en condiciones óptimas. Juancho (26 años) completó una discreta preparación, malas sensaciones para el que debía ser uno de los líderes de esta nueva Selección, y un jugador además que se había perdido los Juegos de Tokio a última hora por un problema burocrático derivado de una lesión y que ha vivido una complicadísima temporada en la NBA, con cuatro traspasos en dos años, tres la temporada pasada.

Pero Juancho estaba ahí, y Scariolo supo tener psicología y mano derecha con él. El alero ha ido poco a poco a más y ha aparecido en su mejor versión en los cruces: 13, 15 y 13 puntos. 13, 15 y 13 de valoración también. Un 12/14 total en tiros de dos en esos tres partidos. Contra Alemania, apareció muy concentrado, activo en defensa y con mucha movilidad en ataque, buscando espacios con los acabar cerca del aro las asistencias de sus compañeros. Anotó en momentos clave, dio oxígeno al equipo con sus recursos y dejó el mate final, el que selló la victoria cuando el tiempo se agotaba. Una gran noche para Juancho Hernangómez, que llega en su mejor momento a la final contra Francia.

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