Vatutin: “La NBA Europa puede destrozar nuestro baloncesto”

Andréi Vatutin, presidente del CSKA de Moscú, uno de los 13 clubes propietarios de la Euroliga, aunque no pueda participar ahora deportivamente en la competición por la sanción a su país desde 2022 por la invasión de Ucrania, ha escrito una interesante columna en el medio ruso Sport Express sobre el desembarco de la NBA en Europa. El dirigente no cierra ninguna puerta y se muestra abierto a una negociación, porque alaba el factor comercial de la liga norteamericana, pero considera importante que los clubes de la Euroliga muestren una posición de unidad. El interés norteamericano actual le parece “un intento de robar un negocio en rápido crecimiento”. De los trece clubes accionistas de la Euroliga, destaca que solo cuatro (entre los que están el Real Madrid y el Barcelona, y parece que el Asvel Villeurbanne) no han firmado la renovación con la competición por otras diez temporadas, hasta 2036 (el actual contrato con IMG, gigante del márketing, finaliza en 2026).

Vatutin deja claro en su exposición que lo que pretende la Liga norteamericana en Europa “no es una expansión de facto de la NBA”, que “los clubes europeos no jugarán partidos contra los Lakers, los Celtics o los Knicks, ni participarán en el draft, y Nikola Jokic y Shai Gilgeous-Alexander no visitarán este lado del Atlántico”.

Con lo anterior quiere contextualizar lo que será la NBA Europa, es decir, una nueva competición muy parecida a la que ya hay en el Viejo Continente: “El plan contempla la creación de una nueva organización de baloncesto bajo una marca reconocida mundialmente. Será básicamente una copia exacta de la existente, con un grupo semicerrado de clubes que, dentro de un único ecosistema, podrán ascender desde una competición de segunda división a la élite. Los partidos podrían durar 48 minutos, pero aún desconocemos esos detalles”.

“La Euroliga vale más de mil millones”

“La falta de detalles, entre otras cosas, dificultará el rápido avance de las negociaciones”, explica Vatutin, que va más allá: “El plan se basa en el modelo comercial de la NBA y en las capacidades de la FIBA ​​como regulador. Al mismo tiempo, no está claro cómo se integrará el torneo con los campeonatos nacionales, cuáles serán las condiciones de entrada y participación de los clubes... Una vez aclarados estos detalles esenciales, todas las partes podrán debatir las medidas futuras en detalle”.

Pero para el dirigente ruso “los planes de la NBA en Europa parecen esencialmente un intento de robar un negocio en rápido crecimiento”. Y lo argumenta así: “Hace unos diez años, la Euroliga prácticamente no tenía valor de mercado, pero ahora la marca está valorada en más de mil millones de euros; nos dimos cuenta de ello durante las recientes negociaciones con posibles inversores. Y la competición tiene una estrategia real que triplicará estas cifras en los próximos cinco años. Es evidente que esto todavía es difícil de comparar con el negocio de la NBA, y los mercados estadounidense y europeo son muy diferentes, pero un progreso constante y progresivo es esencial. Como señalan los expertos, la Euroliga es ahora la competición deportiva que progresa más en el mundo en términos de crecimiento económico y de popularidad”.

“En EE UU no tienen una varita mágica”

Vatutin no cierra puertas a “una cooperación con la NBA, que sería interesante”. “Ellos saben cómo gestionar un negocio y son sensibles a las necesidades de sus aficionados. Si logramos establecer una colaboración constructiva, sería fantástico. Al mismo tiempo, nuestros colegas estadounidenses no tienen una varita mágica. (…) No podrán transformar mágicamente a selectos clubes europeos en franquicias con presupuestos multimillonarios, otorgar a los jugadores contratos de 100 millones de euros ni firmar acuerdos exorbitantes con patrocinadores y cadenas de televisión. Es poco probable que la FIBA ​​ofrezca herramientas similares, ya que sus ingresos anuales totales entre todas las competiciones, selecciones nacionales y clubes son aproximadamente iguales a los de la Euroliga y no están creciendo. Además, la NBA tiene un proyecto fallido en África, que resultó poco rentable y se cerrará pronto”.

El experto dirigente ruso tiene muy claro cuál es el peligro de un desembarco de la NBA sin un acuerdo entre todas las partes: “Si se crea una nueva competición sin la participación de la Euroliga, sin duda será un lamentable acontecimiento para el baloncesto europeo. Un proyecto puramente comercial, dirigido a mercados económicamente ricos, que ignorarán las tradiciones arraigadas y los intereses de la afición, eliminando, por ejemplo, a Serbia y Lituania del panorama competitivo. Además, dividirá a la audiencia tanto a nivel mundial como dentro de cada ciudad, dados los planes para crear secciones de baloncesto dentro de los clubes de fútbol en las ciudades donde ya existen clubes de baloncesto independientes con éxito”.

Para Vatutin la consecuencias están claras: “Si se crea una NBA europea sin la participación de la Euroliga, la propia Euroliga se mantendrá y conservará a los otros clubes. Y eso destrozará nuestro baloncesto. Esto no traerá nada bueno para el desarrollo del deporte; ya lo hemos observado y lo seguimos observando en el ejemplo del enfrentamiento de la Euroliga con la FIBA. (…) Por eso, los clubes accionistas de la Euroliga están intentando presentar un frente unido. Nueve de los 13 clubes, incluido el CSKA, ya han firmado acuerdos de renovación de la licencia; los cuatro restantes responderán más adelante. Siendo justos, cabe señalar que las deliberaciones de estos cuatro clubes sobre su futuro desdibujan un poco la postura general de la Euroliga, pero se enfrentan a decisiones importantes, por lo que la demora en responder es comprensible”.

¡Tus opiniones importan!

Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí.