La ‘Catarata del Niágara’ española... ¡Está en Salamanca!
España reserva su propia versión de una de las localizaciones más emblemáticas de América en el impresionante Pozo de los Humos, en el Parque Natural de Arribes del Duero.
Gracias a la geografía española, no es necesario ir muy lejos para descubrir tesoros naturales que te dejarán la boca abierta. Aunque las Cataratas del Niágara son mundialmente conocidas, en España, un rincón especial te hace transportarte a aquellas cascadas que tantas veces has visto en la televisión.
Las famosas Cataratas del Niágara, ubicadas entre Canadá y Estados Unidos, destacan por sus tres impresionantes caídas: la “catarata canadiense” en Ontario, la “catarata estadounidense” en Nueva York y la más pequeña “catarata Velo de Novia”. Aunque no son las más altas, su amplitud las convierte en las más voluminosas de América del Norte, ya que canalizan toda el agua de los Grandes Lagos.
El nombre “Niágara” proviene de una palabra iroquesa que significa “trueno de agua”. Descubiertas por colonizadores europeos, estas cataratas también han sido una fuente de energía y un ambicioso proyecto de conservación medioambiental.
El río de las Uces tiene su protagonismo
En España, el Parque Natural de Arribes del Duero alberga su propia maravilla acuática, conocida como el “Pozo de los Humos”. Este salto de agua, ubicado en el curso del río las Uces en Salamanca, no solo comparte la majestuosidad de las cataratas, sino que también ofrece una experiencia única.
El “Pozo de los Humos” se forma debido a un cambio abrupto en las rocas causado por una falla geológica en el río de las Uces. Con una caída libre de 50 metros, la cortina de agua crea una nube de vapor que se eleva, ofreciendo un espectáculo inolvidable. A pocos metros de esta cascada, el río se bifurca, dando origen a otra caída llamada el “Pozo de las Vacas”, enriquecido por una leyenda local que narra la caída de un carro tirado por dos vacas cargado de trigo.
Este paraje, habitado por una variada flora y fauna, crea un microclima mediterráneo cálido, donde conviven robles, quejigos, olivos, y diversas especies animales. Así, mientras las Cataratas del Niágara siguen siendo una maravilla mundial, España reserva su propia “Niagara española” en el impresionante Pozo de los Humos, recordándonos la gran diversidad que se encuentra en cada rincón de este hermoso país.