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Victoria Beckham, obligada a huir del restaurante de Bad Bunny junto a su hija por una pelea
La presencia de un hombre ensangrentado por un error de los miembros de seguridad provocó que la británica abandonara el lugar a toda prisa.
La familia Beckham vive días felices en Miami. La llegada de jugadores al Inter Miami como Jordi Alba y Sergio Busquets, pero sobre todo Lionel Messi, ha generado una ola de optimismo mientras se suceden los buenos resultados. Pero más allá de lo que ocurre sobre el césped, la relación que mantienen los tres futbolistas, el presidente y sus respectivas mujeres, se ha vuelto cada vez más estrecha y comienza a ser habitual verles cenando en algún restaurante de la ciudad de Florida.
Sin embargo, una de sus últimas salidas estuvo marcada por el susto que se llevaron Victoria y su hija, Harper Seven. Según ha publicado Daily Mail, se produjo una violenta pelea y la británica tuvo que agarrar de la mano a su hija para huir ante la llegada de un hombre con el rostro ensangrentado. Victoria había estado cenando en el restaurante Gekko junto a su marido, Messi y Antonela, pero el disfrute se vio interrumpido después de que un miembro del personal de seguridad reaccionara de la peor manera con un invitado que pensaban que se quería fotografiar con Messi.
Este incidente se produjo el pasado viernes por la noche pero no ha visto la luz en los medios hasta ahora gracias a un vídeo que un testigo ha filtrado para el medio anteriormente citado. En las imágenes se puede ver cómo la que fuera Posh en las Spice Girls escolta a su hija hasta un todoterreno que esperaba en la puerta conducido por un agente de seguridad.
Todo por un error
También fuera del restaurante un hombre ensangrentado muestra las heridas mientras un amigo confesaba sus intenciones. Según su versión, todo fue un error, pues no quería fotografiarse con Messi ni nadie de esa mesa sino que todo era una cuestión de una foto familiar con su esposa. “Estábamos intentando hacernos una foto y se abalanzaron sobre nosotros, me echaron y me dieron un puñetazo en la cara. Solo porque mi colega intentaba hacerse una foto con su mujer, ni con Beckham ni con Messi ni nada. Era algo familiar”.