TELEVISIÓN

El pasado televisivo de Vanessa y Javier antes de entrar en ‘Gran Hermano’

El reality de Telecinco no es la primera experiencia del matrimonio en televisión ya que incluso llegaron a darse el ‘sí, quiero’ en la pequeña pantalla.

La nueva edición de ‘Gran Hermano’ ha arrancado con gran éxito en Telecinco logrando en su estreno convertirse en líder absoluto de la noche del jueves con un 17,4% de cuota de pantalla. Casi tres millones de espectadores únicos que acompañaron a Jorge Javier Vázquez en la presentación de cada uno de los concursantes donde rápidamente han llamado la atención Vanessa y Javier, un matrimonio gallego que fue separado nada más poner un pie en Guadalix de la Sierra.

Mientras que Vanessa pasa sus días en la casa principal en compañía de participantes como Daniela, Edi, Maica, Ruvens o Elsa, entre otros, su pareja hace lo propio al otro lado del muro en una casa mucho más pequeña sin que su mujer sepa que él también es concursante oficial del reality.

Un matrimonio televisivo

Lo que nadie se esperaba es que Vanessa y Javier cuentan con un pasado en televisión en el que incluso llegaron a darse el ‘sí, quiero’ en la pequeña pantalla, concretamente en el programa ‘¡Casamos!’ de la TVG donde los espectadores fueron testigos de su boda, ese día tan especial para ellos.

“Como vendimos las alianzas por esa desgracia tan grande que tuvimos... Pues ahora es el momento de volver a tener otras... ¡Qué carallo! Así que, si me permites...”, dice Javier en uno de los fragmentos compartidos por la cadena autonómica gallega.

Y no solo eso. La pareja de concursantes de ‘Gran Hermano’ también probó suerte en otro conocido programa de Cuatro, nada más y nada menos que ‘Me cambio de familia’, un formato en el que los participantes debían convivir con las parejas de las otras mujeres durante dos semanas y aceptar las normas de las otras familias.

Las dudas de Vanessa

Vanessa y Javier aterrizaron en ‘Gran Hermano’ como un matrimonio feliz y muy enamorado. Sin embargo, esta historia de amor no ha tardado ni 24 horas en tambalearse después de que la gallega confesara que tiene dudas. “Soy muy activa, tengo que vivir cada instante. Sé que estoy enamorada de él, pero necesito saber si me compensa renunciar a no tener el cariño que necesito”, comenzaba diciendo entre lágrimas en el confesionario.

“Él no me da las cosas que necesito, me cuida, pero también quiero sentirme deseada (...) Creo que si le dijera que esto se acabó, él diría que vale. Lo siento como un familiar, no como una pareja, necesito escuchar que me quiere”, añadía.

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