Tamara Gorro muestra las secuelas físicas de su enfermedad
La influencer atraviesa una fuerte depresión desde hace casi dos años que le está provocando importantes caídas de pelo. “Esto es cada vez peor”, dice.
Tamara Gorro es una de esas famosas que utiliza las redes sociales para contar tanto lo bueno como lo malo. La influencer lleva varios meses haciendo partícipes a sus más de dos millones de seguidores de cada uno de los pasos que da en su larga lucha contra una fuerte depresión que padece desde hace casi dos años. Ahora, la que fuera tronista en ‘Mujeres y hombres y viceversa’ se sincera sobre las secuelas físicas que está sufriendo a raíz de su enfermedad.
Una de las secuelas que más preocupa a Tamara es la fuerte caída de pelo a la que se está enfrentando en las últimas semanas. Incluso ha llegado a mostrar en sus redes sociales algunos de los muchos mechones que pierde al cabo del día. “Otra de las malditas consecuencias… Cada vez más. Llego a tener calvas por algunas partes de la cabeza. ¡Pero también pasará!”, dice en su Instagram mostrando una vez más su positividad a pesar de la adversidad. “Esto cada vez va a peor”, continúa explicando a sus seguidores.
“Ya tengo varias calvas. Así multiplicando por cuatro cada día…”, escribe en uno de sus Instagram stories donde también ha compartido una imagen con la cantidad de pelo perdida. A pesar de este revés, el dermatólogo le ha confirmado que no padece alopecia. “El motivo de la caída de cabello es principalmente mi enfermedad, la medicación que tomo”, explica Tamara. La ex de Ezequiel Garay lleva varios meses tomando una fuerte medicación para revertir la “depresión grave y ansiedad mental” que le fue diagnosticada a finales del año 2020.
La decisión de Tamara
“El estrés, los nervios, la operación… Todo ha influido”, afirma la influencer. Además, revela que el dermatólogo le ha recetado una medicación especial para frenar esta caída del pelo que tanto preocupa a la televisiva. Tamara Gorro termina diciendo que tiene previsto un radical cambio de look a causa de este último revés. “Me lo tendré que cortar y ya está”, concluye.