Sergio Rico y Alba Silva, sobre el accidente: “Queremos olvidar”
El portero y su mujer han concedido una entrevista a ‘Lecturas’, donde hablando del coma que sufrió y cómo se encuentran en la actualidad.
Sergio Rico y Alba Silva viven, como dice la joven, “una segunda oportunidad” en su vida. El guardameta del Paris Saint Germain pasó un total de 26 días en coma. Un tiempo lleno de dudas, de sufrimiento y de obstáculos tras un grave accidente que paralizó sus vidas.
Ahora, la feliz pareja se encuentra ya en su casa, donde ha atendido en exclusiva a la revista ‘Lecturas’, donde han hablado precisamente del coma, y de sus vidas en la actualidad. “Miro a Sergio y siento que la vida me ha dado una segunda oportunidad. Todavía no me creo que haya podido superar tantísimos obstáculos, y me causa una felicidad enorme verlo bien”, comienza señalando ella.
Y es que pese a la gravedad del accidente, Rico admite que “nunca me he planteado que podía haber muerto”, pese a que Alba apunta que “lo hemos sufrido más los que estábamos alrededor que él, porque él estaba dormido. Han sido unos meses muy duros. Ser deportista de élite le ha salvado la vida”.
Alba Silva señala que, en el momento en el que ocurrió el accidente, ella no estaba con el futbolista: “Yo no estaba con Sergio cuando sufrió el accidente. Cuando me lo dijeron me quedé en shock. El peor momento fue llegar al hospital y que me dijeran que era más grave de lo que yo pensaba”. Ya después, con Sergio en el hospital, la joven admite que “no dormía” por las noches: “Me iba a casa y no me sentía cerca de él, eso me creaba intranquilidad”.
La influencer también ha señalado que vivió su primer aniversario de boda “cuando él estaba en coma”: “Lo pasé muy mal. Me acosté llorando y me levanté llorando. Le escribí un mensaje y se lo leí, sentí que me escuchaba. Ahora me ha dicho que no”.
Los planes de futuro
Ahora, ambos disfrutan de su vida. “El accidente es algo que queremos olvidar por el sufrimiento que nos ha causado”, han confesado, añadiendo también que no hacen planes para el futuro, pues la vida les ha enseñado “a no hacer planes a largo plazo”, ni siquiera sobre su paternidad: “No hemos pensado en ser padres, lo que tenga que venir, será”.