Salen a la luz las primeras imágenes de Daniel Sancho en la cárcel

Ya han pasado dos meses desde que Daniel Sancho viera cómo los barrotes de su celda en la prisión de Koh Samui le separaban de la libertad. Más de 60 días en los que poco ha cambiado su rutina dentro de la prisión, pero en los que tampoco ha ignorado el terremoto mediático que fuera de esos muros se estaba viviendo. Sin embargo, pese a que no se ha dejado de repetir su nombre en todo este tiempo, lo cierto es que del asesino confeso de Edwin Arrieta, cuyo juicio tendrá lugar en las próximas semanas, no han trascendido imágenes en el interior de la cárcel. Hasta ahora.

Ha sido en el formato vespertino de Ana Rosa Quintana, TardeAR, donde ha salido a la luz la sorprendente instantánea. La información, conseguida por Alejandro Rodríguez, viene a confirmar lo que muchos entendidos en la normativa de las prisiones tailandesas podían esperar. “Es la imagen más buscada en los últimos meses”, reiteraban en el programa. Su aspecto, reflejo de su situación: se ha desprendido de su larga melena rubia, aparece visiblemente nervioso, con ojeras y las uñas mordidas. Sólo permanecen sus músculos entrenados.

Mascarilla, uniforme e identificador de reo

Tal y como obliga el protocolo de la instalación penitenciaria, Daniel Sancho comparece en el vídeo de pocos segundos con una mascarilla y su identificador como preso colgando en el pecho. Uniforme naranja y pantalones granates. “Casi completamente rapado, con gesto serio, mira a cámara”, narra la voz en la exclusiva pieza. Según han revelado en el programa, esta imagen corresponde al 10 de octubre: menos de un día antes de su emisión.

Desde el programa insistían en la expresividad de la imagen que estaban mostrando. “Estamos acostumbrados a un Sancho presumido. Un chaval guapete. Está musculado, melena larga, rubio. Su bien más preciado lo ha perdido. Es algo que ha afectado a su estatus psicológico, porque verse de esa manera por imposición es duro”, detallaba el reportero, que añadía la opinión del propio Sancho acerca de la difusión de esa imagen: “nos han dicho que está muy enfadado con que hayamos publicado este vídeo”. Ana Rosa zanjaba su rabia: “pues no tienen nada, no atentan contra su imagen”.