Obituarios

Muere Antonio Fernández Díaz, ‘Fosforito’

El cantaor, leyenda del flamenco, ha fallecido este jueves en Málaga a los 93 años; Llave de Oro del Cante, deja un legado irrepetible.

Gianni Ferrari
Nació en Santa Marta de Tormes en 2001 y creció entre Guadalajara y Badajoz. Amante de la literatura, estudió Periodismo en la URJC. Se estrenó como jefe de Cultura en El Generacional. Ha sido corresponsal para El Estilo Libre y conductor de informativos en Cadena COPE. Entró en Diario AS en 2023 como redactor en Actualidad.
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El cante rompe su voz hasta teñir de negro todo el folklore. Antonio Fernández Díaz, ‘Fosforito’, ha cerrado los ojos para siempre a los 93 años en Málaga. El cantaor, que llevó el flamenco por medio planeta, había sido ingresado en el Hospital Carlos Haya de la mentada ciudad andaluza debida a una infección —ya había sido sometido a una intervención quirúrgica de carácter cardíaco hace un mes—, habiéndose producido su deceso en la mañana de este mismo jueves.

Su fallecimiento ha supuesto un luto obligado en el arte jondo, que llora la partida de aquel hombre que supo dominar lo tradicional y mantener la pureza en cada innovación. Nació en Puente Genil (Córdoba) allá por 1932, y desde muy joven demostró que dominaba los registros más exigentes de un estilo de música tan difícil como sentido y hermoso; en 1956 —hace casi 70 años y cuando solo tenía 24— alcanzó la fama al coronarse en el Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba: ganó cinco premios, cosa que nadie jamás ha vuelto a hacer. Luego llegaron los escenarios internacionales. Y, poco a poco, numerosas personas alrededor del globo conocieron el flamenco de la mano de Fosforito.

Una leyenda irrepetible

No era ajena su figura a ningún espectro de la sociedad. Tras conocerse su fallecimiento, Juan Manuel Moreno Bonilla, presidente de la Junta de Andalucía, ha emitido un comunicado a través de redes sociales en el que lamenta la triste noticia. “Se apagó la voz de Antonio Fernández ‘Fosforito’, Medalla de Andalucía y Llave de Oro del Cante. Uno de nuestros cantaores flamencos más universales”, deja por escrito, enviando un abrazo a su familia y amigos y resumiendo en una frase el legado del artista: “Perdurará siempre su huella imborrable en nuestra cultura y en la historia de España”.

Le llovieron en vida los galardones y reconocimientos. En 2005 fue honrado con la Llave de Oro del Cante, uno de los máximos premios que puede recibir un cantaor y que, desde su creación en 1868, tan solo han recibido cinco personas: Tomás ‘El Nitri’, Manuel Vallejo, Antonio Mairena, Camarón de la Isla y el propio Fosforito. En más de siglo y medio, se cuentan con una mano. También condecoran su carrera la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes y la Medalla de Andalucía.

Compartió escenario con leyendas como Paco de Lucía o el propio Camarón. Hizo del flamenco su vida; del folklore, su alma. La misa funeral será en la parroquia de San Pablo de Málaga, donde se venera a la imagen de Jesús Cautivo. Y en el columbario de este mismo templo reposarán para siempre sus cenizas.

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