Macaco: “¿Qué es triunfar? Si te gusta lo que haces ya estás triunfando”

Con casi tres décadas de trayectoria musical a sus espaldas, Daniel Carbonell Heras, conocido artísticamente como Macaco, cuenta con una gran presencia no solo en España sino también en otros países de Europa y Latinoamérica como Argentina, Uruguay y Brasil, donde tocó ante más de 80.000 personas en el festival Rock in Río. El catalán, de 52 años, acumula éxitos y premios como el Ondas en 2009 a mejor álbum por ‘Puerto Presente’ y nominaciones a los Latin Grammy y los MTV Europe Music Awards.

‘Moving’, ‘Con la mano levantá’, ‘Lo quiero todo’ e ‘Hijos de un mismo Dios’ son temas muy reconocibles para el gran público, pero ha sido recientemente cuando ha lanzando su canción más especial: ‘La memoria del corazón’, dedicada a su madre María Teresa y a todos los enfermos de Alzheimer. Un proyecto en colaboración con la Fundación Alzheimer España donde Macaco cede todos los derechos con el objetivo de que las investigaciones y ayudas prosperen.

- ¿Qué le motivó a componer esta canción en homenaje no solo a todos los enfermos de Alzheimer sino también a su madre?

Algo que surgió de una manera natural. Mi madre ya padece por desgracia un alzhéimer avanzado desde hace muchos años, y un buen día, haciéndole unos ejercicios y diferentes cosas para que mantenga los movimientos y los sentidos vivos, me puse a cantar una de sus canciones. Mi madre fue cantante y pianista y cantó muchas canciones de películas en la versión castellana, como ‘Mary Poppins’, ‘Sonrisas y lágrimas’, ‘My fair lady’… y también hizo algunos discos de música yeyé. Me puse a cantarle una de esas canciones que ella cantaba y de repente ella se enganchó y empezó a cantar la canción a la perfección, toda la letra, toda la melodía, se acordaba perfectamente. Y la sorpresa fue alucinante. Eso fue hace un par de años y se convirtió como en un ejercicio más en la relación con mi madre. Y a partir de ahí luego vino todo el tema de la canción.

- ¿Cómo ha afectado la enfermedad tanto a su madre como a su familia en general? ¿Ha cambiado su relación con ella?

Sí, mi madre no se acuerda de lo que le acabo de decir hace diez segundos, y después hace una mezcla muy curiosa entre el presente, el pasado y el futuro. Desde hace un tiempo está en una residencia que está muy bien, y hace un ratito justo que he estado con ella, y vamos viniendo todos los hermanos. Pero estar en casa con una persona que le pusimos para que la cuidara y todo eso pues ya era imposible. Y nosotros, por nuestras vidas, pues imposible también estar con ella.

Por desgracia, porque antiguamente sí que se hacía pero ahora eso es muy complicado, por eso es muy importante que la sanidad pública cuide estos lugares porque cuando te pones a buscar una residencia pues es complicado… Porque hay algunas que tú dices: ‘Yo aquí a mi madre no la meto’. Nosotros podemos, por suerte, pagar una, pero hay que pensar en el colectivo y pensar que todos vamos a acabar allí. Y bueno, la relación con mi madre pues es jugar, ella nos reconoce a los hermanos, ella está conectada con nosotros de una manera muy profunda y espero que sea así hasta el final. Pero hace una mezcla extraña entre cosas, por ejemplo antes me ha dicho que ha ido a casa a cocinar, y yo le sigo el rollo.

- Esta experiencia de componer una canción tan especial, ¿le ha ayudado a cambiar la perspectiva que tenía de la vida o incluso la forma de hacer su música?

Mi música es muy ecléctica, estoy muy acostumbrado a tratar temas sociales, personales y no personales, porque es algo que siento de cerca y siempre lo he sentido así.

-Si echa la mirada atrás, ¿cómo ha evoluciona la música hasta el Macaco de la actualidad?

Paso a paso, la verdad es que soy un afortunado. Toco mucho en directo, he tocado por medio planeta, sigo tocando por muchísimos países, estoy mucho aquí en España y en Latinoamérica… Por ejemplo en marzo estaré de gira por Argentina y Uruguay. Me considero un privilegiado, pero vas evolucionando con lo que vas sintiendo, no hay una cosa programada. Creo que he ido trabajando cada vez más las letras, la poesía, porque soy un amante de la poesía. No complicada, pero que haya juegos de palabras, que te llame la atención, que te motive, que amplifiquen el sentido de la canción, lo que quieres tú expresar, y creo que en esa parte ha habido un avance importante en los últimos discos. Me siento muy orgulloso.

Casi todos mis discos son muy eclécticos, puede haber una canción de amor, pero considero que no la típica canción de amor de ‘oh, qué bonita eres, cuánto te quiero’. Intento que haya más juego y otros caminos, pero también hay canciones que están muy involucradas en temas sociales como el medioambiente, que he estado siempre metido ahí y ahora más que nunca por desgracia por todo lo que está sucediendo. Parece que la gente se empieza a enterar un poco, pero hay artistas, no muchos, de este país que siempre hemos estado en eso.

Repito: por desgracia, no muchos. Y ahora por ejemplo estoy preparando un disco, porque el último que hice era un disco conceptual que iba sobre las relaciones en el amor, con muchas raíces, ramificaciones diferentes, pero ahora estoy haciendo uno jugando mucho con música del mundo entero, la rumba, la cumbia, muchos ritmos diferentes, muy orgánico todo, y con letras pues un poco más afiladas, letras conscientes pero también con ironía y hablando sobre cosas que están sucediendo en el mundo ahora mismo y que pasan a través de mí.

-¿Hay algún artista con el que sueñe una colaboración?

Tengo la suerte de haber colaborado con muchísimos artistas de estilos muy diferentes de muchos países diferentes, unos más conocidos y otros menos conocidos. Me he encontrado gente muy bonita y también a otros que de repente he dicho: ‘Uff, pues ojalá no te hubiera conocido nunca’. Pero ahora mismo no tengo nadie en la cabeza que aparezca por el camino de una manera natural.

-¿Con qué tres palabras definiría su música?

Soy cancionero, me gusta el concepto canción. Me gusta cancionero, de raíz y de antena.

-¿Qué lección es la más importante que le ha dado la música en su trayectoria?

Hay 300.000 aprendizajes, porque forma parte de mi día a día. Que en la imaginación no hay límites, que se puede llegar a todos lados con mucha imaginación y mucho trabajo, jugando e intentando ser uno mismo. Que no hay una fórmula a seguir, sino que lo más importante es hacer la tuya propia.

-¿Qué tema de su repertorio es la que más disfruta en un directo?

Es muy difícil escoger una solo porque a mí me gustan mucho los dinámicos, pero quizás diría ‘Ovejas negras’ o ‘Quiéreme bien’.

-¿Un consejo que le daría a los jóvenes que buscan su hueco y triunfar en la música?

Dar consejos nunca me ha gustado, lo que me gusta es compartir, porque aquí nadie tiene la verdad absoluta. Como decía el poeta: ‘Dar consejos no quiero porque todo el mundo va a aprender de viejo’. Y todos en nuestro camino vamos aprendiendo poquito a poco con nuestros aciertos y errores. Lo que sí haría es suprimir la palabra triunfar, porque hay una gran confusión entre hacer arte y triunfar. ¿Qué es triunfar? Yo diría que disfrutaran del proceso, si tú estás disfrutando del proceso de lo que haces ya estás triunfando. Si no, pueden venir muchas frustraciones según lo grande que sea tu proyección.

-Y ya fuera de la música, ¿le gusta el fútbol?

No soy especialmente futbolero, soy del Barça porque nací aquí, pero veo algún partido con amigos que pueden ser del Madrid y tal pero no soy superfutbolero, no lo soy, soy más de otros deportes. Si veo un buen partido lo sé valorar, pero creo que es un deporte que está extremadamente sobrevalorado. Es mi humilde opinión. Creo también que estas cosas que se han creado de Barça-Madrid, la gente enfadada, gente que se pelea por estas cosas… No lo he entendido nunca. Al final son unos señores persiguiendo una pelota. Que se puedan pelear y que pueda pasar algo así me parece un poco cómico. El deporte mola muchísimo, es tan válido como muchísimos otros, pero esta cosa tan exagerada a veces me abruma un poco.

-¿Le gustan más otros como el tenis, la Fórmula 1…?

El tenis me gusta mucho, por ejemplo. Me gustan mucho los deportes del mar y de montaña, nadar, el surf, el snowboard, me gusta el ping pong… Me gustan mucho los deportes que se practican en la naturaleza, como correr que está bien, la montaña, todo lo que tenga que ver con el mar me flipa.

-Y para usted, ¿quién sería el mejor deportista de la historia?

Guau, qué buena pregunta. Es complicado… En el fútbol por ejemplo he conocido a muchos futbolistas y he visto de todo, como en la música también. Hay cantantes con unos egos desbordados y en el fútbol también, pero también he conocido gente muy bonita. Conocí un día a Messi, que estaba con los Estopa cuando hicieron lo del Cirque du Soleil y me cayó superbién Messi, lo vi un tío que, siendo el number one, lo ví cool, humilde, me cayó muy bien. A otros los he visto más altivos o en falsas humildades que a la que rascas un poco… Detalles que he visto un poco raros. Hay de todo, el ego es muy cabroncete. Pero así un deportista… soy muy fan de Kilian Jornet. Me parece un supercapo de todo lo que hace, una especie de superhéroe nada pretencioso, muy conectado con la naturaleza, que es un ciervo, un monkey libre, que vive en su mundo y que me parece muy bonito y muy auténtico lo que hace.

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